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Pólvora Live

Charles Ans y Sharif llenaron de rimas y rap bohemio el Pepsi Center WTC

AJ Navarro

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La dupla hispano mexicana de Charles Ans y Sharif demosntraron que no todo el hip hop y el rap viene de las calles, sino también del alma

El rap tiene sus raíces a mediados de los años 70 en el mero Bronx, siendo una forma de expresión donde los DJ’s tocaban música funk y soul, y los MC’s improvisaban rimas y poesía hablada sobre los ritmos. Pero el domingo en el Pepsi Center WTC adquirió una nueva órbita al combinar el estilo de dos maestros de las letras, Charles Ans y Sharif Fernández, que sacaron sus mejores versos con su rap bohemio en una noche memorable.

Primer acto: Sharif y la filología bohemia del rap latino


Graduado en Ingeniería Técnica en Informática y en Filología Hispánica , el zaragozano Sharif sería el que diera el banderazo para una celebración rítmica sin igual en el recinto de la calle Dakota. En punto de las 8:30 de la noche y después de que la chela y la mesa de souvenirs vendiera memorabilia firmada por ambos artistas, desde playeras hasta el EP de Órbitas o incluso sus libros de poesía, la oscuridad bañaba el escenario para dar entrada a la banda de acompañamiento del español.

Con la talentosa y joven Ms Ambar en los coros y el Gordo del Funk en el centro vestido de playera rosa para tocar el teclado, que preguntaba a los asistentes si tenían ganas de escuchar a Sharif. La respuesta fue aplastante ante un grito que recibía de manera emotiva al poeta del rap, con su bebida en mano y una playera de cuadros. “A su salud, familia“, daba el primer trago y las rimas comenzaban a sonar mientras una luz rosa bañaba a todos en la tarima del escenario.

Fernández demostró su maestría en la filología y la rima. Foto: OCESA / César Vicuña
Fernández demostró su maestría en la filología y la rima. Foto: OCESA / César Vicuña

Vengo con mi hermano el Gordo del Funk y nos gusta presentarnos a nuestra manera. Esto va a ser una fiesta y recién empieza“, afirmaba el emocionado zaragozano mientras brindaba nuevamente con el publico para cantar Tequila y Limón. “Ahora que estamos todos, dejen que me quite las gafas para verles bien. Les contaré una historia basada en hechos reales que pudo haber ocurrido perfectamente esta noche en los pasillos de la CDMX“, servía como introducción para Los Últimos Noctambulos con una animación de Rick y Morty de fondo.

Entre las copas y la entrega de un público que aplaudía cada una de sus rimas, Sharif disfrutaba de la velada donde Ms Ambar lucía en el acompañamiento de algunos de sus versos al interpretar Sed de Fuego. Por momentos, el olor a mariguana empezaba a rondar en algunas partes del Pepsi Center pero eso no detuvo que Un Ramito de Flores sonara tan fuerte en el recinto, provocando uno de los momentos mas emotivos de la presentación del zaragozano.

“No sabia si meter la siguiente canción porque normalmente la hago en los directos pero esta noche ocurre algo mágico y es que los tengo a ustedes y la banda a mi lado así que nos daremos el capricho de hacerla”, platicaba Sharif con el atiborrado recinto mientras dedicaba Canción para mi Pueblo como himno que unía a todos los presentes. Luego, la melancolía y la poesía se hicieron presentes con Lluevo, primer sencillo de su álbum De Inmensidades mientras tomaba asiento y encendía un cigarrillo a la par de que la cerveza alimentaba a las almas bohemias del público.

A pesar de que el set del español duraría una sola hora, la potencia que contagió se alimentó con cada una de los versos que el poeta y filólogo regalaba, ya fuese con La Primera Persona del Plural, pidiendo que se escuchara hasta Italia desde el Pepsi Center , momento que siguió con Si tu me Dejaras, ofreciendo un viaje al pasado con esta rola que, en palabras del rapero, “la cree cuando algunos de ustedes no habían nacido” y continuaba con la nostalgia a flor de piel de Azul, con las luces de este color bañando el escenario.

Siempre conmovido por la emoción de la gente, Sharif se entregó por completo a su público. Foto: OCESA / César Vicuña
Siempre conmovido por la emoción de la gente, Sharif se entregó por completo a su público. Foto: OCESA / César Vicuña

 Se acercaba el cierre de este primer acto, donde el español rendía homenaje a la mitología con otro clásico de su repertorio, Apolo y Dafne, otra de las rolas más coreadas por los asistentes mientras en la pantalla de fondo aparecía una ilustración de una dama similar desnuda de la cintura para arriba con cabello rosa a la par de unas luces amarillas que acompañaban el ritmo de la poesía urbana de Sharif, que siguió el show recordando a Nanpa Basico con Pa Que mami no Llore.

