Buckcherry regresa al hard rock rápido y potente en Vol. 10

Por alguna razón Buckcherry pertenece a ese gran bonche de bandas que lo hacen todo bien y, aun así, no se les reconoce como debería. Por ahí podemos agregar otras como Godsmack o Three Days Grace, un largo etc.

Josh Todd y compañía son muy activos, nunca están quietos y por eso su pecado podría ser tener mucha música nueva en poco tiempo (dos años por disco), tomando en cuenta que sus fans gustan de disfrutar discos completos más que muchos singles de golpe, es algo así como saber para quien vas. Por otro lado, ni modo que se queden todas estas canciones enlatadas y sean como Guns N’ Roses con un disco cada 15 años.  

Desde su arranque, Buckcherry nos ha dado discos muy entretenidos de principio a fin, otros tal vez no completamente buenos, pero hay que reconocerlo, por cada material hay por lo menos dos o tres canciones de gran nivel. También han cambiado un poco ese estilo de juventud en éxtasis y excesos del propio Todd en temas como “Pornstar” o “Crazy Bitch”, a bajarle un poco al desmadre con baladas como “Sorry” y “Rescue Me”, hasta armándose unos covers de lujo como son “Say Fuck It” y ahora, una verdadera joya en “Summer Of 69”.

‘La fórmula para nosotros es no tener rellenos… tener un gran disco de principio a fin. Eso es lo que queremos, queremos ser capaces de tener estas canciones y melodías inolvidables. Y si no suenan bien, simplemente no las ponemos en los discos’, ha comentado su vocalista Josh Todd.

Han cambiado de integrantes, por lo mismo sacaron unos discos un poco más hard rock y blues, menos actitud punk como fueron Hellbound y Warpaint, y ahora en Vol. 10 le volvieron a agregar adrenalina a ese rock cantable, pegajoso y caliente. Actualmente andan de gira con Skid Row, otros que han resurgido como el ave fénix con su disco The Gang’s All Here y es un combo que se antoja ver.

La fiesta sigue para Buckcherry

Vol. 10 arranca con un buen rock and roll en “This And That”, con slides, riffs fuertes y ganchos en el coro, de esos que ponen el ambiente entre sensual y de fiesta. Hay que decir que todo el álbum está escrito por Todd y su guitarrista de cabecera, Stevie D.

“Good Time” es donde empieza a lucirse la guitarra de Stevie D, energía con una buena base de blues, no puedes pedirle menos a Buckcherry, similar a esta tenemos “Turn It On”, “Shine Yor Light” y “Let’s Get Wild”. Esos momentos punks, veloces como alguna vez los escuchamos en el soundtrack de Misión Imposible 2 con “Alone”, por ahí nos vamos en “Keep On Fighting” pero con una dosis de Mötorhead, bastante rasposa.

Como buena banda de hard rock hay power ballads, aquí hay que mencionar que “Feels Like Love” suena involuntariamente o no, como un grato homenaje a Whitesnake y desde los primeros riffs enganchas con ella. La otra del disco es “Pain”, con el piano como protagonista; aquí es una introspectiva de como uno se autosabotea en todo. Buckcherry tiene muy buenas baladas que las firmaría cualquier banda ochentera.

“One And Only” es otro gran momento del disco, buena velocidad, solos, siguen esos ganchos vocales que perduran por todo el disco y entran a un terreno ligeramente, más oscuro. Aquí en una onda setentera bastante agradable encontramos a “With You”.

Son alrededor de 35 minutos donde Buckcherry te mantiene cantando, no será el mejor disco de su carrera, pero si está en uno de los puestos altos, sobre todo se siente un alivio tras dos discos medianos. El problema con a banda es que hay rolas con su estilo clásico que sientes que has escuchado antes, y a pesar de su buena hechura no las cambiarías por sus clásicos. Los puntos más fuertes son as que no suenan al Buckcherry habitual, esos que se inclinan por mostrar influencias y adaptarlas a su estilo.

Aquí te dejamos Vl. 10 de Buckcherry: