Pólvora Live
El esperado regreso de Mägo de Oz a la Arena Ciudad de México
Fotos: Daniel “Rosh” Márquez
Contra viento y pandemia, finalmente Mägo de Oz pudo realizar una gira fuera de España. Aunque las condiciones sanitarias han mejorado aún hay ciertas medidas qué seguir para evitar que la tasa de contagios se vuelva a disparar, afortunadamente en países como Estados Unidos y México, las condiciones ya son favorables para presentar conciertos tanto en recintos abiertos como cerrados.
La nueva aventura de Mägo en América inició en los Estados Unidos, donde ofrecieron varios conciertos logrando una muy buena respuesta, pero sin duda el platillo fuerte era la Ciudad de México, la fecha del cierre de esta gira por continente americano, por lo que Mägo sumó a Saurom para esta presentación, la cual desde el previo ya se antojaba que sería un concierto especial.
Saurom a la conquista de la Arena Ciudad de México
¿La cita? el 20 de noviembre. Miles de fanáticos acudieron fielmente a este llamado musical para casi llenar a tope la Arena CDMX.
La actividad inició a las 20:30 hrs. con Saurom, una banda que no es para nada una desconocida para el público mexicano, solo basta ver su historial para darse cuenta que ya cuentan con presentaciones previas bastante exitosas desde 2013, una en el Foro Alicia y tres más en el Circo Volador.
Las oportunidades se crean y se aprovechan, y es lo que Saurom hizo esta noche. Ofreciendo un set balanceado para complacer a sus fans que llevan varios años siguiéndolos, y también para seguir sumando nuevos adeptos que aún no los conocían.
Aunque ofrecen en promedio una presentación de alrededor de 28 canciones cuando se presentan en solitario en la Ciudad de México, sabíamos que en esta ocasión el tiempo iba a ser limitado. Pero a pesar de esta condición, iniciaron con uno de los temas más largos que tienen “El Monte de las Ánimas”, sin perder tiempo llegó un golpe heavy con “Irae Dei”, logrando conectar con este bloque inicial con todos los que ya estaban al interior del recinto.
El previo nos anunciaba una fiesta folk, por lo que Saurom cumplió en el papel e inició un segundo bloque con canciones como “La leyenda de Gambrinus”, “Músico de Calle” y “La Batalla con los Cueros de Vino”, el cual puso a brincar a muchos de los presentes e incluso al terminó del último tema comenzó a escucharse el “Ole, ole Saurom, Saurom…” entre los asistentes.
Luego de tener un buen inicio y ver la confianza del público, los músicos bajaron un poco las revoluciones para ofrecernos una tripleta de canciones nuevas, “Cuando Nadie Nos Ve” fue la primera, la cual fue acompañada con las luces de los celulares de los asistentes. “Amanecer”, que fue una buena canción para la parte media de esta presentación y de nueva cuenta, ya con energías repuestas, la fiesta se reanudaría con “Salta”, donde previamente Miguel Franco pidió a los asistentes que hicieran temblar el piso.
Bajo una luz roja y con un ente salido del inframundo que bailaba en el escenario cargando una bandera de México llegó “El Carnaval del Diablo”. Casi todas las secciones de la Arena Ciudad de México ya lucían llenas, por lo que era el momento de invocar el “Círculo Juglar”, Miguel dio las indicaciones y las personas que estaban en la pista hicieron lo propio al realizar un círculo lo bastante grande para bailar a ritmo de dicha canción.
Miguel hizo una pausa para recordarnos que el platillo estelar estaba por llegar pero antes había una sorpresa, misma que arrancó miles de gritos ya que en el escenario aparecieron Zeta, Patricia Tapia y Josema de Mägo de Oz, para ofrecer una colaboración con el tema “La Noche de Halloween”, mismo que apenas hace unas semanas escuchamos interpretada por Mägo de Oz para el disco tributo a Saurom, “Mester de la Juglaría”.
