WWE Supershow en la Arena CDMX: México reconoció al jefe tribal

Como dicta la costumbre anual, tocó house show de WWE en México y esta ocasión se sintió especial porque cuando se confirmaron los primeros talentos, destacaba la presencia de la pesadilla americana, Cody Rhodes, semanas después se confirmó que el jefe tribal, Roman Reigns, haría acto de presencia.

La verdad es que aún con el talento confirmado, tenía mis dudas de cómo estaría el show, ya que los últimos 6 o 7 años los eventos que realiza la magna compañía en nuestro país habían estado algo flojos.

Un regreso de ensueño para la WWE

Para empezar, debo aclarar que los house shows son eventos que no son grabados para televisión, entonces regularmente no hay luchas de 5 estrellas ni mucho menos hay riesgo de que los títulos cambien de mano.

Aunque en estos eventos haya más luchas de campeonato que en un PPV, los resultados de las luchas son predecibles, siempre gana el campeón. Ojo, esto no significa que esto destine al evento a ser algo aburrido, al contrario, la mayoría de las personas que asiste ya sabe esto y, por lo tanto, van a disfrutar del cotorreo, de gritar y generar un buen ambiente en respuesta a la gran actuación y desempeño de las estrellas.

Una pista de que este evento iba a ser algo diferente a los años pasados, es que esta ocasión los boletos estuvieron al 2×1 como de costumbre, pero esta vez solo los de las secciones más baratas, en las ediciones anteriores era en la mayoría de las secciones, hasta en las más caras ¿Y por qué fue la promoción en las secciones más baratas? Porque para este año, los demás boletos ya se encontraban agotados, tenía años sin suceder esto.

Al llegar, di una vuelta en la merch pirata y había una gran oferta de playeras, muñecos, peluchas, máscaras, parches y una infinidad de recuerdos a diversos precios, después pasé a ver la merch oficial y aunque tenían gente, se notaba que no estaban vendiendo mucho porque las cajas de mercancía estaban llenas y selladas aún, destacaban unos pequeños posters firmados por Seth Rollins, Cody Rhodes y Matt Riddle, un oso de peluche Rey Mysterio, una playera de Eddie con Rey y otro peluchito de Matt Riddle.

Llegué a mi sección unos 20 minutos antes de la hora citada y el lugar ya estaba lleno, enormes filas para los baños y los alimentos. El show daba inicio y que forma tan majestuosa de iniciar, las luces se apagaron y se escucharon las palabras “Wrestling has more than one royal family” mismas que dan inicio al temazo de Cody Rhodes.

Uno de los momentos más emocionantes de toda la noche y apenas era la primera lucha, la Arena CDMX se llenó de gente cantando el tema de Cody y él se veía totalmente feliz con esto, aprovechó para tomarse algunas selfies y firmar merch para aquellos afortunados que estaban en las primeras filas.

Su rival sería el señor Money in the Bank, Damian Priest, quien fue recibido con una reacción mixta, pero en cuanto comenzó la acción, los gritos en apoyo a Cody eran totales. No quiero analizar tanto los combates porque no suelen ser tan técnicos o movidos, acá se concentran un más en crear mucha energía con la audiencia, dejar en claro quién es el face y quién es el heel, pero en general fue una lucha entretenida con momentos destacables para ambos luchadores y finalizando con la victoria de Cody, quien se despidió con calma de la audiencia y agradeció diversas ocasiones a la audiencia.

La siguiente lucha fue una triple amenaza, Becky Lynch vs Natalya vs Rhea Ripley por el WWE Women’s World Championship. Aunque todos cantaron el intro de Becky y aplaudieron a Nat, el apoyo era total con Rhea, todavía no salía y todos empezaron a gritar “¡Mami! ¡Mami! ¡Mami!”, en cuanto hizo presencia, se escuchaban diversos tipos suspiros y gritos de todas las personas presentes en la Arena.

Definitivamente otra gran elección para continuar con el show, aunque el plan original para esta lucha simplemente era Nat vs Rhea debido a que Becky estaba programada en una lucha contra Charlotte Flair, al parecer todo cambio y estuvo bien, definitivamente el hecho de tener a Becky en esta lucha la hizo más entretenida.

Después de un encuentro reñido, la campeona Rhea Ripley se coronó con la victoria. Aunque como toda buena ruda, atacó a Natalya después de la lucha, pero Becky tiró paro y defendió con éxito a la canadiense, quien fue la última en retirarse del escenario.

El tercer enfrentamiento me emocionó demasiado ya que era el turno de Imperium, por fin se me haría ver al buen Gunther en vivo y que sorpresa, no esperaba que nadie conociera o apoyara a este stable, cuando de la nada volteé y noté que dos infantes con máscaras de Rey Mysterio se pararon de sus asientos e imitaban la pose súper militar que hacen los Imperium.

Fue ahí cuando conecté esto con lo que mencionaba de los boletos sold out; al parecer la WWE ya comienza a tener popularidad en nuestro país otra vez. Siempre lo ha sido, pero desde 2012 o 2013, no recordaba que a la gente le importara tanto el talento nuevo de la empresa.

Obviamente siempre había unos cientos de personas que estábamos al tanto de algunos talentos como Neville o Sami Zayn, pero regularmente cuando salían, las reacciones no eran tan grandes como cuando salían luchadores que ya estaban en sus últimos años como Undertaker o Kane.

