El Exorcista: Creyentes, ni Pazuzu la encuentra entretenida

Medio siglo ha pasado desde el estreno de la mejor película de terror de todos los tiempos, aquella que rompió paradigmas y que generó toda una revolución en la cinematografía, ya que El Exorcista creo todo un producto en el cual todo el género de horror ha mamado de ese éxito y forma de filmar a lo largo de estas 5 décadas.

Sin embargo, si algo nos han enseñado los señores de traje que manejan los dineros en las productoras, es que la nostalgia vende y si eso conlleva a usar tremendo nombre en el título solo para jalar gente, no importa que lo hagas siempre y cuando deje lana en la taquilla, es así como nos llega una película más de El Exorcista la cual de alguna manera es canon, pero a la vez no es continuación, pero a la vez salen personajes de la primera película por lo cual puede que sí, en fin.

Es mejor platicarles de que va la película para posteriormente entrarle sabroso al salseo de las conclusiones y contarles si vale la pena ir a verla o en realidad solo es un bote lleno de vómito verde y pegajoso.

De esto va El Exorcista: Creyentes

La historia nos coloca en la lente de Victor Fielding (Leslie Odom Jr.), un cariñoso esposo que tiene la mala fortuna de perder a su esposa embarazada a causa de un terremoto en Haití, por lo que únicamente en el accidente le sobrevive su pequeña hija Angela (Lidya Jewett).

Trece años después, Angela decide junto a su amiguita del cole, Katherine (Olivia O’Neill) ir al bosque así sin más, “porque morritas” sin embargo, después de jugarle al mago y andar de ociosas jugándole a la invocación (igual que Reagan con Capitán Howdy) las morras terminan invadidas por un ser o seres (el filme no lo aclara) que las van a llevar por todo ese proceso que ya conocemos que terminará por desquiciar a sus padres.

Por azares del destino, en esta ocasión al momento del exorcismo, deciden atacar por todos los flancos, no refugiándose solo en el catolicismo, sino que un pastor y una señora que practica una religión más apegada al caribe, deciden darle con todo a ese demonio que poseyó a las morras.

Una fórmula más que desgastada

Justo como te imaginas, El Exorcista: Creyentes te va a contar la historia que ya te sabes, con el final que ya te sabes, con las escenas que ya te sabes; es una película en extremo tibia que no representa ningún atractivo para el género y que tristemente se recarga en un título que le queda muy grande y en jump scares baratos.

De momentos la película hace tomas a favor de la nostalgia, con esos cuadros a la ciudad en tonalidades frías para sentir desolación y esas casas grandes en donde los secretos aguardan, sin embargo, no hay carisma en absoluto con el ejercicio del exorcismo.

Debemos recordar que algo que hizo grande a la primera película sin duda fue las historias de los sacerdotes, donde había un punto más en donde desgarrar las emociones, acá lo quisieron emular en la historia del padre de Angela, pero les quedó muy chico el pantalón.

Podríamos decir que las buenas intenciones de El Exorcista: Creyentes es hacer una especie de remake de la original, sin embargo, cae en el pozo de quererle copiar a esa misma y a todas las que han venido después, por lo que no tiene esencia alguna y es completamente olvidable.

Además de que el factor de llamar a Ellen Burstyn y Linda Blair para darles vida de nuevo a sus personajes de Chris y Reagan MacNeil respectivamente, se me hizo uno de los movimientos más miserables dentro de toda la industria, ya que ni con calzador las puedes meter en esta historia.

Según el demonio conoce a Chris, pero jamás se especifica si el mítico Pazuzu el que volvió o son otros demonios primos de Pazuzu o si en el infierno tienen una red de comunicación y todos saben las posesiones de todos, en fin, es un despropósito por completo.

La película se estrena este fin de semana (5 oct) en todos los cines del país y pues la neta es que no te la recomiendo mucho, aunque sí debes de saber que es mejor que lo último del universo de El Conjuro, bajo tu propio criterio ve y chécala, o mejor aprovecha a ver la original una vez más.