Pato de Maldita Vecindad: “Nuestras canciones hablan desde el mero barrio”

Una de las bandas más representativas del rock mexicano es, sin duda, la Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio, misma que prepara una celebración de lujo para conmemorar la memoria de los muertos. Pólvora tuvo el gusto de charlar con Pato, guitarrista de esta agrupación, acerca de, como diría Don Palabras, cómo el tiempo vive en la memoria, los cambios en la industria, el legado de los pachucotes y lo que podemos esperar de su próxima tocada en el Velódromo.

Caminando por la Vecindad: Pato y las memorias de la Maldita

“Tenemos 37 años de carrera y claro que recordamos cómo en un principio era difícil poder pensar en hacer una carrera como rockero y además tocando una música que no es propiamente rock, sino una mezcla de mezclas, un ritmo mestizo. Además en ese entonces no había foros donde presentarse, el periodismo musical era casi inexistente y los jóvenes que lo escuchaban eran estigmatizados por su edad debido a los gobiernos represivos que veían a la juventud como un peligro”, comenzó rememorando Pato Montes.

“Poco a poco fueron cambiando las circunstancias sociales con el arribo de nuevos esquemas gubernamentales que provocaron que todo evolucionara al grado de que ya no nos pregunten acerca de nuestra imagen, los piercings o tatuajes e incluso las drogas, de todo menos de música. Actualmente, la Maldita Vecindad piensa en tocar para nosotros mismos y para la gente que quiera escucharnos pero no pensamos que todo iba a cambiar en la escena mundial y latinoamericana al grado de convertirnos en una industria comercial”, reflexionó el guitarrista y productor acerca de la escena actual del rock.

Un gran ejemplo de ese crecimiento es, justamente, la presencia de escenarios y festivales. “Al principio esto era impensable, tener tocadas cada mes o tener rock en español pues en su momento todo era en inglés y se tenia que tocar de cierta manera que distaba mucho de la nuestra donde usábamos congas, saxofones y ritmos diferentes. Decir que nos gustaba Juan Gabriel o Pérez Prado era algo muy poco ortodoxo incluso para la escena. Sumemos que hemos estado muy metidos en la autogestión, producimos nuestros propios conciertos, todo en un tiempo muy rápido dentro de las últimas tres décadas”, señaló el buen Pato.

El gran circo de la Maldita: cambios, colaboraciones y nuevas direcciones

Algo que caracteriza a la Maldita es la constante mezcla de sonidos que los ha llevado a hacer duetos y homenajes interesantes, siendo uno de los últimos la unión con la Sonora Santanera. “Con ellos todo se dio de forma muy natural al ser invitados a una presentación que dieron en el Auditorio que fue muy bien recibida por el público”, afirmó Pato. “Además los arreglos que hicimos a su lado para que las rolas de Maldita se escucharan como la Santanera y viceversa salieron muy bien. Por eso decidimos hacer una gira juntos”.

“Esto involucró mucho trabajo de por medio pero siempre nos ponemos de acuerdo y el resultado resulta increíble. La verdad es que jamás pensamos tocar con ellos temas tan emblemáticos como La Boa, Bomboro Quiña Quiña o Perfume de Gardenias. Como guitarrista ha sido un proceso importante pues al incorporarme en ese universo me convertí en el tercer guitarrista de la Santanera, algo que me llena de mucho gozo. Además, creemos que existen ciertos paralelismos entre la Sonora y la Maldita Vecindad pues ambos abordamos la música, la pasión y el amor pero de una manera tan lirica y poética que esperemos poder seguir ahondando más en esa colaboración mutua”, complementó el aclamado guitarrista.

La versatilidad del gran circo musical de la banda los ha llevado incluso al teatro musical con Lagunilla Mi Barrio. “Ha sido una gran experiencia formar parte de esta adaptación de cine a teatro de esta cinta tan emblemática de los 80. En el segundo acto, los protagonistas abren un centro nocturno al que bautizan como Kumbala. De ahí nace la invitación para crear esa parte musical donde podíamos cerrar con algunas rolas emblemáticas de la Maldita. Además de que el ambiente y vestuario pachuco quedaba muy bien para ese momento del relato”, mencionó emocionado el músico.

Asimismo, Pato Montes habló de cómo ha vivido los cambios en la industria desde su punto de vista como productor y guitarrista en la Maldita Vecindad. “Definitivamente nuestro sonido ha evolucionado. Nos han llegado muchas influencias de todos lados, de nuevas formas e instrumentos pero seguimos con los mismos hilos conductores que, desde un principio, han quedado muy claros como la música de fusión, bailable y que conecte con emociones aunque no necesariamente sean vertiginosas”.

