Pólvora Live
Panteón Rococó por fin tuvo el festejo de su 25 aniversario
Panteón Rococó arrancó los festejos atrasados por sus 25 años. El primer concierto tuvo varios invitados y grandes momentos para recordar.
Fotos: Andree Dulché
El viejo adagio dice que no hay fecha que no se cumpla, y en este caso aplica a la perfección, pues tras dos aplazamientos por culpa del covid-19, por fin se llevó a cabo la celebración por el 25 aniversario de Panteón Rococó. Pura resistencia en el camino.
Pero antes de comenzar a soltar cohetes y vítores, estuvo el reggae suave de Antidoping. Pura vieja escuela para poner al público a calentar garganta y cuerpo. Hubo bailongo, una que otra fumarola de la que da risa, ruido y gente que mientras iban llegando escuchaban a Pepe Grela interpretar varios de los éxitos que los han puesto en el gusto del público. Un preámbulo bastante rítmico y relax para la explosión de emociones que vendría después.
Los 25 de Panteón Rococó
Más de un año esperando por el festejo, más de un año con el boleto guardado esperando por el momento en que Dr. Shenka y compañía salieran al escenario del Foro Sol para seguir dando “Toloache pa mi negra” a sus seguidores, quienes ávidos esperaron por bailar y brincar para quitarse a esa bola de “Asesinos” que han estado al frente del poder en nuestro país.
“Esta noche” sirvió para que la comunión entre Panteón y su público terminará por hacerse realidad. Las manos arriba, los coros a todo volumen y los círculos de slam atiborraron la pista del Foro Sol, mientras que las gradas se movían gracias al ritmo impuesto por sus ocupantes.
La bandera del EZLN lució en lo alto del escenario, casi a propósito para entonar el himno que no es moda, “Estrella roja“. Shenka aprovechó para agradecer a sus seguidores y recordarles que había pasado tanto tiempo que llegaron a pensar que esta celebración jamás llegaría.
“Pero aquí estamos, nos reunimos, aunque no sabíamos dónde estaban los boletos aquí estamos, ¡vivos!”
Invitados al festejo del Panteón
¿Qué sería de un festejo por 25 años sin invitados? Por ello es que Francisco Familiar, el vocalista de DLD fue invitado por Panteón Rococó para cantar “La Rubia y el Demonio“, tema que fue acompañado por fuego en el escenario y en las pantallas que rodean al Foro, haciendo sentir a todos que se encontraban en el mismísimo infierno. Lo único malo, fue que el audio del invitado no estaba ecualizado y hubo momentos donde no se entendía o escuchaba.
Si el primer tercio del concierto fue trepidante, la segunda parte dio un momento para relajarnos a ritmo de reggae, de ese guapachoso que solo el Panteón tiene con “Es tan poco el tiempo”, “¿Qué pasará?” y “Buscándote“. Puro bailecito suave y coqueto, además de aprovechar para grabar las rolitas que no necesariamente son para sacar el estrés a codazos.
“Sólo hoy podemos cantar este tema, no tiene caso hacerlo mañana o pasado mañana, porque hoy es “Viernes de Webeo““. Los vasos con y sin bebida volaron al terminar la frase, todos en pista se arremolinaron para agradecer que la semana laboral había terminado y recordar que la vida es mejor con una chela, y que mejor si la comprabas en pleno concierto de Panteón Rococó. Win-win, le llaman.
Turno para comenzar la seguidilla de canciones del más reciente disco de la banda, con esos covers y homejanes al mero estilo del ska rock para mover el cuerpo. “Si una vez” abrió el camino con Mon Laferte de invitada quien seguramente recibiría aplausos de la propia Selena Quintanilla, tal y como el público lo hizo, especialmente cuando la última frase del tema fue la que arrasó con su potencia vocal y hasta hizo quedar un poquito atrás a Shenka en el intercambio de ‘ese error, es cosa de ayer’.
Leonardo de Lozanne también hizo aparición esta noche para festejar el cuarto de siglo del Panteón. Quién más que él para cantar a dueto “El último ska“, hasta se sintió más romántico el asunto, a pesar de la molestia de algunos en el público, más por su invitación que por su interpretación. Al final, Leo se ganó al público con una simple frase: “¡Arriba Panteón Rococó!“.
