The Cardigans: el regreso del Carnaval al Vive Latino 2020

Tuvieron que pasar 23 años para que al fin, The Cardigans regresará a nuestro país. En aquel entonces, la banda sueca dio un recital en el Teatro Metropólitan cuando apenas sacaban su tercer disco, First Band On The Moon. Como parte de esa promoción, también dieron una entrevista de lo más surreal con Jorge Ortíz de Pinedo. Vayan a Youtube, es lo mejor en humorismo involuntario.

La cita por fin se dio el pasado sábado 14 en el escenario Vive Vero del Vive Latino. No fue una decisión atinada empalmarlos junto a dos de los headliners internacionales del día (The Rasmus y 31 Minutos) pero el quinteto consiguió atraer a varios asistentes y curiosos. Estábamos ante una oportunidad única de ver a una de las bandas más exitosas de los años 90. Ellos mismos han declarado que jamás volverán a grabar y encima, sus conciertos ocasionales ya están contados.

Cada segundo valió la pena desde que las luces apagaron, cuando solo se escuchaba en la oscuridad la dulce voz de Nina cantando una versión a capela del clásico “Sweet Child O’ Mine”, a unas horas de escucharlo junto a la tía Axl. Al caer los reflectores verdes, la chamarra de la cantante lucía un enorme símbolo femenino, mientras en su cabeza, un moño plateado daba el toque coqueto. El inicio fue una avalancha de sus más grandes éxitos, con “Erase/Rewind”, “Lovefool” y “Carnival” a la cabeza. Nadie esperaba que empezarán tan fuerte, pero el baile y los gritos ahí estuvieron al compás de las sonrisas sorprendidas de la banda.

Aunque muchos se desanimaron porque el set no estaba a la altura en cuanto a popularidad, los más fans se regocijaron al escuchar varias canciones de su oscuro Long Gone Before Daylight, su gran guiño al country con “And Then You Kissed Me” y la genial “For What It’s Worth”. El sonido del pop sueco siempre ha sido distinto, fresco, inteligente. The Cardigans son herederos de la esencia de Roxette, una banda que desde sus inicios siempre demostró admiración a los grandes, como Black Sabbath.

No podía faltar el momento folclórico, cuando Nina covereó con gracia el “Cucurrucucú Paloma” de Tomás Méndez. Muy lindo. Aunque esos ánimos mejorarían en la audiencia con más clásicos: “Communication” y “I Need Some Fine Wine and You, You Need To Be Nicer”.

Y si todos vamos a sucumbir ante el infame virus aquel como muchos anhelaban para los asistentes al Vive Latino, al menos nos despedimos en la pista de baile, con el salvaje “My Favourite Game” de fondo, el recuerdo de una mejor época, donde un viaje en autopista era todo lo que necesitabas para sanar las heridas. Larga vida a The Cardigans.