El guitarrista atribuye eso a la tecnología y los avances que ha habido en ella. “Todas las formas que existen para acercarte al panorama musical global son muy enriquecedoras. La tecnología también nos a acercado a eso, a poder producir desde tu casa las grandes ideas que tengas. Creo que si tienes algo importante que decir, lo vas a hacer y que mejor si es de forma colectiva, como lo hacemos siempre en Maldita Vecindad. Aunque las formas para crear la composición que queremos van cambiando, siempre nos mantenemos fieles a esos principios donde la letra y la música la hagamos entre todos los integrantes”.

El poder de la lírica del barrio

Algo que también destaca Pato es la fuerza de las letras que siempre han acompañado a la Maldita Vecindad. “Nuestras canciones hablan desde el corazón, desde el mero barrio donde tratamos de alentar que existan otras formas de comunicación. Estamos totalmente en contra de letras que hagan apología de la violencia, que hablen de discriminación o acoso, de todos esos mensajes que no alentamos y mucho menos conectamos con ellos de alguna manera”, manifestó.

“La música debe permitir acercarnos como sociedad y eso no quiere decir que seamos serios, sino que creemos en la existencia de un mundo donde caben otros perfectamente, siempre con el respeto hacia el otro. Puede que este camino no sea el exitosamente comercial pero es así como entendemos nuestra creatividad”, complementó el guitarrista.

Es tanta y tan fuerte la variedad en sus canciones que tienen diferentes setlists con todo tipo de rolas. “Pasa algo muy curioso porque normalmente llegamos con diversas selecciones de temas. Uno tiene un aire más rockero, otro más de ska bailable o incluso algo más ecléctico y es que tenemos un buen de canciones. Simplemente tocar todo El Circo ya es un viaje aparte pero también manejamos shows donde solo nos enfocamos en los tributos o a veces en algo mucho más relajado. Eso provoca que a veces no podamos tocar todo lo que queremos”, dijo Pato.

“Quisiéramos a veces tocar más del primer disco como Mojado o Querida. Pero siempre queremos mantenernos dinámicos, esa es la clave y se logra gracias a diferentes repertorios. Estamos siempre enamorados de las canciones que hacemos y siempre hay rolas que quisiéramos seguir tocando como Morenaza que  en estos tiempos suena como un recordatorio en contra del acoso a las mujeres o Rafael que habla de las distintas formas de amar dedicada siempre a toda la banda de la comunidad LGBTTTIQ+ y siempre buscamos intercalarlas entre nuestras tocadas”, añadió el también productor mexicano.

Ofrenda musical al más puro estilo de la Vecindad

No cabe duda que la conexión entre Día de muertos y la identidad de la Maldita Vecindad es inherente, no en balde tendrán ya su tercera ofrenda musical. “No podemos y jamás seremos los mismos después de la pandemia. Por eso nos importa armar estos toquines de amor y baile que, en este ocasión, se convierten en una celebración a la vida. Me parece muy importante que valoremos eso, que estamos aquí y qué mejor forma que a través de un abrazo fraterno, musical y cultural, algo que es parte intrínseca y vital del ser humano. Por eso celebramos a nuestros ancestros así, de una manera respetuosa y festiva”, aseveró al respecto Pato.

Ante estas tocadas y ceremonias, los fans están ansiosos por tener al fin una nueva producción discográfica de la Maldita Vecindad, a lo que el guitarrista apuntó: “Este año ya hemos tocado una canción nueva, que habla de cómo la música forma parte de nuestra salud emocional, física y energética. Ahora tenemos ya un serie de canciones grabadas en formato de demo de las cuales vamos a escoger cuales sacar primero, además de tener por ahí material con otras versiones al lado de la Sonora Santanera. Pero esperemos a finales de este año o ya en el 2024 podamos sacar sencillo y álbum nuevo que ya se está cocinando de una manera muy rica”.

A casi cuatro décadas de su existencia, Montes afirma que aún hay mucho rock dentro de la banda que ofrecerán con gusto a sus seguidores. “Mientras nuestras canciones le sigan significando algo al público, seguiremos permaneciendo vigentes. Siempre digo que aspiramos a eso, a crear canciones de dominio público y nos las apropiemos todos”, aseveró emocionado el guitarrista.

Finalmente, ante ese gran panorama y las tocadas por venir, el artista mexicano de sello pachuco reveló qué le diría a su persona de hace 37 años. “A ese joven Pato lo invitaría a que siguiera tocando, que se siga dando el rol y vaya de pata de perro. Creo que le aplaudiría la persistencia que lo llevará a conocer a la bola de locos de la Maldita Vecindad, en algo que es muy incierto pero que poco a poco encontrará su propio camino”, concluyó.

No se pierdan a la Maldita Vecindad que hará su ya tradicional ofrenda musical ahora en un formato de festival donde contará con la presencia de importantes bandas como Sekta Core, Salón Victoria o Save Ferris, entre otros, que pondrán a bailar a todos en el Velódromo Olímpico de la CDMX el próximo 28 de octubre.