Profesión Peligro: Una engañosa pero entretenida comedia con Ryan Gosling

¡Cámara y acción! ¡David Leitch ha vuelto al ruedo en la silla del director! Un pequeño tributo hacía los dobles de acción en la película Profesión Peligro, y una libre adaptación de la serie de acción de los 80´s: The Fall Guy, protagonizada por Lee Majors, Douglas Barr y Heather Thomas, la cual fue emitida por la ABC entre 1981 y 1986.

En ocasiones y dentro del género, la dirección, actuaciones, guion y fotografía como la banda sonora -por mencionar algunos detalles- se lleva todos los aplausos. Pero siempre olvidamos a los especialistas o dobles de riesgo que se ocultan entre los créditos para hacer quedar bien al actor o actriz en cuestión (a excepción de Tom Cruise el Inmortal).

Cada doble de acción hace posible esas peligrosas escenas o secuencias llenas de acción para llenar nuestro entretenimiento y apetito visual, arriesgando su propia vida al estar al filo de la navaja tanto física como mentalmente al ser “personajes sin miedo”.  

Es cierto que, en la acción, se nos nutre de secuencias de mucha intensidad y algo emocionantes donde vemos a nuestros protagonistas en peligros desafiantes, así como un desglose de combates de mucho físico. Pero cuando te atreves a combinarlo con otro género y que ese sea quien lo lleve por la mano, es ahí donde podemos tener un trabajo algo peligroso con no tan buenos resultados.

Profesión Peligro es algo muy engañoso que puede resultar entretenido, cansado o simplemente desastroso durante las dos horas de entretenimiento al más puro estilo ochentero que nos ofrece esta cinta.

De qué va Profesión Peligro

Colt Seavers (Ryan Gosling) un doble de acción que recibe disparos se estrella en coches o atraviesa ventanas y no les teme a las alturas. Se encuentra viviendo su vida al límite y de manera grandiosa, al mismo tiempo que tiene una “relación” con la asistente de cámara Jody (Emily Blunt) y es el doble de la mayor estrella del momento, Tom Ryder (Aaron Taylor-Johnson). Pero luego de una escena de riesgo donde todo sale mal, Seavers se retira del mundo cinematográfico para tener una vida tranquila… hasta que la suerte toca a su puerta nuevamente.

Esta vez, Seavers volverá a un set de grabación para apoyar el sueño de Jody y su ópera prima, una película de acción, ciencia ficción y romance. Aunque con una condición: que al ser un doble de acción nadie lo podrá notar y así podrá localizar a Tom Ryder con mucha tranquilidad, el cual está desaparecido por involucrarse con ciertas personas. El doble tiene el lapso de 48 horas para lograr su misión o la película será cancelada y él perderá la oportunidad de reconquistarla luego de desaparecer de su vida y no hablarle por un año.

“Si te caes, te levantas. ¿Hasta dónde llegarías por la persona que amas?”

David Leitch se fue abriendo paso con buen pie al co-dirigir en el 2014, en compañía del antiguo doble de acción, Chad Stahelski, una pequeña cinta que comenzaría todo para una nueva franquicia en Hollywood que indirectamente revolucionaría al género, nada más y nada menos que John Wick, estelarizada por Keanu Reeves. Y ya sabemos lo que ocurrió luego para este personaje.

En 2017 llegaría Atómica (Atomic Blonde) adaptación de la novela gráfica Cold City de Antony Johnston y Sam Hart, donde logra aprovechar al máximo el juego de cámaras y una que otra secuencia para sentir el poder de Charlize Theron pateando traseros. Un año después, quedaríamos encantados con la secuela del mercenario rojo y bocazas por excelencia de Marvel, Deadpool, donde Leitch dotaba de más extravagancia y drama a este personaje, pero igualaba la acción en un entretenimiento único y sanguinario pero reflexivo.

