Metronomy en el WTC Pepsi Center: la magia fiestera que invadió la ciudad

Metronomy es de esas bandas que son como el primo buena onda que cuenta sus chistes y que te pone un doscientos cuando la chela se termina, son tan agradables y rumberos que es casi imposible pensar que no hagan bien todo.

Y es que estamos ante 5 mentes únicas que por sí solas funcionan como una maquinaria de producción de arte autónoma, ellos respiran aire y exhalan éxitos; y fue así como la noche de ayer pudimos vivir una experiencia que ya esperábamos, pero qué aún así no dejó de sorprendernos, la calidad musical que tienen y el nivel de interacción hicieron que verdaderamente el Pepsi Center se cimbrara entre tanto grito y aplauso.

La noche más caótica desde la pandemia.

Hace ya muchos años que no veía una Ciudad de México tan abarrotada, y es que no es para menos ya que la noche del sábado 29 la ciudad estaba completamente atascada de eventos, como las tocadas que el tío Pólvora cubrió y pueden ver en esta bendita página, las clasificatorias del Gran Premio de la Formula 1, el tan ya festivo desfile del día de muertos y mero mero a un lado del Pepsi, se llevaba a cabo una edición mas de la convención de la Mole.

La llegada al Pepsi fue una verdadera travesía, ya que con toda esta festividad cortaron calles y el camino no fue nada fácil, sin embargo el tapiz que había de caras pintadas y catrinas caminando por las calles, le daba un toque de encanto al suplicio de llegar. Pero ninguna de esas dificultades les quitaría la euforia a los fans que llegaron minutos antes de las 8pm para ir agarrando sus lugares dentro del recinto.

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Metronomy tiene las mejores clases de español

Posterior a la excelente presentación de Pan Amsterdam, en donde prometió que regresaría pero con show completo, la gente lo despidió con tremendos aplausos ya que buena fue la selección de Metronomy para poner a esta agrupación de teloneros.

Pasaban ya de las 9 de la noche, horario que se señalaba como el inicio de la tocada, y la gente muy tranquila y paciente seguía esperando a que saliera la banda inglesa, mientras tanto el staff de producción se dedicaba a alistar todo para Joseph Mount y compañía.

Nueve con dieciséis minutos se marcaban en los relojes cuando las luces y pantallas se apagaron para dar paso a los reflectores que nos señalarían la entrada de la banda que, posterior a tomar sus instrumentos, comenzaron con este recital que haría bailar hasta al tronco más enterrado del bosque.

“Love Factory” sería la primera canción en sonar, seguida de tremendos exitazos de antaño, “The Bay” y “Corinne”. La banda completa traía unas ganas y una energía que transmitían sí o sí a los asistentes.

Bastaba con una sonrisa de Olugbenga Adelekan para que toda la gente cayera en éxtasis total bajo sus encantos de movimientos del bajo, Joseph hacía lo suyo del otro lado de escenario mientras Anna gobernaba completamente la batería como las grandes.

Las rolonas siguieron cayendo, “Reservoir”, “Everything Goes My Way”, “The Light”, “Holiday” fueron otras invitadas a esta fiestota.

“Muchas gracias, Ciudad de México, hagamos algo de ruido”, “Esto es muy bueno, realmente muy bueno, ¿Cómo se dice en español es bueno estar de vuelta?”, preguntaba Joseph a su staff, “Cómo sea, es muy bueno estar de vuelta” dijo el vocalista.

Entre canciones se dejó escuchar el ya famoso “Oe,Oe,Oe,Oe Metro-nomy” a lo que por primera vez en mi vida me toco ver que una banda respondiera a esto, de inmediato Joseph dijo, “Nosotros podemos hacer esto también” y de repente Metronomy comenzó a corear “Oe,Oe,Oe,Oe, México-city” y pues en este momento ya la raza estaba más que emocionada al tener un gesto bien simbólico por parte de tremenda agrupación.

El cotorreo y la danza siguieron con rolas como “Insecurity”, “Salted Caramel Ice Cream” y “The Look”, además de que Joseph se aventó tremenda ejecución, también puso a hablar en español a Michael y a Oscar, quienes muy cotorros se aventaron unas ‘guasas’ para el público, ejemplo de ello Oscar dijo en español “a mi me dicen Oscarin” acto inmediato, toda la gente empezó a vitorear “Os-ca-rin, Os,-ca-rin”.

Y de ese calibre fue toda la noche, cotorreo, fiesta, música bien bailable y una velada extraordinaria que terminó con “Love Letters” y “You Could Easily Have Me” y que solo nos deja claro una cosa, Metronomy es un asegurado por completo, no hay momento en el cual no haya dejado de mover el bote, y un Pepsi Center super abarrotado lo puede confirmar, Los queremos mucho Metronomy, nunca cambien.