Daniela Spalla en el Teatro Metropólitan: sueños y pasiones que se cumplen

Daniela Spalla lleva una racha impresionante de discos y sencillos de primer nivel. Es, por mucho, una de las más destacadas cantautoras de pop, y una de las más auténticas tanto en la pluma como en los instrumentos. Esa transparencia a la hora de transformar sus emociones en rolotas cuasi poéticas, es lo que la tiene en un rinconcito muy especial del corazón de sus fanáticos, quienes atascaron el Teatro Metropólitan de la Ciudad de México.

Daniela Spalla en el Teatro Metropólitan, un concierto para toda la vida

Hacía falta verla en vivo, en solitario, con todo el escenario, el tiempo y el público a su disposición. Es donde verdaderamente puede mostrar lo que ha vaciado en el estudio, pero con toda la teatralidad que ello conlleva.

Desde los primeros instantes, con Daniela frente al piano, aquello fue un tiradero de corazones rotos, sufriendo, y gritando de un indescriptible dolor del alma, y escurriendo a chorros la sangre que manchaba una historia alfombra, misma que absorbía las lágrimas, o las sobras de la cerveza derramada que intentaba borrar de la memoria, aunque fuera por las próximas dos horas, el mal de amores. Y a medida que avanzaban las canciones, nos iba ahogando la tristeza. Se nos atoraba en el cogote el recuerdo. La dicha nos recorría la medula espinal.

La música únicamente fue un pretexto para reunirnos en el meritito Centro Histórico. Sobre el escenario hubo más que simples melodías, armonías y ritmos. Un concierto de Daniela Spalla es danza contemporánea, es cantar a todo pulmón cuál karaoke de la zona rosa a las tres de la mañana, es una pasarela de modas y de invitados de lujo, es besarse, es abrazarse, y es quererse, pero también rechazarse, odiar, expulsar el rencor del cuerpo a gritos, a veces afinados y a veces dignas de películas de terror. Escenografías, luces impresionantes, juego de colores, formas. Es cantar y equivocarse, volver a empezar las veces que sea necesarias. Sentirnos plenos o plenas al final del camino.

Daniela Spalla, fragmentada en el Teatro Metropólitan

Daniela Spalla es, digamos… Daniela Spalla. Aunque a veces parece que se fragmenta en miles de ellas. En un ejército de ellas. La pianista solitaria bajo una luz fluorescente, la guitarrista clásica que no deja pasar el mínimo detalle, la interpreté que se deja el alma como si fuese el último concierto, la bailarina que proyecta su sombra en movimiento para volverse gigante, la distraída, la desconcentrada, la sonriente, la sorprendida, la entusiasmada y la enamorada, todas tienen algo en común por más pequeño e imperceptible que parezca a simple vista.

Esa característica que las une a todas, que permite identificarlas como una misma persona, una con los poderes del camaleón, es el público. Es cada una de esas voces que se dejaron todo en las butacas, que acabaron roncos, sudados, con los ojos rojos de tanto llorar, con las manos temblorosas, los pies hinchados y las piernas cansadas.

Solo ellos son capaces de responder a cada uno de los personajes que muestra su ídola, siempre como si fuera la primera o la última vez que la tendrán tan cerca. Si ellos gritan, entonces, no dudes de que es Daniela Spalla quien está sonando a través de tus oídos y hasta tu corazón.

Setlist de Daniela Spalla en el Teatro Metropólitan, ¿qué canciones tocó?

• Calle sin salida
• Amor difícil
• Estábamos tan bien
• Prometí
• Provincia
• Pinamar
• No me hables de amor
• Insomnio
• Viaje a la luna
• Flores
• Canciones tristes
• La carta
• (nueva rola)
• Mientras el mundo se acaba
• Besos y pendientes (Con Esteman)
• Te alejas de mí (Con Esteman)
• Lo que digan (acústica)
• Costa Rica (acústica)
• Bailando lentos
• Copy Paste
• Ya nos vamos
• Azúcar Amargo
• Me Voy
• Te veo a la salida
• Vete de una vez