Ya en 2019, entraría a una franquicia donde las calles se habían olvidado y el cielo, el agua y el espacio eran límites que ya se habían roto de manera sorpresiva y en un capítulo especial él tendría que llevar todo a un nuevo nivel con un cyborg-soldado modificado en Rápidos y Furiosos: Hobbs & Shaw, una precuela-secuela de encargo, donde la fórmula que le funcionaba a Leitch, no llegaba al límite de lo esperado.

El tiempo pasaría y llegaría en 2022 ante nosotros un viaje fugaz pero demasiado entretenido. Ante nosotros estaba una película que se podía comparar con Smokin´Aces: La última carta de Joe Carnahan, pero que lograba ser una adaptación genial del libro de Kotaro Isaka y al más puro estilo del director con un reparto bastante divertido y una historia caótica, llena de acción que nos hablaba sobre el destino, las decisiones y como la torpeza nos podría salvar en el camino de un Tren Bala.

Necesitábamos revisitar sus trabajos anteriores, porque Profesión Peligro no parece una película de David Leitch al cien por ciento. Por momentos se siente que el solamente aventó un par de ideas a la sartén y estas se quemaron a fuego lento, entregando algo muy por encargo o bien, algo demasiado tropezado que no es lo que parece y a lo cual nos tiene acostumbrado dicho director.

La cinta resulta bastante entretenida. No es la peor del año en cuanto a la acción, pero tampoco es la mejor y tiene mérito al poner en el panorama a los dobles de acción. Pero funciona como un pretexto de la exageración y lo que se puede y no debe hacer en ciertas ejecuciones e ideas.

Leitch se brinda un pequeño autohomenaje de ciertos momentos con dobles de acción en algunas de sus cintas que ha realizado anteriormente, como una cálida bienvenida a esta cinta y con “I Was Made For Lovin´You” de Kiss en el fondo, lo cual queda de lujo mientras la voz en off de Ryan Gosling nos adentra a la profesión de su personaje Colt Seavers y el cual tendrá un momento en su vida que lo cambiará todo. Siendo esto el marcaje personal del director de este trabajo y que por momentos tendremos, en minoría, a lo largo de esta cinta.

“¡Todo chido, ni hace calor!” Es bueno volver ver a Gosling de vuelta en el género de la acción. Imagen: Universal Pictures

Aunque Profesión Peligro se vende como una cinta de acción y comedia-romántica, la cual a veces llega a ser más de lo segundo y poco de lo primero, puede ser que el mayor mérito de este trabajo sean las escenas de acción donde yace la verdadera esencia de esto. Basada libremente en la serie “The Fall Guy” del año 1980, que a través de un entretenimiento elaborado con maestría y un emocionante espectáculo, busca ser una carta de amor explosiva para los dobles de acción, pero lo hace de una manera algo equivocada y nada perfecta.

Este trabajo tiene de enemigo muy abrupto a la edición, la cual corta tajantemente el ritmo de las peleas por combinarla con algo dramático o cómico, lo cual quita impacto y ritmo, haciéndonos pedir más adrenalina que drama. No todo es culpa de Leitch, ya que el logra el cometido de adentrarnos a la historia de Profesión Peligro por medio de las pizcas de acción que puede tener por medio de algunas escenas espectaculares o buenas, ya que a veces, no tienen esa conexión esperada para lo que sigue.

Un golpe duro es saber que tenemos algo que podría ser épico o bien logrado, pero la edición y ritmo hacen de lo suyo de manera aparatosa y arruina el buen momento.

Aquí podríamos dar paso al guión escrito por Drew Pearce que en lejanía nos puede recordar a lo hecho por James Mangold en “Encuentro Explosivo” (Knight & Day, 2010) y no es que sea una buena referencia. En Profesión Peligro el guion tiene un gran problema, ya que no sabe nivelar la acción y la comedia-romántica para nutrir este mundo y que ambos estén bajo el reflector. Donde una cosa acierta, la otra falla y donde se mejora, la otra se tropieza, dejándonos, pidiendo más.