Después de esta sorpresa solo quedaba poner el cierre a la fiesta juglar, el cual vino con “La Taberna”. Al finalizar el púbico rindió una ovación para Saurom y con la emoción aún a tope José Gallardo decidió aventarse hacia él.
Sin duda, de todas las bandas que han sido invitadas por Mägo de Oz para abrir sus presentaciones en CDMX, Saurom ha sido la que mejor lo ha hecho, la que mejor conectó, en parte por tener detrás una base de fans que los han seguido desde hace varios años, y otra parte, porque por momentos los estilos musicales de ambas agrupaciones son muy similares.
La travesía pirata de Mägo de Oz
Luego de un excelente acto previo, venía el descanso obligado en lo que todo quedaba a punto para recibir a Mägo de Oz. Para hacer la espera un poco menos aburrida, la Arena Ciudad de México implemento una Fun Cam, la cual los fanáticos de Mägo de Oz la usaron como Kiss Cam. Todos pasaron un buen rato.
Las estatuas de sirenas colocadas a los costados prendieron sus ojos rojos en señal de que la hora esperada estaba por llegar. Pasadas las 22:00 hrs. las luces del recinto se apagaron para dar paso a Mägo de Oz.
La cortina negra que cubría el escenario cayó y dejó a la vista de todos una escenografía de un barco pirata. Por supuesto, muchos recordaron el barco usado por la agrupación en el concierto de Madrid, en Las Ventas, durante la presentación del disco Gaia.
“Al abordaje” fue el llamado perfecto para unirse a Mägo en esta travesía pirata. Sin perder tiempo y ligadas a este tema inicial escuchamos “El Libro de las Sombras” y “El Amor Brujo”. Desafortunadamente el audio no fue el mejor para este acto estelar, por momentos se escuchaba muy bajo o algunos de los instrumentos se perdían, aunque poco a poco este aspecto se fue recuperando a lo largo de la presentación.
Zeta dio una breve pero calurosa bienvenida al público señalando que el grupo ya tenía ganas de volver a México, para que después todo se tiñería de rojo y recibir a “Astaroth”. De nuevo Zeta habló para dar la indicación de que regresaríamos a la época de los “Hechizos, Pócimas y Brujería”, disco de su debut, de ahí también escuchamos “Xanandra”, la cual siguió de uno de los clásicos “Diabulus In Música”.
Por supuesto que la pandemia tenía que ser uno de los temas comentados durante la noche, recordemos que “gracias” a esto Mägo tuvo que retrasar en dos ocasiones esta presentación. Zeta nos comentó cómo vivió este duro proceso que también sirvió para componer la canción “Resacoxis en Pandemia”, la cual fue cantada por todos en el recinto, ya que en las pantallas se proyectó una especie de lyric video para que nadie se quedará fuera de la fiesta. El tema fue interpretado por Zeta y Txus, dejando en la batería a Adrián Romero, a quién antes habíamos visto en esta velada pero con Saurom.
Vino una pausa hecha por Txus quien pidió una cámara para grabar algo especial. Solicitó a todos los presentes cantar las mañanitas a sus amigos de Saratoga, quienes están celebrando 30 años de carrera. Acto seguido, Txus dio un anuncio inesperado, reveló que el 19 febrero de 2022, Mägo de Oz regresará a la Arena CDMX, lo que por supuesto puso aún más felices a los miles de fanáticos.
La actividad musical se retomó con un bloque que inició con un clásico “La Danza del Fuego”; “Tequila Tanto por Vivir”, tema que Zeta dedicó a una amiga y “La Dama del Mar”.
Otra pausa dio paso a una intervención de Patricia Tapia, la cual agradeció el recibimiento y también dijo que ya tenía ganas de volver a México. Paty aprovechó para presentar a Manuel Ramil, quien se encargó de los teclados en esta gira americana debido a un problema médico de Javi Diez. El músico recibió un gran aplauso y no faltaron aquellos entre el público que pidieron que tocará alguna canción de Avalanch.