Creo que el hecho de ver a niños emocionados por Imperium o la Latino World Order, demuestra que la empresa ya está concretando una buena conexión con la audiencia, recuperando un poco más de calidad en lugar de crear stables como Los Matadores.

Pero bueno, ya para resumir, ni los increíbles machetazos de Gunther fueron suficientes para detener a Matt Riddle, Cruz Del Toro y Joaquin Wilde, los últimos dos en representación de la L.W.O. en una lucha llena de emoción, volteretas y estilo agresivo.

El siguiente momento comenzó increíble, pero terminó en un resultado medio aburrido, me atrevería a decir que el más flojo del momento. La música de The Miz comenzaba y todos se volvieron macacos, es increíble lo que este caballero sabe lograr, podrá no ser el mejor luchador en cuanto a técnica, pero es un asombroso talento como personaje, sabe prender el mood y moverlo a su gusto.

Comenzó siendo súper aplaudido porque ya es uno de los más queridos en la industria, pero en cuestión de segundos y unos cuantos insultos al público mexicano, logró llevarse bastante insultos y abucheos. Mister Awesome dijo que veríamos un segmento de MizTV en español con Rhonda Rousey y Shayna Baszler.

El segmento fue súper corto con lo más destacable siendo Rhonda diciéndole puta a Shayna. Sabemos que esto funciona como un pequeño entrenamiento para su lucha en Summerslam pero chale, que lucha tan aburrida, si bien ambas luchadoras fueron bien recibidas, en menos de dos minutos la energía se sentía por los suelos y eso que la lucha duró menos de 7 ya que Rhonda atacó con una silla a Baszler, inclusive después del enfretamiento Rhonda siguió con los sillazos y estuvo raro porque actualmente ella es la heel abucheada.

La siguiente lucha fue Dirty Dom contra Seth Rollins por el WWE World Heavyweight Championship. Está cabrón como la gente adora a todos los miembros del Judgment Day menos a Dom, es muy divertido ver ese contraste. Por otra parte, Seth Rollins hizo una de las entradas más prendidas y chidas que he visto en un house show, nos tenía a todos coreando por más de 4 minutos.

Fue una lucha típica de Dom, entrando y saliendo del ring para obtener una ventaja mientras es abucheado por sus diversas mañas. Damian y Rhea estaban igual de entregados generando demasiado ambiente en el ringside; la mami le quitó a un fan su cartulina de apoyo a Seth Rollins y se la entregó a Dom para que la rompiera.

Damian golpeó con su maletín a Rollins y esto hizo que el árbitro corriera al Judgment Day del ringside, todavía no alcanzaban de irse de la rampa y Rollins se llevó la victoria.

El highlight de este combate aparte de la entrada de Rollins fue cuando toda la arena le empezó a gritar Peso Pluma a Dominik, joya total.

Después de un pequeño break, continuamos la acción con una lucha bastante chidita, Santos Escobar en representación de L.W.O. contra Austin Theory por el WWE United States Championship. Santos era el favorito de la gente y está increíble que, aunque obviamente sus movimientos han cambiado desde que dejó de ser El Hijo del Fantasma, ha sabido adaptarse al estilo gringo sin perder su estilo.

Al iniciar el combate, Austin se retiró del ring para irse a backstage, en muestra de que no le importaba, pero Santos tomó el micrófono para decire a A-Theory que nosotros, la audiencia bonita y su abuela que estaba presente en las primeras filas, le decíamos el clásico “Ehhhhh…” ya saben en que termina. Por desgracia, ni la abuelita de Santos fue suficiente para evitar la victoria del campeón Austin.

La siguiente lucha fue una triple amenaza, Charlotte Flair vs Shotzi vs Asuka. Charlotte y Asuka fueron las más aplaudida, Shotzi tuvo grandes momentos y demostró que no le pide nada al talento de sus rivales, todo se vio opacado por el castre de la audiencia mexicana que no paraba de gritarle “¡Pelona! ¡Pelona!”. Asuka se llevó la victoria y todos fuimos felices.

El Jefe Tribal conquistó a sus fans en el WWE Supershow

Por fin llegaba el main event y qué pedo lo cabrón que la Ciudad de México ama a Roman Reigns. Yo esperaba escuchar una reacción mixta con una mayoría de abucheos, pero no, muchas personas ya tenían su índice apuntando al aire en señal de reconocimiento del jefe tribal.

Roman, en compañía de Paul Heyman, se enfrentó a Rey Mysterio, quien tuvo apoyo de la audiencia mexicana, aunque no en su totalidad, los gritos de apoyo estaban bastante empatados.

Definitivamente esta fue la lucha de la noche, no fue la más técnica ni nada, pero la audiencia estaba dividida y Mysterio se sacudía en la cuenta del dos después de unos superman punches y lanzas. El 619 de plano no llegaba, Roman se salvó dos o tres ocasiones, y cuando por fin Rey lo conectó, golpearon al árbitro y no se concretó la cuenta de 3. Dom interfirió para distraer a su padre y esto le costó la victoria. Roman retuvo su WWE Undisputed Universal Championship.

Rey se despidió con mucho amor, pidió una disculpa por perder y juro que para la siguiente ocasión, regresaría como campeón o ganaría uno aquí. Bello final aunque igual de flojera que esta rivalidad de padre e hijo siga después de un rato, ya deberían matar ese pedo.

Sin duda la WWE triunfó con uno de los mejores shows en México que han ofrecido en años, ojalá no falte mucho para que se animen a grabar otra vez un show en vivo.

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