Por momentos y dentro del primer acto y segundo ejecuta bien algunas cosas, lo hace de manera tropezada y acierta en algunos chistes, que luego se convierten en ver quién puede caer más duro y qué chiste puede encajar al azar. Y es que después de escribir películas como “Hotel de Criminales” y “Hobbs & Shaw”, nos deja en claro el tipo de película irregular que tenemos ante nosotros, y obviamente hay peores.

El desarrollo de la historia aunado a ciertos detalles en la dirección de Leitch drjan una sensación de que todo pudo ser mejor. ¿Será que posiblemente todos los fallos sean intencionales y son hechos con la finalidad de que nos burlemos sobre este tipo de cosas?

¿Vas a querer para llevar? Aaron Taylor regresa a la comedia y acción en Profesión Peligro. Imagen: Universal Pictures

La idea es buena, bastante interesante por sí sola, pero el lugar al cual nos lleva en su tercer acto es una exageración de proporciones bíblicas que resulta ser algo meramente entretenido por el calor del momento, permitiendo que nuestra historia avance y nos lleve a la explosión final, donde encontraremos un divertido cameo y un aceptable detrás de cámaras en los créditos finales, sobre los dobles de acción en esta película. Sin olvidarnos de una escena entre créditos que nos deja saber el destino de ciertos personajes, así como ver dos cameos que los fans de antaño amarán en esta nueva visión de Profesión Peligro.

Hablando del reparto, Ryan Gosling y su Colt Seavers son divertidos, pero plantearon una disyuntiva en quien escribe: ¿Qué hubiera pasado si esto se acerca a lo que hizo en El Hombre Gris de Anthony y Joe Russo o Drive de Nicolas Winding Refn y no tanto a lo visto en Loco y Estúpido Amor?

Gosling toma como suyo a Seavers y le da su propio toque y voz al personaje; claro, no es el mejor personaje en su carrera, pero él lo está disfrutando al ofrecernos algo más fachero, un fanboy de la acción y un doble de acción que no arriesgaría mucho su vida fuera de la cámara. Al final es humano y tiene debilidades como fortalezas.

Mientras tanto, Emily Blunt destaca por no ser esa princesa en apuros y no caer en el cliché necesario para que esto sea más del montón. Sin embargo, su personaje comienza siendo una asistente y directora para convertirse en alguien fuerte y patea traseros que no explicas cómo sucedió eso y quién le enseñó a quién, pero es algo que ¿está bien?

Gosling y Blunt están unidos y en ciertos momentos tienen buena química, mientras que por otro lado y en ciertas escenas, parece que no hay una conexión realmente pura y sólida, pero todo sea con tal de que esto siga cocinándose. Ambos hacen que esto se disfrute, pese a las dificultades que tiene el guion para aterrizarlos de mejor forma. Creo que ellos podrían haber sido la pareja más perfecta de este año, pero se quedan siendo un buen y bonito dúo de un largo video musical.

¿Ya ves que no eres tímida? Gosling y Blunt, un buen y bonito dúo romático Imagen: Universal Pictures

A pesar de tantos detalles que pueden jugar en su contra. La cinta termina por entretener y dar unas cuantas risas en medio de una deliciosa comedia romántica de acción sin límites, la cual no se preocupa por desarrollar efectivamente la fórmula, sino entregar todo de manera dispersa y que caiga como tenga que caer, pero sea glorioso en ese tercer acto. Ironía, drama y ligera acción con mucho romanticismo y explosiones.

David Leitch está alegre y muy entusiasta pero seguro de sí mismo, dejando notar que la acción va en escalada y puede sorprender a los no tan exigentes del género y puede decepcionar a otros que esperaban algo similar a la serie. Puede que esto no sea lo mejor de él en años, pero se arriesgó a realizarlo sea o no por encargo, dio sus mejores piruetas bien o mal a través de un imaginario único y sobre pensado sin límites.