Reseñas Discos
Botellita de Jerez – ¡Naco Es Chido!
Destrozando el estuche de pelcuhe, la obra maestra del rock de los ochentas
Sergio Arau “El UyUyUY”, Armando Vega-Gil “El Cucurrucucú” y Francisco Barrios “El Mastuerzo” mejor conocidos como Botellita de Jerez, después de un par de discos que fueron muy bien recibidos por la banda y la crítica deciden crear su obra maestra ¡Naco es chido!.
En plena época del Mundial de México 86, esta banda de rock mexicanísima realiza su disco más elaborado con una pequeña ayuda de sus amigos: Alex Lora, Sergio Mancera, Guillermo Briseño, Rockdrigo González (palomazo de corazón), Carlos Monsiváis, Armado Montiel.
Desmembrando el estuche de peluche
Con “El club de los corazones rasca-huele del sargento Pérez” inicia el disco que da pie a una rola de los Botellos y Alex Lora, un coro en sus conciertos, un himno de la banda: “Todos tienen tortita menos yo” (Si nunca falta un roto para un descocido que mala pata yo soy el eslabón perdido. Nadie me pela, estoy completamente solo, qué onda más gacha, no tengo solución).
La “Suite del atraco” es la epopeya del gandalla. Que va de Rockdrigo González con“Asalto Chido” (Este es un asalto chido saquen las carteras ya, bájense los pantalones que los vamos a basculear) a Jaime López y el tema “Caite cadáver” (Te toca a ti pagar el pato bato, no le saques no me digas que te vale gato flaco, ya no jales que te toca a ti pagar el pato). Para terminar con Botellita de Jerez y “El Zarco” (En la colonia Garza estaba su cantón, el chueco de los chuecos donde la roló, en Tacubaya los tiras se lo traen en la mira por el callejón. Zarco, ¿dónde vas? Me voy a dar un yoin.).
El lado dos es la fiesta del desmadre
“Canción para una armaño” (Un día lucho contra la Uca, horrible monstruo sin orejas, mocho de un ojo y pocas cejas. No es lo mismo Emeterio, Zacarías, Saturnino y Guajardo).
‘Dicen que ya soy adicto (no puedes parar), dicen que ya le entro a todo. Yo soy consumidor y no me gusta hacerme del rogar, las drogas que me ofrecen, nunca puedo rechazar. Ya me endrogué con una televisión, también ya debo el refrigerador, no lo puedo evitar, ya siento pasos en la habitación. ¡Ah las drogas, no las puedo dejar!’. Sí es “El adicto”.
“La guerra en mi casa”, es la locura de un inquilino pero; ‘Es que yo vivo, en tiempo de guerra, en tiempo de guerra, cualquier hoyo es frontera’.
El material cierra con la odisea Chimalpopunk del “Tlalocman” y el “Guaca rock de la Malinche”. ‘Chulada de maíz prieto cuánta pena a mí me da ¿Qué te apena ser morena?. Con mi cara de nahual de nopal sin rasurar, nariz de chile relleno estoy orgulloso que conste to soy la Raza de Bronce. Si lo mexicano es naco, y lo mexicano es chido entonces ¡verdad de Dios! Todo lo naco es chido’.
El disco fue realizado por Karusell (LPM 12240) y distribuido por Poligram Discos, este fue el final de lo mejor de la banda que revolucionó el rock mexicano de la década de los ochenta que se estaba cerrando a los mismo temas. Se nos acabó el peluche rosa con salsa verde.