Cine
Furiosa: de la saga de Mad Max, otro triunfo para Anya Taylor-Joy
Anya Taylor-Joy protagoniza Furiosa, de la saga de Mad Max, una de las mejores películas de acción que verás en la vida
Cuando se trata de secuelas, precuelas, remakes, spin offs y anexas, soy el más escéptico al respecto. Todas estas historias de origen, además de ser una tomada de pelo para sacarle más billetes a los fans, asfixian la imaginación del público al fantasear con sus propias interpretaciones del cómo surgieron los personajes más queridos.
Ese sentimiento cruzó por mi mente hace años cuando llegó Mad Max: Fury Road a salas. Mi grito al cielo de “¡cómo una película de Mad Max sin Mel Gibson!”, fue acallado al ver la tremenda pieza que resultó siendo, uno de los mejores filmes de la década pasada.
De nueva cuenta, fui un incrédulo de primera al enterarme de la existencia de Furiosa: de la saga Mad Max, precuela de Fury Road acerca de la verdadera protagonista de dicha cinta, Imperator Furiosa, personaje encarnado por Charlize Theron y que ahora, vemos interpretada en la fría mirada de Anya Taylor-Joy.
Tal como ocurrió en su momento, George Miller, director y creador de la franquicia, demuestra su maestría, la habilidad tan maravillosa que tiene de colocar la cámara a sus casi 80 años y nos entrega otra pieza memorable en el cine de acción, un esfuerzo por recordarnos, de nueva cuenta, de retomar la concepción original del cine como el arte de la imagen en movimiento. De grande quiero ser como él, verdaderamente.
De qué va Furiosa: de la saga de Mad Max
Años antes de los sucesos de Fury Road, Furiosa vive en un oasis ajeno a la mirada de todos los habitantes del Yermo. Pronto es capturada por una pandilla liderada por el nihilista y cruel Dementus, quien además, tortura y asesina de forma medieval a la madre la joven.
Furiosa logra escapar pero acaba en la famosa Ciudadela gobernada por Immortan Joe. Ávida de venganza, la joven pasa los siguientes años preparándose para el inevitable enfrentamiento contra Dementus y el sueño de algún día, poder regresar a su hogar.
No hay más que halagos hacia Furiosa. De nueva cuenta, la película es una cátedra de dirección por parte de Miller. Desde la construcción del relato la cual se da su propio ritmo, dividida en capítulos que muestran el ascenso de nuestra protagonista, desde lo más bajo pero con una marcada personalidad, hasta su inevitable triunfo en un desenlace cargado de ironía que para nada, se va a la resolución sencilla. Es una épica de venganza que profundiza en los conflictos y la desesperación que todos atraviesan en aquel paraje australiano.
Claro que las estilizadas secuencias de acción, de una realización impecable, un manejo de la cámara ambicioso como si de un joven autor experimentando se tratara y coreografía llena de imaginativa se llevarán las palmas de los asistentes pero en esta ocasión, existe un sentido más personal en cuanto al guión y su desarrollo. Por primera vez en la franquicia, se siente una marcada esperanza, abordada por la añoranza hacia la naturaleza y un fugaz romance que contrasta con el resto de la puesta, pero es necesario para fortalecer los ideales de Furiosa.
Nada de esto serviría si el personaje no estuviese en manos de una gran actriz. Charlize Theron lo hizo excepcional, arrebatando por completo los reflectores al personaje titular de la franquicia y en el caso de Anya “donde aparezco es oro” Taylor-Joy, no es excepción. Que actuación tan brutal, excesivamente calculada en sus acciones pero a la vez, abierta a la calidez y confianza. Similar a Gibson o Hardy, gran parte del papel se limita a unas cuantas líneas… Hasta que logra abrirse con un semejante, en este caso con Praetorian Jack, mentor e interés romántico interpretado por Tom Burke.
Por otro lado tenemos al gran antagonista de la trama a cargo de Chris Hemsworth, uno de los actores más limitados en cuanto a sus habilidades pero, carajo, aquí demuestra que tiene un potencial sin explotar. ¡Solo dos maestros, Miller y en su momento Howard con Rush, lo han sabido dirigir bien! Siempre ha existido un elemento kitsch en esta franquicia, como el guitarrista de Fury Road o absolutamente toda la tercera parte con los protegidos de Tina Turner y Hemsworth, logra darle ese toque cómico pero violento hasta el final. Enorme.
Salvo los minutos iniciales que dan un prólogo en voz en off bastante innecesario que le resta misticismo hacia lo que convirtió Australia en ese bravío desierto, Furiosa es una experiencia que debes vivir y atesorar por siempre. Ojalá también saquen versión en blanco y negro como la anterior, por caridad.
Conclusión
El compromiso de Miller es excepcional y con el tiempo, ha sabido madurar el concepto de aquella película independiente que se convirtió en punta de lanza para la Nueva Ola Australiana en una demostración de que el cine de acción, puede ser más que una interminable balacera. Así como Furiosa es esta luz en el desierto, el ángel más oscuro como se le llama, el universo de Mad Max es un respiro al dependiente sistema de franquicias hollywoodense.
Esta es una de las mejores precuelas de la historia y, tal como su antecesora, es hasta ahora una de las películas más notables en lo que va la década. Como recomendación, si la ves en IMAX, apreciarás aún más el hermoso trabajo de fotografía de Simon Duggan, quien ya había mostrado una labor impecable en Hasta el último hombre.