Cine
Sobrevivientes: un emocionante thriller apocalíptico
Desde Corea del Sur llega la película Sobrevivientes, después del terremoto, un thriller situado tras un terrible terremoto.
Da mucho gusto hablar de esta clase de estrenos que sin mayor pretensión pero sí mucha calidad, logran atrapar a cualquier clase de público. Desde Corea del Sur, llega el drama de desastres Sobrevivientes, cinta seleccionada por el país oriental para representarlos en la próxima edición del Oscar pero que desafortunadamente, no quedó entre las contendientes (como en nuestro triste caso).
De la mano del director Um Tae-hwa y junto a actores que cada vez más familiares en occidente como Lee Byung-hun y Park Seo-joon, estamos ante una película muy entretenida de escenario apocalíptico donde si bien, la idea no es para nada original, el desarrollo se siente agradable al estar alejado de estos complejos mesiánicos que presentan las propuestas gringas en estos casos.
De qué va Sobrevivientes
Tras un devastador terremoto, Seúl es reducida totalmente a escombros salvo el milagroso caso del edificio Hwang Gung, un edificio perteneciente a un complejo departamental que logró permanecer en pie. Con la idea de reestablecerse como una nueva sociedad, sus habitantes crean una serie de reglas vitales para su convivencia, siendo la más vital una prohibición hacia cualquier persona que no sea propietaria del lugar. Aunque al principio logran salir adelante, la gente no tarda en trastornarse al verse en este tipo de situaciones de riesgo.
Sobrevivientes no es una obra convencional sobre el fin del mundo como las que estamos acostumbrados ver de nuestros vecinos del norte. Leal a la construcción coreana, vemos una mezcla fascinante de géneros que bien varia de una comedia blanca hacia el melodrama, la acción, el thriller, ¡y todas funcionan! Esto gracias a que la película no se centra en un solo individuo, sino que desarrolla a la perfección el sentido de comunidad para que cada una de las decisiones tengan un peso para todos.
Al convertirse en una especie de tribu, así de fácil nos encariñamos con una pareja de recién casados conformada por el típico servidor público y una noble enfermera, una misteriosa adolescente, una pequeña niña y quien adopta el rol de líder de los condóminos. De forma sabia, el director introduce ocasionalmente ciertos flashbacks que profundizan en ciertos aspectos de como era su vida previo al terremoto y como sus vidas cambiaron para siempre. Porque al momento de llegar al clímax, cierto giro en la trama cobra mucha relevancia debido a ello.
Mientras la historia avanza, el guión evoca varios problemas sociales que atravesamos hoy en día. El primero de ellos es este despojo de humanidad a causa de la tragedia porque siempre será más fácil velar solo por nosotros y un puñado de conocidos que empatizar por el prójimo que se encuentra en igual o peor situación. Llega el momento donde aquellos colados (“cucarachas” como les apodan) que logran refugiarse con alguien, parecen víctimas de guerra ocultas de esta Gestapo formada por gente común enviciada por el poder.
La cinta nos lleva de inmediato a reflexionar en las crisis migratorias que todo el mundo, incluyendo México, están sufriendo. Tan solo piensen en el desdén que muchos sienten en su colonia al ver a los migrantes haitianos o venezolanos para entender aún más el peso que da Sobrevivientes a esta división tan marcada entre los que viven adentro de su utopía y las cucarachas de las ruinas, como en su momento fue retratado en Snowpiercer de Bong Joon-ho.
A esto añadimos un sobresaliente diseño de producción que demuestra que no son necesarios los grandes efectos especiales, solo vasta con una buena ambientación para llevarnos a este paraje desolador donde aún existen ciertos oasis de esperanza. Una maravilla.
Conclusión
Sin reinventar nada, la maestría de Um Tae-hwa simplemente consistió en contar una buena historia con una gran conciencia del ritmo y las emociones que atraviesan sus personajes. Aunque al principio el humor que maneja es muy bobo, el suspenso y el drama que atraviesan todos atrapan de inmediato.
Lo único que aleja de la perfección a Sobrevivientes son ciertas actuaciones exageradas y sí, algunas partes que pudieron ser más breves pero diablos, ese remate final es poderoso cuando vemos a gente común convertidas en auténticas bestias. Corre a verla.