En 1998 el Gran Silencio vivió un cambio radical, dejaron lo local que habían conseguido con su disco Dofos y dieron un golpe brutal con su álbum Libres y Locos, el cual los llevó a pisar cada rincón de México y muchas partes del mundo; tan solo era su segundo disco.
Libres Y Locos no era un disco común, a pesar de ser de Monterrey no podías encajarlos en la llamada Avanza Regia ya que no eran del estilo de Jumbo, Zurdok, Plastilina Mosh o incluso Control Machete; ellos tenían un poco de todo y tal vez de la cultura popular de su Monterrey.
También fue su primer contacto con una disquera trasnacional con la cual nunca estuvieron del todo contentos y por eso ya sacan su disco bajo su propio sello, era inevitable que una empresa pop quisiera convertirlos en un producto sencillo, como dirían en su disco Super Riddim Internacional, ‘música fácil para gente fácil’. Pero de todo eso, también sin ese impulso no los hubieran conocido en muchos lados, incluyendo Inglaterra con Joe Strummer de The Clash quien ha declaró ser seguidor de este disco.
Así que este disco significa mucho para la banda y sus seguidores, por eso un concierto homenaje tocándolo de forma íntegra con algunas anécdotas sobre algunos temas que si no fuera por la hora, podrían haber estado ahí en ‘familia’ una hora más.
El Gran Silencio está presente, un contador en una pantalla nos decía que faltaban 10 minutos para recibir a Tony y Cano Hernández con su inseparable Campa en el acordeón.
‘Hoy estamos contentos de tocar completo un disco especial, lo comenzamos en Monterrey y terminamos grabando en Nueva York’ decía Cano y el inicio como dictaba la orden, “Guacharaca Scratch”, la base del acordeón y los tambores ponían a todos a bailar y el la éxtasis llegaría de golpe, una canción que todos se sabían y los que no fueron también la saben “Dormir Soñando” donde recordaba Tony que en el primer Vive Latino que estuvieron los abucheaban por mezclar cumbias y ahora resulta que eso ya es moda.
“Perdido” y “Decadencia” seguían de inmediato, la primera con su especial intro acústico y base de hip hop que explota en un trabalenguas y la segunda que fue ‘el primer video de la banda, los de la disquera decían que solo en México –Ciudad de México- había cámaras chingonas, dijimos que no nos importaba y pues tuvieron que llevarlas a Monterrey’.
“Contrareloj” ponía a todos a cantar con todas sus fuerzas, “Con Sangre Del Norte” se pasó del canto al brinco y los celulares en lo más alto en “No Sabemos Amar”. “Mitote” fue un momento de juego donde no solo se revivían recuerdos sino que había tiempo para jugar ‘encantados’ o como decía Tony, en ‘Monterrey gritamos ‘cerillo’ no ‘desencantado’.
Tomaba el micrófono Cano también conocido como Capricornio Man, comentaba que seguía una canción de amor aunque no lo creyeran, ‘estaba enamorado y una chica me dijo ‘hazme una canción’ y pues por más que me la pase escuchando a Benny Ibarra no me salió y mejor hice esta’ refiriéndose a “Rehilete”.
‘Mientras todos tocaban música hablando del diablo, Control Machete se sentía Cypress Hill, Plastilina Mosh los Beatsie Boys y en la ciudad la Maldita Vecindad cantaba sobre Tin Tan decidimos hacer algo norteño con música de Monterrey por que el rock nacional somos todos, no solo los de aquí y por eso escribimos a Piporro’ decía Tony cuando Campa daba la señal del “Piporro’s Taconazo” que fue acompañada por “Criaturas De Luz”, esa canción que la disquera jamás quiso tener en el disco pero la defendieron y aun cuando pensaron sacarla, en Nueva york el productor los convenció a no hacerlo.
Seguiría la favorita de muchos, la más romántica para los que tienen su corazoncito como Tony, quien decía ‘tenemos muchas canciones de canciones de amor esta fue de las primeras, la número dos y que la neta se la copié a César Costa pero no pude conseguir un suéter de esos y me decían ‘no mames con tus canciones de amor’ y me acordé de Paul McCartney cuando Lennon le dijo ‘no mames con tus tontas canciones de amor’ y entonces me amarré los huevos y dije tengo mi corazoncito cabrones´´ e hice las tontas canciones de amor y tengo 42 y esta es la no. 2’ con eso empezaría “Tonta Canción N. 2”.
Con el “Columpio” solo recordarían su infancia cuando cabían en uno de esos y en “Libres Y Locos” narraban tres locos en especial de la Unidad Morelos de donde son, todos ellos queridos y de quien basaron esta canción y por último, “Yo Soy”, el track oculto en disco pero que ahora no podrían volver a repetir porque todo es USB y tracks quitando el chiste a las grabaciones secretas, una de las causas por las que quieren regresar al vinil. Ahí terminó ese viaje del disco que los hizo famosos a donde jamás pensarían llegar, claro vendría un encore en camino.
Este segundo acto se iría rápido, ya no vendrían tantas anécdotas pero si canciones que no tocan muy a menudo, la medianoche se aproximaba y para la mayoría de los presentes, el metro se cerraba. Así que recetaron como parte final “Soy Nuevo Aquí”, “Tanta Canción De Amor N. 14 (Sabes)”, “Super Riddim Internacional”, “Cumbia Poder”, “El Chuntaro Style” y el adiós, “Circulo Amor”.
Aquí te dejamos la galería completa de El Gran Silencio: