Cine
Crítica de Asedio: nunca toques algo que no es tuyo
Asedio tiene una buena premisa en la historia, sin embargo tiene unos lados muy flojitos que pueden hacerte pensar dos veces en ir a verla.
Este fin de semana se estrena Asedio, película de Miguel Ángel Vivas que nos cuenta la historia de Dani (Natalia de Molina) una policía novata que se ve involucrada en un pedote por andar de tentona tocando cosas que no debe.
La película es una producción hispano-mexicana que nos trae Sony Pictures y que a grandes rasgos parece que si funciona en la manera de contar la historia, sin embargo a mi parecer la ejecución es complicada, ya que al querer experimentar puede llegar a ser un tanto frustrante a la vista.
Si bien no niego que esa forma de filmar aumente esta sensación de desahucio, llega a ser complicado ver toda, pero neta, toooda la cinta en un constante desenfoque para el segundo plano, es decir, has visto como tu cámara en modo retrato desenfoca el fondo, pues bueno así con toda la película.
Y es que en realidad mi conflicto también radica que el trabajo de ‘scouting’ para elegir la locación, estuvo bastante acertado por lo que al igual ver lo desmadrado que se encuentra funcionaria bastante bien, pero bueno sin tanto rollo les platico de que va Asedio.
De esto va Asedio
Dani es una policía de Madrid que por órdenes de arriba se dedica a mandar al desahucio por la vía legal a todos aquellos que andan ocupando propiedades sin tener los papeles adecuados, dícese viejitos que no pagan la renta, o indocumentados que andan de ilegales o uno que otro paracaidista ‘ocupa’.
Por lo que todo el escuadrón de la chica tiene que ir a unos condominios a sacar a valedores indocumentados, pero en el proceso la chica encuentra unos buenos dineros que decide tomar para alivianar sus problemas personales, ya que tiene a su madre con temas de salud.
Sin embargo para sorpresa de todos, esa lana la tenía comprometida un vato que le cobraba a los indocumentados por alivianarlos de la tira, misma que también se ve involucrada a causa de un equipo de policías corruptos que se dedican a extorsionar al ‘coyote’.
Luego entonces la pobre de Dani se ve involucrada en una situación de corrupción, un asesinato, las mafias africanas en España y con unas buenas lanas pegadas literalmente a su cuerpo, con lo cual empieza una persecución cabrona por parte de los polis para recuperar a la chica, el dinero y la evidencia que los incrimina en el asesinato.
Los puntos flojos de la película
Además de los puntos antes mencionados, Asedio trata de justificar algunas cosas muy “radicales y tubulares” de una forma muy tibia, el ejemplo más claro es cuando al inicio de la película sale un cántico tribal de las amazonas, el cual únicamente sirve para justificar la última escena de la película.
Otro punto que es bastante flojito en Asedio es el querer alargar muchísimo las escenas para darles un tinte introspectivo y de análisis, el cual la neta solo le rompe el ritmo por completo y simplemente pudieron haber recortado y no hubiera pasado nada.
Conclusión
En conclusión, Asedio es una buena película por el lado de la historia, si destaca al momento de las persecuciones y escenas de acción; sin embargo, desconecté por completo con esas escenas tan de “es arte” ya que la tónica pareciera ser más salvaje.
Además de que tiene una fórmula calcadísima a las historias de España, sin más puedo decir que los primeros 20 minutos son igualitos a la película Venus, donde vemos escenas de antros, electrónica pesada, el aterrizaje a los problemas de la protagonista, etc.
La verdad es que creo que te tiene que gustar mucho el cine español para poder disfrutarla, ya que si se destacan las actuaciones y las capacidades que siempre les voy a aplaudir al cine español de hacer buenas historias en una sola locación.
Si tienes ganas de ver algo extraño y con ganitas de marearte con una buena historia éntrale a Asedio; sin embargo, no esperes llevarte una experiencia tan completa, puesto que de repente vas a ver grandes baches en el filme.
La película se estrena este fin de semana (21 de sep) exclusivamente en salas de cine.