Llegó el momento para sacar los discos que padres, madres y abuelitos escuchaban incluso antes que la mayoría de los seguidores del Panteón nacieran. Camilo Sesto, Óscar Chávez y Joan Sebastian fueron honrados en su memoria por Shenka y compañía. De hecho, el tema “25 rosas” se lo dedicó el llamado doctor del ska a su mamá y la de sus compañeros.
El buen Lalo Tex también fue recordado cuando llegó el turno de “Te vas a acordar de mi“, aunque para algunos fue un momento algo extraño, ya que mientras banda y público cantaban ‘cuando otros labios toquen tus labios, y cuando te hagan el amor…‘ en las pantallas aparecía información sobre casos de desapariciones forzadas en México. A otros, la alegoría de extrañar a alguien en el tema de Tex – Tex con las miles de personas que no han vuelto a casa, fue de aplaudir.
A continuación llegó uno de los artistas que inspiraron hace 25 años a un grupo de jóvenes de la Prepa 9 para formar su banda, Rubén Albarrán subiría a una góndola junto a Shenka para entonar “Fugaz“. Las luces de los celulares acompañaron el tema como si fueran estrellas. Hermoso.
Pero aún faltaba lo mejor de la noche, Shenka estuvo acompañado por un maestro del acordeón y un pianista para dar entrada a Santa Fé Klan. La luces se apagaron un instante, los acordes comenzaron a sonar mientras todos los presentes decían que jamás sufrieron, jamás lloraron, que estaban muy feliz y vivían muy bien… “Hasta que te conocí“. El rapero de la Santa Fe sorprendió a todos al entonar el tema del Divo de Juárez con una pasión y tanto sentimiento, que hasta olvidamos que sus rolas hablan sobre lo que sucede en el estado de Guanajuato, de donde es originario
Sin duda, el final perfecto para un segundo acto lleno de amor, reconocimiento y sobre todo, de recordar a aquellas personas que lamentablemente fallecieron por culpa del coronavirus que anda todavía por el mundo.
El final del primer concierto
La noche seguía cayendo pero no así los ánimos de Panteón Rococó y su público, quienes apenas escucharon la intro con La Banda el Recodo de “Acábame de matar”, gritaron de emoción para contarle a los que estuvieran cerca sobre ese maldito, pinche, puto, perro amor. Esta canción la conectaron muy bien con “Mil Horas”, donde participó María León y una vez más dejó en claro que es de las mejores voces que tiene la música mexicana.
“Cumbia del olvido” y “Cariñito” sirvieron de preámbulo para la explosión de júbilo y slam que estaba por llegar. Con una introducción muy bohemia, Shenka comenzó a recitar las estrofas de “La dosis perfecta”, para pedirle a los presentes que lo dieran todo porque era el momento del éxtasis total. Obvio no tuvo que repetirlo dos veces para que una vez más, varios círculos se hicieran en la pista y otros tantos en los pasillos y escaleras de las gradas. Todo lo que tenían atorado o guardado durante el tiempo de cuarentena y lo que siguió de la pandemia, salió de forma inmediata.
Todo tiene un final, y para este primer concierto del Panteón Rococó celebrando su 25 aniversario, no había mejor forma que cerrar la noche con “Arréglame el alma” donde estuvo María Barracuda, “Banderitas y globos” y claro, el tema que los puso en el radar de muchos jóvenes que iban en prepa, secundaria y hasta primaria, esos mismos que al principio del concierto aparecieron en la pantalla dando mensajes de cómo la banda les cambió la vida y los hizo resistir levantando el puño al cielo, que es lo único que sigue subiendo junto a “La carencia”, porque los salarios, pa’bajo.
Los festejos comenzaron con un lleno pletórico en el Foro, 65 mil seguidores cantando enteramente sus rolas y bailándolas, dejando todo lo malo en la pista, celebrando la vida y sobre todo, al Panteón Rococó, que gustosos tomaban selfies una vez terminado el concierto mientras los fuegos artificiales iluminaban el cielo.