“Opera Mortis” fue la pieza perfecta para demostrar los talentos de Paty, Ramil y Manuel Seoane. Toda la banda regreso para hacer “El Aplauso Herido” y “Ciudad Esmeralda”, siendo este el bloque más flojo de la velada.
Zeta aprovecho para ofrecer un discurso sobre el amor de pareja y dar paso a la conmovedora “Quiero Que Apagues Mi Luz”, la cual fue acompañada por las luces en los celulares de los asistentes. Dicha canción está basada en el caso de Ángel Hernández, quien ayudó a morir a su esposa María José Carrasco para acabar con el dolor que le provocaba la esclerosis múltiple que padecía desde hace muchos años, un hecho que dio pie a legalización de la eutanasia en España.
“Desde mi Cielo”, una de las favoritas y de las más coreadas de la noche llegó con una pantalla proyectando un panorama invernal y con un efecto hecho en el recinto por el cual parecía que nevaba sobre el escenario.
Tocó turno de la intervención del elemento más reciente del grupo, el guitarrista Víctor de Andrés quien a lo largo de la presentación nos demostró la calidad en la guitarra por la cual fue fichado por Txus. Resaltó su emoción de estar de nuevo en México, pero ahora como integrante de Mägo de Oz, para luego dar paso a la breve cantiga “La Vida Pirata”. Siguió otro bloque que puso a cantar, gritar y bailar a los asistentes que pese a lo avanzado del recital demostraban tener energía para más. Aquí escuchamos “El Cervezo” y “Tu Madre es Una Cabra” donde Fernando Mainer uso una máscara de dicho animal.
Llegaba el momento en que el barco pirata de Mägo tenía que encallar, por lo que no había mejor canción para hacerlo que con “Bandera Negra”, sin duda uno de los mejores momentos del concierto. Para este tema la agrupación invitó a tres músicos del grupo Sinfonía que apoyaron en los coros.
Para otorgar un final épico, Paty y Zeta tomaron un par de “antorchas”, las cuales llevaron a la parte alta del barco para encender uno a uno los cañones que estallaron con un gran rugido, provocando aplausos de los asistentes.
Ya era más de medianoche pero todos sabían que aún faltaba que Mägo ofreciera ese “extra” que todos necesitaban escuchar. En lo que la banda regresaba para hacer el encore, el púlico en la Arena CDMX se unió a una voz para cantar “Hasta Que El Cuerpo Aguante”.
La guitarra de Víctor fue el anuncio que necesitábamos para saber que el concierto continuaba con “La Cantiga De Las Brujas”. Tocaba a Mägo regresar el gesto a Saurom, por lo que invitaron a todos para el gran cierre, como primer tema “Molinos de Viento”, una canción que Saurom interpretó en el disco tributo a Mägo, Stay Oz! Hasta Que El Cuerpo Aguante.
Llegaba la última canción pero Mohamed no quería irse sin hablar, por lo que tuvo una sustanciosa intervención, primero solicitando un aplauso para su fallecido tour manager, después ayudó a un fanático en una propuesta de matrimonio, y por último felicitó a México por el Día de la Revolución.
El gran cierre fue con “Fiesta Pagana“, todos los invitados de la noche estaban el escenario y una lluvia de papeles tricolor acompañó el momento junto a un público totalmente entregado, como si esto fuera apenas el inicio del concierto.
Aunque el set fue muy cargado hacia los temas de sus dos últimos materiales, y que el audio no fue el mejor, el sentimiento de reunirse músicos y fans de nueva cuenta, las colaboraciones entre ambas bandas, y la presentación de una escenografía con temática completa, hizo que la noche tuviera un ambiente especial. La velada pactada para el 19 de febrero de 2022 tiene un gran reto por superar.