The Kinks de Ray Davis, más de seis razones para seguirlos

Ray Davis el cerebro y motor de la banda inglesa The Kinks, tiene éxito en la crítica, es referente cultural en el mundo del rock, pero no tuvo con su grupo el triunfo comercial de otros conjuntos como The Beatles, The Rolling Stones, The Who, o incluso, Eric Burdon and The Animals.

Como si fuera una tragedia griega o tuvieran una maldición gitana, The Kinks no llegaron a la altura que deberían porque han tomado malas decisiones. Tienen miles de problemas familiares -antes que la banda Oasis– los hermanos Ray y Dave Davis se han dado con todo, no han hecho mancuernas musicales exitosas y fueron vetados de la plaza más importante del mundo, entre otras cosas.

Ray creó temas innovadores escribiendo canciones sobre homosexuales (“Lola”), culturales (“Celluoid Heroes”), ecológicos (“Apeman”). Además de realizar discos conceptuales que no tienen desperdicio como Somethin Else que tiene dos grandes temas “Waterloo Sunset” y “Death of a clown”, y The Village Green Preservation Society que tiene unos bellos arreglos barrocos lo que lo hace una exquisitez.

El inicio de The Kinks

La historia comienza en 1963, cuando The Ravens, así se hacían llamar, después de grabar varios demos uno de ellos llega a manos del productor Shel Talmy. Él que lo llevó a la disquera Pye Records, la cual los contrató para que hicieran tres discos sencillos con el nombre de The Kinks. El primero tenía el tema de Little Richard, “Long tal Sally” y fue un fracaso, el segundo sencillo fue “You still want me” y le fue peor que al primero.

Amenazados por la última oportunidad, Ray se pone las pilas y escribe una de sus primeras joyas, “You really got me” que sale en agosto de 1964, que fue número uno en Inglaterra y siete en Estados Unidos. La discográfica le da manos libres a Ray para que eligiera el siguiente tema y no se equivocaron, con “All day and al lof the night” van a tener su segundo hit.

La compañía les exigía cada vez más y la banda comenzó a tomar Benzedrinas como si fueran chocolates M&M, lo que combinado con alcohol les trajo muchas peleas internas y externas. Una de tantas batallas campales se dio en el set del programa estadounidense Hullabaloo. De qué tamaño serían los daños que provocaron, que la American Federation of Musicians consiguió que el gobierno los vetara cuatro años por conducta poco profesional.

Pye Records estaba muy molesta porque la banda no iba estar en el mercado más importante del mundo y aunque los siguieron contratando las cosas no fueron iguales.

Peleas interminables y buenos discos…

Ray se siguió peleando con su hermano, pero ya sin el estrés de viajar continuamente a Estados Unidos y haciendo conciertos únicamente en el Reino Unido, tuvo tiempo para componer muy buenos discos como The Kink kontroversy (1965) y Face to face (1966).

Será hasta 1970 cuando la banda tendrá su tercer hit “Lola”, tema que está en el disco conceptual Lola vs. The powerman & the money-go-round Pt. 1, el cual tiene una temática crítica en sus letras y una altísima calidad musical. Por cierto, nunca ha salido la segunda parte de este disco.

En las décadas siguientes Ray siguió con la banda haciendo temas increíbles como “Destroyer” o “Prince of the punks” y discos memorables como Muswell Hillbillies (1971), Misfits (1978), Low budget (1979) y World of Mouth (1984).

Sin embargo, no le haría nada mal al viejo Ray que le baje dos rayitas a su intensidad y unir fuerzas con los sobrevivientes de The Beatles, The Rolling Stones, The Who y otros rockeros para hacer temas memorables. Pero es mucho pedir.

En junio del 2002 tocaron en el jardín del Palacio de Buckingham para celebrar el Jubileo de oro de la Reina Isabel II. Ray Davis no se acercó a saludar a su majestad y mucho menos a Roger Taylor, Brian May, Paul McCartney, Eric Clapton, Joe Cocker o Rod Stewart, entre otros rockeros y poperos que cantaron en el cierre del concierto “All you need is love”. Un auténtico ‘amargeitor’.