Dogma: Una religión, una banda, una secta… son lo que tú quieras

En pleno 2023 aún cuesta trabajo ver qué mucha gente y músicos aún esperan que las bandas de rock y metal salten a la fama al ser descubiertos por algún peso pesado de la música en algún club local. Seamos realistas, la industria se mueve a base dinero y contactos, en algunos casos hay proyectos que gozan de ambas cosas, pero no saben utilizarlos para su beneficio, en otros casos, hay grupos que saben cómo convertir eso en proyección para su proyecto, algo más o menos que se ha vivido en los últimos años como con grupos como The Warning y ahora en el panorama internacional lo trata de hacer Dogma. 

Te cuento lo anterior ya que curiosamente, gracias a una campaña bastante bombardeante de YouTube, fue como Dogma llegó a los oídos de un servidor hace varios meses. En este momento me es casi imposible recordar que video veía antes de que la plataforma me pusiera como siguiente opción el de “Father I Have Sinned” de Dogma, al cual me enganche por ese coro bastante sencillo y pegadizo que tiene. 

Bien ahora con un poco de contexto, podemos decir que Dogma es un acto completamente nuevo y que gracias a este tipo de campañas trata de ir creando su base de fans, lo cual poco a poco las ha llevado a su tan esperado debut, Dogma, un disco con 11 canciones (o capítulos como les llama la banda) que te adelantamos que dejarán un buen sabor de boca. 

La temática de Dogma 

Al ser una banda nueva, es obligada la siguiente escala, ¿De qué va el grupo? Esto es sencillo Dogma deja que este proyecto lo interprete cada quien a su manera y lo podemos ver en su descripción de redes sociales: “¿Quiénes somos? ¿Una religión? ¿Una banda? ¿Una secta? ¿Un culto? ¿Un movimiento? Somos lo que tú quieres que seamos… Podemos ser todo, o podemos ser nada. Tu eliges”. 

Pero hablemos un poco de lo que refleja su vestimenta y su música. Este grupo de mujeres en todos sus videos y fotos promocionales han mostrado ser cuatro monjas, pero con una idea totalmente diferente a la que la religión nos ha presentado durante muchos años, estas monjas son muy liberales, no dejando nada a la imaginación (y tú querido lector te darás cuenta en cada uno de sus videos), los cuales también incluyen letras cargadas de sexualidad y en contra de la religión y la sumisión.

Dogma nos regala una visión un poco más extensa de su proyecto e ideales en su página web: 

“Vivimos en una época en la que nuestra libertad es vasta, pero está constante y precariamente en peligro. Somos DOGMA. Creemos que las libertades esenciales son la palabra, la expresión y el pensamiento. Nadie puede controlarnos.

Te pedimos que rechaces las fuerzas externas como la religión y la política y forjes tu propio camino. Muchos viven vidas banales, proyectando imágenes falsas, mostrando una belleza y felicidad aparentemente perfectas, construyendo avatares falsos que oscurecen quiénes son por dentro. Nuestro objetivo es erradicar el vacío que envía a las personas a una búsqueda interminable de aprobación (y seguidores) basada en mentiras. Las ideas, las carreras, el sexo, lo que quieras, siempre y cuando no dañes a los demás, debe ser tuyo. Nos oponemos a la represión de uno mismo, incluida la sexualidad. Si quieres algo, hazlo.” 

Dogma, un culto nuevo con sonidos familiares 

La gran fortaleza de Dogma viene precisamente de sus sencillos, como ya lo dijimos hay algunas canciones de muy fácil escucha que se quedan muy rápidamente en tu mente como “Father I Have Sinned”, ”My First Peak”, “Carnal Liberation” o la abridora de este disco, “Forbidden Zone”. 

Luego de escuchar una o dos canciones de este grupo rápidamente se te vendrá a la mente Ghost, desde el maquillaje y también por el estilo de la música en el que se incluyen coros e instrumentaciones como si fueran sacadas de una misa, una clara conexión de esto se encuentra en “Feel the Zeal” que cuenta con inicio de batería muy similar a “Square Hammer” de Ghost. 

“Free Yourself” es una pieza bastante versátil que demuestra de buena manera la manera en que el grupo puede pasar de riffs pesados a momentos un poco más contrastantes como esa parte que llega a los tres cuartos de la canción en la que escuchamos como se juega con algo de jazz. 

Para los que gustan de riffs más enfocados hacia el heavy metal tradicional seguramente terminaran encantados al escuchar canciones como “Made Her Mine” y “Bare to the Bones”. 

El final es bueno y no desentona; muchas veces hemos visto como hay grupos que nos entregan algo con instrumentación para hacerlo épico o simplemente los músicos aprovechan para poner alguna canción de experimentación que contraste con el resto del producto, acá Dogma opta por esa parte épica digna del cierre y lo hacen con “The Dark Messiah”, una canción con esos toques dignos del metal sinfónico que por ahí veíamos asomarse en temas previos como “Pleasure from Pain”. 

Debemos hablar de la voz de Lilith, es una pieza muy importante en este material ya que se inclina más por el estilo melódico creando por momentos buenos contrastes cuando la guitarra nos lleva a terrenos más pesados, pero también se tiene una muy buena combinación cuando los temas están más estructurados hacia el estilo de Lilith como en “Forbidden Zone”. 

Sin duda, Dogma logra presentar un debut bastante sólido con un sonido que seguro hará que se enganchen fans de bandas como Ghost.

El primer paso que fue sacar el disco se ha logrado gracias a una buena campaña en plataformas, la cual ha logrado traer hasta acá a gente como un servidor que de un momento a otro ya tenía activadas las notificaciones en Spotify esperando los sencillos, y por supuesto, la llegada en forma de este primer disco.

Dogma ha venido trabajando bien ahora falta convertir este empuje de los últimos meses en presentaciones en directo. ¿Tendremos el nacimiento de una banda que trascienda? El tiempo y la aprobación o desaprobación de quienes escuchen a Dogma nos darán esa respuesta. 

Acá te dejamos el disco debut de Dogma: