Crítica a Atrapados en lo Profundo, una pandilla de tiburones bien rufianes

Recién tuve la oportunidad de ver Atrapados en lo Profundo (No Way Up), una película que no aporta nada en esta vida y que cae en todos los estereotipos posibles, incluso pareciera que es la misma intención del director Claudio Fäh mostrar una clásica película churra de inicios del milenio.

Y es que teniendo una premisa bien interesante, Atrapados en lo Profundo decide irse por lo básico y mostrarnos a unos personajes super estereotipados en una historia que sabes desde un inicio perfectamente hacia donde va y como va a terminar.

De esto va Atrapados en lo Profundo

La historia nos coloca en la desafortunada aventura de Ava (Sophie McIntosh) la joven hija del gobernador de California, quien decide irse con dos de sus mejores amigos, Kyle (Will Attenborough) y Jed (Jeremias Amoore) a pasar un rato agradable a Los Cabos Baja California.

Para esto la chica no puede viajar sola, puesto que siendo la hija del gobernador debe de viajar con su guardaespaldas personal Brandon (Colm Meaney) quien desde los primeros minutos deja en claro que es un chingón para el tema del cuidado de personal.

Ya luego, la película nos va mostrando a los otros participantes del incidente, una pareja de veteranos con una nieta inglesa, gente random que morirá en el choque y un sobrecargo que es bulleado de la forma más pendeja posible.

Como les adelante, el avión tiene problemas y cae en el pacífico, aquí es donde empiezan los problemas, ya que una manada de tiburones rufianes y un acantilado subacuático les podrán las cosas bien difíciles a los pocos sobrevivientes del vuelo.

Lo bueno de Atrapados en lo Profundo

La fotografía de la película es algo que se disfruta, tiene unas buenas tomas, además de que fuera de todo lo estereotipados que están los personajes, al final se logra rescatar que son unos profesionales y hacen su chamba bien (no todos, claro).

Lo malo de la película

Híjole, es que acá no hay ni por donde empezar, lo malo del guion, las incoherencias narrativas, lo dudoso que es pensar que los tiburones blancos atacan en manada, y lo estúpido y descuidados que pueden ser algunos personajes le quitan un buen de credibilidad.

Y es que el tema radica en que, por ejemplo, en Sharknado y en Megalodón ya sabemos que esperar, pero pensar que esta película agarre una buena premisa y nos la pinten como cosa más seria y se termine cagando en cualquier especulación debido a lo predecible que es, simplemente te hace pensar en el tiempo que perdiste viéndola.

Dentro de las peores cosas de Atrapados en lo Profundo, tenemos que no pasan ni 20 minutos cuando quizá el personaje más interesante de la película termina siendo ceviche para los rufianes tiburones. En el ámbito de las incoherencias, no pasan ni 5 minutos cuando una niña dice que los tiburones les molestan las burbujas y pum, atacan a un rescatista que tiene chingos de burbujas generadas por su tanque de oxígeno.

Y ya para el aderezo, yo no me imagino como es que siendo rescatistas del océano pacífico puedan ser tan descuidados con la fauna, de ahí, vamos ni un arponsito se llevaron sabiendo que hay animales peligrosos.

Prácticamente, es nula la preparación de estos pobres diablos que terminan muertos por imprudentes. Y no amistades, no es que les esté lanzando spoilers, es simplemente que es la misma perra estructura de cualquier churrazo del Scy Fi que pasan en sábado a las 3pm.

Además, toda la perra película me vino a la mente el hecho de que el gobernador del estado de California dejará viajar a su hija en una aerolínea más pedorra que nuestra siempre bien mentada “Viva Aerobus”, y no lo digo yo, ya que en dos ocasiones enfatizan en que la aerolínea es vieja y tiene aviones con falta de mantenimiento.

Conclusión

Que ganas tengo de quejarme de más cosas, pero eso ya sería caerles en spoiler, pero les repito y les confirmo que ustedes mismos lo van a ir intuyendo a los 25 min que lleven de ver este bodrio digno de armarlo en Indios Verdes por 15 varos.

Si se atreven a ir al cine a verla, deben saber que la película se estrena este mismo fin de semana (07 de marzo) en la mayoría de los cines del país. Ve bajo tu propio riesgo y recuerda, por mucho que estigmaticen al tiburón blanco, hay más probabilidad de que mueras ahogado por un nugget de pollo a que un tiburón.