Misión de Rescate 2, Chris Hemsworth regresa en modo venganza

Parece que para algunos si hay vida más allá del género de super héroes. Después de hacer del mítico dios nórdico Thor dentro del MCU, Chris Hemsworth parece haber forjado otro camino más rudo al puro estilo de Willis, Schwarzenegger o Stallone, encontrando en Netflix la respuesta con una cinta que conquistó la plataforma a base de golpes, sangre y balazos. Tal fue el éxito que ahora la acción desmedida está de vuelta con Misión de Rescate 2, continuando la leyenda de un tal Tyler Rake.

De que trata Misión de Rescate 2

Después de completar una misión para rescatar a un niño, el experto en extracciones Rake (Hemsworth) está de regreso desde el umbral de la muerte. Ahora, tendrá que enfrentar otro peligroso encargo: rescatar a la familia de un mafioso despiadado. Sin embargo, el duro militar no estará solo y las razones por las que vuelve a la acción se vuelven un tanto más personales.

Tal como en la anterior entrega, Misión de Rescate 2 encuentra su mayor virtud en las secuencias de acción que dan un ritmo intenso a la historia, misma que es bastante similar a la anterior. Sin embargo, los hermanos Russo y Ande Parks le añaden una capa más a Rake para comprender un poco más de su pasado y del porqué decide regresar después de la brutal misión anterior.

Gracias a eso, el director Sam Hargrave, que también regresa detrás de la cámara, es capaz de buscar nuevos lugares y secuencias más ambiciosas para deleitar a los fans de la acción. La secuela ciertamente sigue experimentando esas tomas donde las peleas y los balazos son vistos a través de la cámara casi en primera persona, muy al estilo de un videojuego, que le da un dinamismo inmersivo dentro del relato que ayuda a los golpes de adrenalina.

Sin embargo, a pesar de que ese ya es un sello de la ahora saga de Tyler Rake, Misión de Rescate 2 decide cambiar un poco en cuanto a ciertos aspectos. Uno de ellos es lo visual, ya que la paleta de colores vista en esta secuela es muy diferente a la anterior. Mientras que la primer aventura mostraba colores amarillos y naranjas, Hargrave ahora lo lleva hacia los blancos y azules, dando una esencia más fría (o hasta birllante) a la acción.

No está solo: la trinidad de Rake en Misión de Rescate 2

Otro aspecto interesante es que, a diferencia de la anterior cinta, no todo se llega a centrar en Rake. Aquí, sus compañeros eternos Nik (Golshifteh Farahani) y Yaz (Adam Bessa) le entran al quite de los trancazos, lo que añade una dinámica interesante no sólo por el lazo que se sigue fortaleciendo entre los tres, sino que las secuencias van pasando de uno a otro, añadiéndole un sentido vertiginoso que mete de lleno al espectador.

Asimismo, el factor humano en Rake sigue creciendo. Ahora, se nos ofrece otro vistazo más personal a su pasado y las culpas que carga que van más allá de la muerte de su hijo. Aunque Tyler sigue tratando de lavar sus errores, parece que la venganza o la mala suerte lo sigue alcanzando y no puede librarse de su aparente destino, pues la muerte parece ser su eterna compañera.

El involucrar a los tres personajes más de lleno en el relato es un acierto destacado en esta secuela, pues provoca que la amenaza que se cierne en Misión de Rescate 2, que corre a cargo de Zurab Radiani (Tornike Gogrichiani) y su familia mafiosa, se sienta real. Mientras la cinta corre, el peligro se siente latente y nunca se sabe si esta triada de compañeros por excelencia podrá sobrevivir al loco saldo de cuentas entre Radiani y Rake debido a un lazo extraño que existe entre ambos.

Acción simple y al grano

Claro, también hay que ser claros. Misión de Rescate 2 no intenta reinventar el género de acción ni mucho menos. Si bien existen ciertos aspectos interesantes dentro de la simpleza de la encomienda a la que se enfrenta Rake, realmente sigue las mismas reglas y explota una visión característica que Hargrave estableció desde la primera.

Si bien esto podría ser un contra, realmente no lo es pues ofrece exactamente lo que uno espera de ella. Hemsworth vuelve a ser ese tipo seco, frío, rompemadres que puede matar a cientos y estar muy malherido pero jamás vencido. El villano es la antítesis de Rake, usando claves de honor para hacer el mal e imponer su régimen con todo y una retorcida definición de lo que significa ser una familia.

Aunque eso podría jugarle en contra al sentirse repetitiva, la verdad es que esta secuela (que además deja todo listo para una tercera entrega confirmada en el pasado evento de Tudum) es tan o más entretenida que la anterior, aprovechando la espectacularidad de su acción, apoyándose en efectos visuales o secuencias que no le envidian ni piden nada a algunos blockbusters que actualmente están en cines.

Así, con todo y ciertos tropiezos de ritmo, la vuelta al ruedo de Tyler Rake en Misión de Rescate 2 comprueba que, dentro de las producciones originales recientes de la plataforma roja, han logrado crear una franquicia redituable que esperemos no se gaste como los héroes de acción ochenteros. Mientras, es grato ver que aún sin chistes o sin capa y martillo, Hemsworth ha encontrado un héroe de culto frenético y duro que puede construir todo un legado.