Aquí la lista de lo que se nos hizo lo mejor del año:
Aunque el grupo debería llevar el nombre de James Christian, quien de un tiempo para acá es quien lleva la batuta de toda la producción, los músicos que lo acompañan no demeritan en crédito alguno. El género no ha cambiado a través de los años, su producción, sonido y qué decir de sus letras, te siguen llevando a tener un acercamiento a vivencias personales. Por mucho podría ser mencionado entre los mejores del año y de muchos géneros.
Se hablaba mucho de esta banda de Córdoba, Argentina y con justa razón. De los líderes de esta nueva ola de rock en su país llegó a México con su segundo disco (para nosotros debut) de nombre Es.
Si bien en vivo son una banda potente y atractiva, el disco no se queda atrás, con un bajeo inspirado en Primus y una voz dulce hacen una mezcla gratificante. “Magoo”, “Paraíso En Retro” y “Carne” sirvieron para sobresalir en el rock en español.
In Waves es el quinto álbum de estudio de Trivium, el cual define la carrera de la banda proveniente de Orlando, Florida. Matt Heafy pulió su voz, las guitarras muestran sus influencias de Lizzy Borden, Queen, Megadeth, Metallica y Slayer por mencionar algunos, siendo un disco que muestra el mejor sonido de la banda.
¿Quien dijo que en los 60s todo era amor y paz? Jacula es de esas bandas de rock progresivo que pasaron desapercibidas por allá de 1969 cuando sacaron su primer disco “In Cauda Semper Stat Venenum” y 4 años después lo que oficialmente seria su última producción “Tardo Pede In Magiam Versus”. Estas dos producciones rodeadas por muchas leyendas.
Tuvieron que pasar 38 años para que esta banda nos diera nuevamente un disco el cual fue bautizado como “Pre Viam” el cual, para entenderlo es necesario haber escuchado los primeros trabajos de la banda, el estilo oscuro se mantiene intacto a pesar de los años, podemos decir que es un álbum completamente atmosférico muy recomendable para los fans del progresivo.
Ritual de The Black Dahlia Murder es unos de los discos que sigue conservando el sonido de la banda con conserva la letra cursi, solos increíbles y la voz de Trevor Strnad. Todas las canciones del disco tienen su propia atmósfera.
Sin duda una joya metalera, en voz de su nuevo vocalista David Bower. Agrupación legendaria que vuelve a remasterizar este material, dándole más potencia al heavy metal en el cual se muestran buenos solos de guitarra y una potente batería.
Algo que le da un realce al disco, es el disco que lo acompaña, grabado por Dave G. Halliday, vocalista original que falleciera en 1987. Temas como “In Earth As It Is In Hell” o “Let Battle Commence” bastaron para incluírlos en esta lista.
Una agrupación que prevaleció a este turbulento 2011 con gran éxito en la llamada escena indie fue Metronomy, quién lanzó su tercera producción “The English Riviera”. La cuál estuvo nominada como mejor disco en los Mercury Prize 2011 de Gran Bretaña.
A pesar de sus cambios de integrantes su sonido es mucho más coordinado, con un claro crecimiento musical, dando como resultado un trabajo más cuidado en sus sonidos sin dejar atrás su energía que nos hace bailar. Sus sencillos más recomendables son “The Bay”, “The Look”, y “Everything Goes My Way”.
Más que un concierto o un álbum en directo es un tributo a uno de los grandes vocalistas del hard rock europeo, Steve Lee, quien falleciera hace un año, cumpliendo un sueño.
Este es uno de sus últimos conciertos, precisamente en su ciudad natal, ofrecido precisamente ante gran parte de la gente que lo rodeaba. Sin más que decir, es la mejor manera de poder recordar a una gran persona, a un gran vocalista, a un gran amigo.
Desde Alemania esta gran banda de melodic death metal nos trajo su “Book Of Dowth” un disco que nos sigue confirmando porqué se robó el aprecio de los amantes del género desde su primer álbum “Lupine Essence” en 1997.
Con 10 temas los cuales la mayoría duran entre tres y cuatro minutos tenemos a un SuidAkra mucho más pesado, este último disco sigue la línea de “Crógacht” lanzado en 2009, tal parece que en estos dos años la banda se esforzó por darnos un mejor disco y vaya que lo logró.
Esta banda de rock nacional nos ofrece un material en donde observamos gran cuidado en la calidad y en la composición, sin duda el mejor disco de rock urbano en cuestiones de producción.
De igual manera, el dueto con Benny Rotten de Espécimen en “hipócrita” le da un realce, regresando al Haragán sus inicios, cuando era punk o “Debe Haber Un Lugar”, rindiendo homenaje a su gran maestro Arturo Meza.
Un motivo por el cual buscar el atractivo en el nuevo álbum de Sebastian Bach, es sin duda el hecho de que supo continuar con una carrera solista con gran profesionalismo fuera de sus compañeros y desprenderse de esa estirpe.
Actualmente además, cuenta con la presencia de Nick Sterling, joven guitarrista, bajista, compositor y co productor de esta grabación Kicking & Screaming, en la cual el chico de 21 años crea más que un concepto ad hoc al estilo de Bas y de Bob Jarzombeck, el baterista.
4. OPETH / HERITAGE
A diferencia de “Watershed” el cual en cierta forma mantenía una línea que Opeth venía manejando desde sus inicios como los cambios de voz limpia a gutural. En esta ultima producción la cual lleva por nombre “Heritage” tenemos a un Opeth totalmente nuevo para empezar la voz es completamente limpia. Este álbum nos muestra una nueva etapa de la banda el uso de atmósferas abunda así como los cambios.
Heritage es de esos discos que merecen ser escuchados más de una vez para ser digeridos completamente más aun si estás acostumbrado al viejo sonido de la banda.
Primera placa de un híbrido de Lost Acapulco y Los Explosivos, lleno de poderío garrasposo propio del garaje de la Ciudad de México.
Este disco es bueno por varias razones, una es conciso, pocos temas bien escogidos con letras contagiosas y coreables, además es un refrescante ante las nuevas bandas que suenan muy similar unas a otras. El claro ejemplo de una buena canción garaje son “Cavernicola”, “Nada Que Perder” y “Vas A Llorar”.
Una gran fiesta de principio a fin, desde el primer track quieres tomar en lo más alto un tarro de cerveza y en otra mano, una enorme pierna y comerla como si pertenecieras a la mesa de Odín, o en este caso Ukko.
Un excelente material que trasciende las fronteras del idioma, ya que todo está en finés, imprescindible para conocer lo que es un buen disco de folk metal.
Vic Ratllehead engendró después de varios intentos un disco a la altura de la banda, un regreso afortunado de Ellefson en el bajo y Mustaine rejuveneció al hacer puro thrash metal como lo hacía en sus primeros discos.
Las guitarras frenéticas, canciones políticas, complejidad en la composición y temas como “Public Enemy No.1” y “Whose Life Is It Anyways?” son sencillamente geniales y frescas. A diferencia de los otros cuatro grandes del thrash, en este disco abundan los solos y el headbanging. No se puede pedir más.