Pólvora Live
Max & Iggor Cavalera ofrecieron un show inolvidable junto a Dino Cazares en el Circo Volador
Max & Iggor Cavalera tocaron junto a Dino Cazares en el Circo Volador para celebrar el emblemático álbum Roots. Acá te contamos que tal estuvo.
Opinión nada popular: Roots me parece el álbum más débil de la era Cavalera en Sepultura. Entiendo la nostalgia y el énfasis que tuvo la obra en su momento hacia el World Music pero jamás logré conectar con el. Dicho esto, no sabía que esperar del show de Max & Iggor Cavalera en el Circo Volador para celebrar la placa. Sin duda el agregado de Dino Cazares lo volvió demasiado llamativo, pero después de la maravillosa experiencia que fue verlos tocar Beneath the Remains y Arise, ¿cómo igualar el sentimiento? La clave no fue a través de lo musical, sino de la identidad latinoamericana que marcó toda la noche.
Esto comenzó desde el instante en el que los tapatíos de Pressive, subieron al escenario. Fue grato ver que el guitarrista de Obesity los acompañó para esta tocada en la que además, contaron con las participaciones del Push (Nunca Digas Muere) y el vocalista de Kaizan, para reafirmar el tema de los lazos a lo largo de la República. En ningún momento, la banda dejó de demostrar su emoción y el logro que para ellos representó estar en el escenario principal del ex Cine Francisco Villa. Gran actuación, llena de mucha energía y buenos riffs.
¡Qué cabrón toca Cabrón! Dejando a un lado mi chiste de tío, el trío capitalino fue el siguiente al escenario. “Latinoamérica sangra”, dice una de sus canciones. El sentimiento de resistencia transmitido fue muy importante para contagiarse con ese ímpetu de levantar el puño al aire y, de forma simbólica, protestar contra todos los males que azotan la región. El bajista de Cabrón es brutal, la forma en que le pega macizo a las cuatro cuerdas y como se derrite arriba, es extraordinario.
Tras ambos shows nacionales, deambulé durante varios minutos en los pasillos del Circo. “O futuro e indigena!”, se lee en las camisetas oficiales de Max & Iggor Cavalera. Los lazos con nuestras raíces deben ser fuertes para enfrentar lo que venga y el dúo más exitoso de toda la región en cuanto a metal se refiere, lo remarca en cada instante.
Max & Iggor Cavalera, de vuelta a las raíces
Los hermanos, acompañados de Dino, subieron al escenario tocando “Roots Bloody Roots”. El público enloqueció en especial por la presencia del guitarrista de Fear Factory, uno de los personajes más queridos entre los metaleros nacionales. Max lucía entusiasta por el recibimiento, sin duda fue una invitación acertada.
Siguieron “Attitude”, “Cut-Throat” y al sonar “Ratamahatta”, una de las canciones más exigentes en cuanto a arreglos, se demostró la seriedad con la que se tomaron adaptar cada pieza en vivo.
Fue interesante el giro que le dieron a “Lookaway”, colaboración en la que participaron Jonathan Davis y Mike Patton en el disco. En el show, funcionó como una buena mezcla entre dicho tema, “Territory” del disco Chaos A.D. y un cover a “War Pigs” que cada alma presente cantó como su himno.
De la nada y como si fueran los viejos tiempos “de la López”, un sujeto sin camiseta burló la seguridad y se colgó desde una de las torres de la tramoya para headbangear. No sé si la mirada de Max haya sido de nervios pero sí fue una expresión divertidísima.
“Si quieren más, saben que tienen que gritar”, vociferó Max entre la oscuridad. La banda regresó un minuto después para sorprendernos con un cover de “La Migra”, el himno “Refuse/Resist” y una segunda versión de “Roots”, acompañada por nuevos arreglos para darle el toque industrial de Dino. No solo veíamos al verdadero Sepultura, sino lo que ellos mismos bautizaron como “Sepulfactory”.
La noche terminó mientras las bocinas reproducían al “Jefe de Jefes”, surreal, aunque extrañamente satisfactorio. Pero lo mejor, fue presenciar un equipo de ensueño entre Max & Iggor Cavalera junto a Dino Cazares. Valdría la pena revisitarlo después aunque… Sería sabio esperar al menos dos años más para que veamos un foro aún más lleno. Ahí mi sugerencia.