No se si están preparados para la siguiente rola” anunciaba el siempre activo zaragozano, que daba brincos de un lado a otro motivando las palmas y el movimiento de manos de todos al ritmo de Perdonar y Agradecer, tema para los expertos sobre los amores que condenan pero también redimen. Por un momento el sentimiento de fiesta se detuvo ante un problema al costado del escenario donde la seguridad tuvo que interferir. Después de ese pequeño momento, Sharif recibió todo el amor del público que cantaba en unísono su nombre, algo que, en sus palabras, “aún no me lo merezco“.

El cierre ofreció momentos brillantes para el saxofón y la guitarra, pero fue Ms Ambar con un fragmento de Falling de Alicia Keys como intro para Talismán y posteriormente dar pauta a la inmortalidad maldita de Dorian Gray que Sharif se despedía momentáneamente de sus fans. Levanto su Doctor Simi, cerró el primer acto con Del Recuerdo acompañado en las rimas por el Gordo de Funk, rapeando a su lado para que el aplauso del público resonara al ritmo de la lírica que le decían adiós de momento al zaragozano.

El Gordo del Funk y Sharif, dos piezas clave del rap hispano. Foto: OCESA / César Vicuña
El Gordo del Funk y Sharif, dos piezas clave del rap hispano. Foto: OCESA / César Vicuña

Segundo Acto: El carisma melancólico de Charles Ans


Tocaba el momento de Carlos Miguel Segura Ramírez, mejor conocido como Charles Ans de tomar el escenario para seguir la fiesta en punto de las 9: 45 de la noche, rapero mexa oriundo de Sonora que, a pesar de venir de un barrio bastante duro, nunca sufrió carencias y cuyas rimas nacen del lado bohemio-melancólico, siempre viendo el mejor lado de la vida. Los gritos clamando su presencia y el famoso “oeoeoeoe, Charles” invocaron la presencia del siempre sonriente sonorense.

El sonido de los sintetizadores y la presentación de su banda fue suficiente para que todos explotaran ante la pregunta del melancólico por excelencia: “¿Cómo está laCDMX esta noche?me encanta venir a la ciudad porque aquí todo está bien”, dando pauta a la rola homónima como inicio de la fiesta que Charles Ans tenía preparado para todos en su reencuentro con el recinto de la calle Dakota. Mientras el rapero ofrecía sus rimas, ataviado de una gorra y traje de los Tampa Bay Lightning de hockey, jeans y lentes negros, elambiente y los imparables coros continuarían con YNLPA.

¿Cómo esta mi familia chula?“, saludaba a la gente para continuar rimando y contagiando de flow para conseguir un momento memorable donde el público coreo el sampleo de Carla Morrison de No es Fácil Olvidar el Ayer. “Cantan igual de culero que yo pero no hay pedo porque hoy venimos a rapear”, bromeaba el sonorense mientras una animación salía al fondo de la pantalla y la rola seguía. “Sabía que la gira tenia que ser aquí porque la vibra se siente diferente“, confesó Charles Ans.

La buena vibra eterna de Charles Ans se sintió en todo el Pepsi Center. Foto: OCESA / César Vicuña
La buena vibra eterna de Charles Ans se sintió en todo el Pepsi Center. Foto: OCESA / César Vicuña

El flow de bohemio y fiestero del rapero norteño continuó con Hasta que la muerte nos Separe, con el impresionante coro de la gente que no paraba de cantar sus temas desde que puso pie en el escenario. Con la emoción a tope, Si Nunca va a Amanecer provocó que a gente moviera sus manos en el aire de lado a lado dejando ver a Charles Ans que la vibra seguía alta.  

Llegaba entonces un tema para los dolidos, de los más tristes de la noche que el rapero bohemio decidió dedicar a todas las bellezas que lo acompañaban esa noche pero también para todos sus carnales, algunos mártires del mal de amores, invocando entonces a las “andrómedas” de los asistentes, entrando así con las rimas de Andrómeda. “Vamos a rompernos en pedacitos, saquen todo lo que traigan ahorita”, decía mientras brindaba con su vaso rojo.

El constante sentir de que esta noche los asistentes y los artistas eran una gran familia seguía permeando la velada. “Si el día de hoy no piensas llorar por nada del mundo vamos a llenarnos entonces de pura energía“, ofreciendo un viaje a su pasado reciente con No Pienso Llorar mientras Charles Ans resaltaba que aún le quedaban algunas canciones, esperando que la energía que se transmitía en el Pepsi Center durara mucho más, canalizándola con las poderosas rimas de Me Gusta donde nuevamente Ms Ambar lució acompañando a su compañero sonorense en la lírica y los movimientos de mano del público en conjunto.

