HEALTH, la sensación actual del noise rock: “las redes sociales han destruido la vida de todos”

Desde hace algunos años, una banda californiana ha sabido colocarse en el gusto de los amantes del noise y la electrónica: HEALTH. Ellos han sabido ser únicos en su juego de géneros que danzan en una profunda oscuridad.

Del archivo polvoroso, les compartimos esta entrevista con Jake Duszik, vocalista y guitarrista y John Famiglietti, bajista de la agrupación, previo al lanzamiento de Rat Wars, álbum ya disponible en todas las plataformas desde el 7 de diciembre.

HEALTH, atrapados en la realidad alterna de las redes sociales

El día que nos encontramos en una famosa tienda de discos en la colonia Roma, fue cuando estrenaron el video de “Ashamed (Of Being Born)“, un bizarro recorrido de Famiglietti entre pasillos de una convención disfrazado del famoso personaje de Asuka Langley Soryu de Evangelion.

“Nuestros fans aman Evangelion y tenemos esta historia con ello. Realmente no estaba tan emocionado de ponerme un disfraz pero lo hicimos con la idea de que tal vez los fans me reconocerían. Y pasó en la Dragon Con, se me acercó muchísima gente, me impactó demasiado.

El video se grabó en dos convenciones distintas, la Dragon Con de Atlanta y la Anime Expo en L.A.“, comentó el bajista.

Rat Wars, título del nuevo material, es un excelente título cuyo origen se encuentra en el pasado de la agrupación.

“Tenemos una canción llamada así en otro álbum y cuando terminamos de grabar este nuevo disco, sentimos que representaba el paisaje musical y la estética del disco, como si fuera una especie de paraje distópico. Nos dimos cuenta que la habíamos cagado al no guardar ese título para un álbum pero al final eso no importó, podemos hacer lo que queramos, ¡es nuestra canción”, dijo el cantante.

“Ese ejemplo lo tomamos de The Doors porque tienen una canción llamada ‘Waiting for the Sun’ y no viene en ese disco sino en el Morrison Hotel. Entonces si ellos pudieron nosotros también,” complementó John.

Lo más sobresaliente es como se entrelaza a la atmósfera pesimista que transmiten a través de la densa mezcla de sonidos que siempre experimentan.

“Sí, por supuesto, es muy oscuro, hermano. Continuamos con las composiciones después de un momento muy siniestro a nivel mundial y mucha de esa oscuridad ha persistido. Están las cosas obvias como la pandemia y las guerras pero otros elementos por igual como la desesperación en silencio y la aburrida distopía.

Estábamos hablando de como todos hemos sido consumidos y puedes verlo de alguna manera. Una de las tragedias adicionales a esos eventos que hablamos es la forma en la que las redes sociales, han destruido la vida de todos y todos son tan infelices. Viven enojados, solo mirando sus teléfonos”, declaró John.

Para HEALTH, es muy tajante la respuesta de que cambios debe haber en la humanidad para que exista un renacer como sociedad.

“Siento que es momento de que los gobiernos regulen el uso de redes sociales. Estas cosas están hechas para hackear tu cerebro y sabemos que son malas, por eso siguen esforzándose en hacerlas ver bien. En 2016 fue cuando cambió el algoritmo y todos empezaron a perder la cabeza”, mencionó Duzsik.

“Es muy interesante como no se ha debatido, especialmente en Estados Unidos que es tan hiper capitalista con toda su libertad de comercio. Por un lado tienes a las compañías tabacaleras cuyo producto mata a la gente y es la industia es más controlada. Pero la razón porque la que la gente sigue fumando es por lo adictivo que es, ¿no?

Lo mismo ocurre con los grandes de la tecnología. Están jugando con nuestra neurobiología, con como mantenernos adictos y se vuelve una cuestión biológica de entre más tiempo pasas en el teléfono y estás enojado, respondes con más estrés a tus alrededores. Pero claro, es más fácil ver el efecto directo del cáncer de garganta o una sobredosis con opioides que el proceso de como YouTube y Twitter se convierten en la ocupación de nuestra alma.

Es tan raro ver la adicción en el mismo nivel que el alcohol o el fentanilo. Hay casos documentados de gente que sufre colapsos nerviosos cuando su teléfono muere. Se quedan de ‘¿ahora que hago?’ ¡No saben ni cómo sentarse por media hora sin su pantalla! Solo no lo usan cuando están dormidos.

