Pólvora Live
Alia Dergal: estar en su concierto es dejarse llevar por una energía cargada de sexualidad feminina
Alia Dergal es una cantante de trip hop de la Ciudad de México. Ella fue una de las primeras personas que conocí cuando llegué a México hace más de ocho años y desde entonces la vida nos ha vuelto a unir.
Despertando cruda una vez más, me armo unos Seltzers y hago mi camino al Huerto en la Roma porque hoy es el show de la hipnótica y talentosa Alia Dergal.
No se podría haber escogido un lugar más hermoso para su presentación. El Huerto Roma Verde es un espacio increíble dedicado a la cultura en cada sentido. Entre pozos con peces, talleres de artesanía y jardines con verduras, se encuentra una estructura que parece un temazcal gigante y por dentro una acustica impecable.
Crudeando por los bazares, probando Mezcales, comiendo nuestra pizza favorita en La Nonna Fina, Miki Navajas y yo revivimos para la fiesta de esta noche.
Nos encontramos a personalidades de la escena, a viejos y nuevos amigos, entre ellos el escritor Joše Mariya Perez, el artista y músico Tago Mago de la banda YellOh! y el virtuoso Rodrigo Valenzuela de la banda Viva la Quinta.
Alia Dergal, hipnosis inmediata en El Huerto Roma
Arranca la banda abridora Bennu y nos lleva a los 60 con un sonido que nos acuerda a Led Zeppelin. Buena vibra desde la primer nota.
Después de unas frías y buenas pláticas en la pausa entre grupos llegó el momento. Alia Dergal y su banda de músicos inigualables nos atrapan de inmediato. Alia nos capta con su voz poderosa y nos lleva de viaje. Es un viaje espiritual y sexual, obscuro y guiado por mantras provocativos. Ninguna pierna, ninguna cadera se queda quieta cuando Alia nos canta, y los ritmos jazzeros e innovadores de Julián González Frank en la batería lo aseguran doble.
Gabriel Ponce de León domina el bajo con mucha creatividad y Gabriel Perdomo Mendoza le saca los riffs más pegajosas a su guitarra. Son un dream team y Alia es una front woman extraordinaria. Canta y se mueve con una feminidad muy potente, y desde la primera canción “Devotion” nos movemos con ella. Estar en un concierto de Alia Dergal es dejarse llevar de una energía cargada con sexualidad feminina. Ella es la protagonista en ese encuentro sensual sin duda ninguna y nosotros somos felices de ser los objetos de su deseo.
En luces y sombras de azul y rojo, Alia y su banda nos prenden con un set lleno de hits cómo “Medusa Flower” y “Telepathic Features”. En “I Am” (“Yo Soy”) junta las manos a la usanza de un saludo de la India y nos canta “OM”, lo que es un símbolo de meditación profunda, y la verdad le crees – ella sabe quien es, y ella te ve a tí por quien eres.
Con su mezcla de trip hop, alternative metal, art rock, jazz y dark ambient, Alia Dergal y sus músicos que también son sus colaboradores, logran un sonido realmente excepcional. Me acuerdan a Björk, Tool y Skunk Anansie.
En la canción “Wild Magic” se sube César Zegbe Jones a cantar con Alia, un featuring de estudio transportado al show en vivo.
Alia y su banda se despiden con su tema más reciente “Mirror”. Desde las paredes nos regresan la mirada las bailarinas del video oficial de la canción y todo el lugar se convierte en un espejo. El show en su totalidad es un viaje al centro de ti mismo, donde te encuentras y con mucha suerte, te regresaras la mirada y te veras de verdad.