Tres formas diferentes de jugar Crash Bandicoot 4: It’s About Time

Como buen jovenazo nintendero, Crash Bandicoot fue un gusto adquirido con los años gracias a que la mayoría de mis conocidos en la vida post universitaria, fans de PlayStation, me introdujeron a la trilogía original. De inmediato nació el amor y con la salida de los remakes en N. Sane Trilogy, aumentó aún más; sobre todo un título con tanta inventiva como fue Warped. En 2020, 22 años después y sin consideración alguna hacia el resto de los títulos 3D que aparecieron en consolas como PS2 y Gamecube, llegó de la mano de Toys For Bob y Activision, Crash Bandicoot 4: It’s About Time, el sucesor digno que la saga merecía.

En este espacio, nuestro querido colaborador Parker nos comentó sobre las virtudes de It’s About Time en su llegada a PS4 y Xbox One. Entonces, ¿para qué otra reseña? Porque queremos, podemos y ahora el juego expande sus horizontes a tres nuevos sistemas de los cuales hablaré aquí: PS5, Switch y PC. De estas tres, ¿cuál versión te conviene comprar? Quédate unos párrafos más.

Una aventura nostálgica

Crash Bandicoot 4 es un excelente juego de plataformas, la aventura clásica del marsupial llena de acción y toda la frustración característica de la vibra noventera de los inicios de la saga. En esta nueva cruzada a través de distintas eras y dimensiones contra los villanos Cortex y Nefarious Tropy, Toys For Bob retomó el concepto de niveles lineales pero plagados de secretos por descubrir que tanto encantaron a una generación.

Mucho ha mejorado desde entonces y nuevas opciones lo vuelven un juego indispensable. Al comenzar, puedes elegir tu forma de juego: la clásica o la moderna. Con respecto a la primera, simplemente acabas todas tus vidas y debes reiniciar el nivel desde el principio. En la moderna, puedes reiniciar desde el último checkpoint sin importar cuantas veces mueras. ¿Crees que esto lo vuelve más fácil? Jojo, cuanta ingenuidad. Al contrario: si buscas conseguir cada gema del nivel, no puedes morir más de tres veces. Y las gemas ahora tienen un mayor propósito que vanagloriarse en tus habilidades nerd: si consigues todas en cada escena, desbloquearás nuevos atuendos para Crash y Coco. Genial.

Además de las gemas, uno de los tesoros a encontrar en determinadas escenas es un viejo VHS que desbloqueará los Flashback Levels, los cuales solo podrás conseguir si no has perdido una vida en tu primer intento. Aquí nos vamos al principio de la historia de Crash, cuando el Dr. Cortex lo usaba como sujeto de pruebas. Estos son algunos de los niveles más complicados de todo el juego, pues las plataformas son escasas y debes moverte con agilidad entre cajas. Un desafío que los más clavados amarán.

Y no, esos no son todos los niveles disponibles en el título. Gracias a las líneas alternativas, podrás jugar en algunas ocasiones como el Dr. Cortex, su secuaz Dingodile y una versión estilizada de Tawna, la vieja novia de Crash. Cada uno de ellos cuenta con habilidades distintas: Cortex usa su pistola de rayos para aparecer plataformas, Dingodile una aspiradora para mover objetos y Tawna un gancho a la Bionic Commando. Si eres un masoquista, puedes intentar pasarlas con Crash o Coco, por si sientes aún le hace falta más desafío a tu vida.

La nueva mecánica de Crash Bandicoot 4 es el uso de las máscaras cuánticas, una idea que le añade mucha variedad al diseño. La primera de ellas te permitirá aparecer y desaparecer plataformas y obstáculos para progresar. Una más te dejará jugar con la gravedad en algunos momentos para avanzar hasta en el techo de los niveles. Hay mucha prueba y error pero no sería un juego de Crash si no fuese así.

Los más nostálgicos amarán el modo Pass N. Play. ¿Recuerdas cuándo ibas a casa de tu amigo y jugaban “de a vida”? Los desarrolladores tomaron ese concepto y hasta cuatro jugadores pueden unirse con un solo control para jugar por vida o hasta terminar un nivel. Lo divertido es ver quien logra avanzar y conseguir más objetos. Quizá ahora en pandemia no sirva mucho pero es la opción a futuro.

Finalmente, en temas técnicos, el control es muy preciso y la cámara toma ángulos más favorables para seguir tu camino. Entre las novedades, hay una característica idónea para los jugadores principiantes. Si sientes inseguridad en tus saltos, puedes activar una marca que indica en donde caerás exactamente y puedas manipular tu descenso. ¿Ya te convenciste de que debes jugarlo?

¿PS5, Switch o PC?

Después de pasar un rato con las tres versiones de Crash Bandicoot 4, realmente depende de tus preferencias. De entrada si ya tenías la edición del PS4, cuentas con el upgrade gratuito al PS5. Aquí puedes disfrutar de gráficos en 4K a 60 fps, tiempos de carga rápidos, un flamante sonido 3D (ideal si tienes audífonos 3D HyperX o Sennheiser) y el control ofrece gatillos adaptables al momento. Esto lo puedes sentir a mayor precisión en los escenarios de Tawna al usar su gancho.

La versión de Switch es la más comprometida en el apartado técnico pero no por ello es mal port. De repente tiene las típicas texturas extrañas que tienen casi todos los juegos third party (jamás superaré ese cabello en Mortal Kombat 11) y sí, los tiempos de carga son un poco más largos. Sin embargo, nada se compara al bello placer de jugarlo en modo portátil a poderosos 720p con repentina caída de cuadros (aunque no afecta la experiencia final).

Con un 2×1 en Sony (lo mismo en Xbox) y jugarlo en portátil con Nintendo, la PC no cuenta con ese bonus llamativo. El desempeño es tan bueno como en consolas de nueva generación pero solo es una versión que los PC Master Race amarán. O quizá no, porque no usan Battle.net más que para Warcraft. Así es, ni sueñes que lo verás en Windows 10 o Steam al menos en un buen rato.

Crash Bandicoot 4: It’s About Time es una gran joya, el juego que los fans siempre esperaron aunque ojalá, se mantenga otro buen rato en pausa para apreciar sus cualidades. De estos nuevos ports, el veredicto dicta que te vayas por la versión del PS5, sin demeritar al resto, claro.