Historicamente no ha sido un tempo muy largo, estamos en la infancia del problema. Tal vez cuando la sociedad esté casi por colapsar los gobiernos hagan algo; es una era de transición. Si no estuviera en una banda, borraría esta mierda de inmediato pero debo estar ahí todo el día. Antes de la redes el internet era increíble, antes de que estuviera en tu bolsillo. Es el mal necesario más fascinante que hay.

El punto de las drogas y el alcohol es estar presente, vivir el momento. No me preocupa nada más que la canción que está sonando en ese momento. ¡Tengamos una parrillada y hablemos de la misma cosa ocho veces seguida. Son placeres simples, es lo que importa. Ahora los chicos toman Xanax hecho con fentanilo y fuman vapeador mientras contemplan su teléfono. Es horrible. Lo siento, jóvenes… ¡Este disco va dedicado a ustedes!”, reflexionó Famiglietti.

Tras la profunda reflexión al respecto de la tragedia social que atravesamos, regresamos al tema musical con algunas historias detrás del proyecto DISCO4, un esfuerzo colaborativo que los vio trabajar junto a artistas como NIN, Ghostemane, Soccer Mommy, el recién fallecido The Soft Moon y Poppy.

“Por lo general, lanzamos un álbum de remixes tras cada lanzamientos y debes saber que aunque nos gusta esa consistencia, no queremos hacer algo solo porque sí. Llegamos a un punto en que la gente no le interesaban tanto los remixes y creo que si pagas a un artista grande para que haga ese trabajo, muchas veces no están comprometidos del todo. Entonces llegamos a la idea de porque no hacer la mezcla colaborativa, llevarlo un paso más adelante y hacer las canciones juntas”, expresó Jake.

Pero quizá el dueto más atrevido fue en el tema “Cold Blood” junto a los metaleros de Virginia, Lamb of God.

“Conocimos a Lamb of God de manera aleatoria en una reunión y hablamos apenas unos minutos. Por fortuna encontramos a su management y formalizamos para trabajar juntos. Hablé con Willie (Adler) por teléfono, es muy amable. Honestamente aún no sabíamos como iba a funcionar la canción, nos había pasado unos riffs pero tardamos en encontrar un punto medio.

Después llegó Randy (Blythe) y resulta que su novia era gran fan de HEALTH, así que todo fluyó con él. A mucha gente le gustó demasiado el tema, esperábamos que nos odiaran pero no. Cuando ellos publicaron la canción, alguién comentó que le había gustado hasta que la chica empezaba a cantar… ¡Muchos no sabían que era yo! Tuvimos reacciones increíbles aunque extrañas”, reconoció el cantante entre carcajadas.

Para muchos, la introducción a la música de HEALTH fue a través de videojuegos como Max Payne 3 y GTA Online. Crear música para el mundo gamer, es un goce para ellos.

“¡Creo que el 90% de nuestros fans son gamers! Lo más emocionante de componer un soundtrack es la sensación de crear algo que eleva la experiencia. Cuando hicimos Max Payne 3, pensábamos en los escenarios, si era una ciudad o una selva, de noche o de día, ¿qué clase de música queremos hacer ahí?

Al escribir para tu banda, todo gira alrededor de la canción y quieres que todos le presten atención. En cambio para un medio, debes asistir a la experiencia en general. Y cuando sientes que lo logras, es lo más gratificante“, dijo el bajista, quien aprovecho para reconocer que en su cuarto de hotel le esperaba su Steam Deck aunque tuviese resaca.

Tal es el efecto que han tenido que una de sus participaciones más fuerte ha sido en la franquicia de Cyberpunk 2077 donde por alguna razón, recibieron el nombre de Window Weather.

“Fueron los de CDProjektRed, nos pareció algo estúpido, pensamos que sonaba demasiado europeo. Ni siquiera sé que chingados significa ese nombre. Aunque el que aparezca nuestra canción en el juego y el anime fue maravilloso. Me emociona la idea de jugarlo ahora que lo reiniciaron junto al DLC. Pero primero debo acabar Baldur’s Gate 3 y eso me tomará al menos unos tres meses. ¡Apenas voy en el primer acto y llevo 20 horas! Digo, igual me gusta jugar en la dificultad más difícil, así que…”, concluyó John una risa.