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Charles Ans se alimentó de la gran energía de su gente, demostrando el poder de su rap bohemio. Foto: OCESA / César Vicuña

En una pequeña pausa y motivado por el emotivo momento, el rapero aprovechó para tomar la foto del recuerdo con la luz prendida del teléfono de todos los asistentes, complementándola con 400 segundos de “puro pinche ruido”, obteniendo una respuesta eufórica mientras que el segundo acto se acercaba a su fin, quedando cinco temas por venir mientras el maestro de la rima melancólica agradecía constantemente el amor de su gente.

Uno de sus temas favoritos continuó con la larga velada, ante la cursi luz rosa que le sirvió como acompañante en Vegetales con Pescado en una velada que, para Charles Ans, era una locura pues una parte de su familia estaba presente en la audiencia, en este caso sus tíos y su padre, originarios de la CDMX. “Los quiero un chingo, gracias por ser un público tan lindo y entregar su corazón“, afirmaba conmovido mientras un Jean Claude Van Damme en su pequeño clip bailable dentro de una cinta ochentera servía de fondo para Déjame en Paz con una luz roja de fondo mientras la guitarra y el saxofón sonaban duros para levantar el ánimo que jamás decayó.

Casi una hora después de su entrada, el final de su presentación en solitario se daba con unas cuantas rimas más, donde Ms Ambar tomó la batuta con el visto bueno de Charles Ans para ponerle la cereza al pastel de este acto. “Quiero que lo disfrute porque alguna vez ella llenará este lugar con su proyecto“, aseveró el sonorense mientras Si Tu Te Vas y los temas LQRA Session #5 acompañada de fragmentos de un anime pasaban al fondo y el cierre se daba con ella sola tomando el flow de la rola LQRA Session #9 y Ranma ½ en la pantalla. Pero aún habría más.

La conexión entre Charles y su público hizo que la larga noche se sintiera corta. Foto: OCESA / César Vicuña
La conexión entre Charles y su público hizo que la larga noche se sintiera corta. Foto: OCESA / César Vicuña

Acto final: Las Órbitas Raperas de Charles Ans y Sharif


Después de un breve descanso de un par de minutos y acercándose las 11 de la noche, el querido Gordo del Funk salió de nuevo para recibir el calor de la gente además del poeta, escritor y jefe de jefes de las rimas, Sharif, a quienes el publico abrazó nuevamente coreando su nombre, manteniendo un entusiasmo que parecía inagotable. Llegaba el tercer acto, donde el EP Órbitas sería interpretado en su totalidad por el español y Charles Ans.

Primero brindaron a la salud de ellos y los presentes para después tomar asiento en el centro del escenario. “Hace un año nos fuimos a Chapala a trabajar en un pequeño proyecto, esto era un sueño, hacer canciones y venir a tocarlas para ustedes“, reflexionaba el poeta callejero zaragozano. “No somos el tipo de rap que suele ser popular, pero con nuestra música romanticona y poética se ha llenado este lugar y eso es algo muy chulo“, complementó el bohemio sonorense.

Así, antes de presentar las rolas de Órbitas, los rapero dieron pie a dos temas que fueron la semilla de su colaboración, comenzando con Lumbre mientras Ans no ocultó la alegría de que el publico les permitiera cumplir este sueño “como si fuéramos grandes poetas“. “Ustedes le dan sentido a todo esto”, añadió Fernández mientras En lo malo me va Bien orilló a todos a poner nuevamente las manos arriba, a pesar de que algunos de los asistentes comenzaban a abandonar el recinto de la colonia Nápoles.

Una dupla explosiva de rimas, flow y melancolía. Foto: OCESA / César Vicuña
Una dupla explosiva de rimas, flow y melancolía. Foto: OCESA / César Vicuña

Entre copas y brindando tequila en sus vasos rojos así como uno que otro shot para el Gordo del Funk , Sharif y Charles Ans fueron unos “borrachos profesionales”, cerrando el espectáculo, levantándose de sus sillas para seguir rapeando con Mañana vas a Estar Ausente, Boogie y Funk, y despidiéndose con el cobijo de 400 Estrellas o más, simuladas con las luces de los celulares que mostraron que el poder de las rimas y el rap bohemio está mas vigente que nunca.

Comunicólogo, amante del cine, la música y todo lo que sea cultura. Forjando una carrera en el medio desde 2018 a la fecha. Colaborador en varios espacios, consciente de que un gran poder conlleva una gran responsabilidad.

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