Enola Holmes

Este fin de semana llegó a Netflix la adaptación de la primer entrega de Enola Holmes, serie de libros infantiles escritos por Nancy Springer, spin offs de las aventuras del detective más famoso del mundo. Protagonizada por Millie Bobby Brown (quien también funge como productora), Henry Cavill y Helena Bonham Carter, la película es una amena experiencia para toda la familia que desafortunadamente, termina por arruinar su encanto por el desarrollo de su trama.

Enola vive junto a su madre en un caserón antiguo donde todos los días, se entrena para estar a la par de sus hermanos, los famosos Sherlock y Mycroft. No solo se dedica a leer cuanto libro esté en casa, sino su tiro con arco, movimientos de lucha y accidentadas partidas de tenis. El día de su cumpleaños 16, la madre ha desaparecido. Los hermanos regresan a casa para comenzar la investigación, aunque Enola demostrará estar un paso adelante y encontrará las primeras pistas que la llevarán en una odisea a Londres, donde cruzará caminos con Tewkesbury, heredero de una poderosa familia a la fuga de un intricado plan para asesinarlo.

Sin duda, lo mejor de Enola Holmes es la excelente actuación de Millie Bobby Brown, hasta el momento la mejor de toda su carrera. Nada de “oh, tengo poderes psíquicos, estoy aturdida cada minuto” ni “diablos, Godzilla ataca el mundo, seré valiente y… ay, ya me perdí, que nervios“. Brown es astuta, divertida, sagaz, un personaje que refresca el imaginario de Baker Street y se aleja de las ñoñerías de otras heroínas del estilo como Nancy Drew. Maneja un irresistible humor que rompe la cuarta pared todo el tiempo, ideal para ganarse una buena conexión con el espectador. No lo niego: era escéptico de su talento, pero aquí demuestra que bajo la dirección correcta, tiene el potencial de ser una de las más grandes estrellas en los próximos años.

Mismo caso con Henry Cavill. De la pésima impresión dada en Man of Steel y Martha vs. Superman, se ha convertido en el galán de moda no solo por su atractivo, sino su innegable presencia. Como Sherlock, toma un rol cumplidor, la figura de soporte para nuestra protagonista que a pesar de mostrar un lado chapado a la antigua, está abierto a la visión de su hermana. ¡Mucho mejor que ver al jodido Iron Man de Sherlock otra vez!

Desde el inicio, el filme maneja un tono jovial, entre el humor, la colorida dirección de arte, las animaciones incluidas en cada transición y el soso romance adolescente. Gran parte del discurso planteado deja un buen mensaje sobre perseverancia, valor e inteligencia. Forjar tu propio camino, pero sabiéndote apoyar por las personas correctas. ¡Qué diferencia al idiota individualismo de “el elegido” que predican la mayoría de estas películas! Y claro, un fuerte toque femenino permea toda la cinta, con las actuaciones de Brown y Bonham Carter, así como el contexto sufragista en que se ambienta. Por fortuna, a diferencia de casi toda producción Netflix, no se siente forzado.

A pesar de tanta virtud, tiene un enorme defecto: la trama. Sea Sherlock, sea Enola, el hecho de incluir el apellido Holmes implica un interesante misterio por descubrir… El cual no existe aquí. El giro de la mamá y la subtrama del Conde al final son meros pretextos para el crecimiento de la joven… Lo cual se siente a un manejo perezoso, considerando que todo el asunto dura dos horas. El resto son entretenidas pero nada impactantes persecuciones y duelos. Tan genéricas, que los maloras de bigote retorcido no se hacen esperar. Entre eso y un bache narrativo que pausa el frenético ritmo a mitad de la obra, resta fuerza. Al final si uno mantiene el interés en seguir viendo Enola Holmes, es gracias a Millie y lo carismático de sus peripecias.

Si buscan entretenerse sin mayor pretensión más que echar un par de risas entre las tareas del home office, aquí tienen una buena oferta para desconectarse un rato. Divertida, bien actuada y con posibilidades de mejorar en una secuela. Incluso, aunque se nos vengan a la yugular los puristas, verla doblada al español vale la pena porque la dirección corrió a cargo de Mireya Mendoza. Enola, nos has hecho olvidar sinfín de perradas relacionadas a tu apellido en los últimos años. Gracias.

Calificación: 7.0