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Orinando contra el viento: a cinco años del debut de CHDKF
La banda más pinche fea que vas a escuchar e día de hoy, estrenó un documental por sus primeros cinco años de orinar contra el viento
Todos tienen una perspectiva propia y muy particular de la música, pero sólo por esta ocasión me voy a clavar en Orinando Contra El Viento, el disco debut de Chingadazo de Kung Fu que cumplió cinco años festejando la mediocridad de los perdedores que habitamos el mundo, que nos dispersamos por México, que nos agazapamos en la capital.
La primera vez que pasó por mis oídos, estaba mentalmente derrotado sobre un sillón del Foro Bizarro de la Hipódromo-Condesa. Era el Festival Marvin y creí que una tarde con amigos, trabajando full, podría evitar que me cortara los brazos con una navaja de doble filo que ya entraba en el proceso de oxidación. Mi mejor amiga por dos o tres años.
“…Pasan los días y sigo perdiendo con líneas mas largas y tragos mas fuertes. Llevo semanas viviendo así, yo ya no recuerdo cuando era feliz, pero creo que alguna vez lo fui…”
El Bruce estaba excitado en medio de un slam súper flojo, atascado de adolescentes que prefieren los abrazos a la violencia de un puño sobre tu nariz, que saben llorar, que no les da miedo verse vulnerables o identificarse como un auténtico perdedor en letras como “Rehab”, “Imape”, “Azul Turquesa” o “Nena la fiesta terminó”.
Yo… en la esquina del escenario con la cámara réflex en las manos, tomando algunas buenas fotografías de la banda para quien sea que las quiera publicar y darle un poquito de satisfacción profesional a mi (lo contrario del ego) carrera de mierda. Por primera y única vez dejé de sentirme solo.
Mi corazón fue abrazado por los muchos fracasados presentes. En el trabajo, en el amor, en los estudios, en la familia, en el juego, en la vida. No es necesario que todos perdamos en la misma categoría. Elige la tuya.
Orinando contra el viendo: el documental
“En la vida, sólo va a haber un ganador, perdedores somos un chingo”, lo confirmó Marino, vocalista y bajista, en el reciente documental de aniversario que lanzaron a través de YouTube, donde cuentan cada detalle detrás del disco que los llevó a la cima de la escena punk rock mexicana.
El proyecto fue dirigido por Guille Alvarez en colaboración con Lalo Landeros, RaRaRa Films (concierto en vivo) y Erik Yiyi (audio en vivo) y con fotografías de archivo a cargo de Jorge Garaiz, entre otros.
Por el cíclope de cristal (dirían los Divididos) desfilan un montón de ex integrantes, familiares, colaboradores y, claro, los protagonistas de la historia, quienes narran con un orgullo nunca antes estudiado, la rotura de sus carreras profesionales, de sus matrimonios, de sus intentos rocanroleros, del desenlace que todo aquello tuvo.
Además, el documental viene acompañado de cinco temas grabados en junio de 2020 en el Foro.mx, durante el show de aniversario del “Orinando Contra el Viento”, el último de la segunda alineación de la banda, con Beto en la batería.
Chingadazo de Kung Fu no es una banda exitosa por ser los mejores músicos de México, tampoco por ser guapos, altos y blancos, no escriben himnos generacionales y no son carne fresca para las disqueras.
Este dueto (y amigos) tienen camaradas -no fanáticos- porque hablan desde las tripas, desde su destrozado corazón, escriben con la neta, no para generar ingresos, ni para obtener discos de oro, más bien para llorar, drogarse, emborracharse, volver a empezar.
Resulta fácil identificarse dentro de un disco como el Orinando Contra el Viento, por eso, es fácil adoptarlo como el soundtrack de tu vida. Marino y Alejandro son esperanza para la gente que ahorita se siente de la verga: siempre hay una salida, amixes, lo único que necesitan es pasión: