Cine
GIFF 27: El Precio de Educarlos, Emilio Portes y su ñoña comedia mexicana
Después de una larga ausencia después de Belzebuth, Emilio Portes vuelve con una comedia que cuenta con un gran ensamble actoral que incluye a Joaquín Cosío, Angélica Aragón, Ianis Guerrero y Michelle Rodriguez en El Precio de Educarlos, cinta que tuvo su premier mundial en el GIFF 27 y que espera llegar próximamente a plataformas de streaming. En Pólvora charlamos con el realizador y guionista y de paso, les contamos un poco sobre este proyecto.
De qué trata El Precio de Educarlos
Como en todas las familias, la armonía de los Rebolledo parece excelente. Pero debido a que los contadores (Aragón y Cosío) se sienten abandonados por sus retoños que llevan rato fuera del nido (Guerrero y Rodriguez). Para recuperar el interés de sus hijos, los ingeniosos contadores inventan la loca idea de ganarse la lotería y parece ir todo de maravilla pero de repente, las cosas se salen de control cuando comienzan a exigirles esa posibilidad de vivir la misma ‘dolce vita’ que ellos.
El Precio de Educarlos marca el regreso de Portes a los largometrajes, haciéndolo con una comedia amable y sin mayor pretensión que hacer reír a la gente a través de una trama sencilla que depende enormemente del ensamble actoral con el que cuenta. La química entre Cosío y Aragón es sorpresivamente buena, permitiéndoles experimentar con facetas que no suelen representar en otras historias.
Ambos demuestran, gracias a una buena dirección por parte de Portes, una chispa adecuada que detona todos los enredos con sus hijos. Sin embargo, también destacan Ianis Guerrero y Michelle Rodriguez, que en el papel de los hijos pasan del egoísmo a la ingratitud y la final comprensión sobre la importancia de los lazos familiares y cómo a veces, lo que creemos es nuestro camino, puede enfrentar cambios buenos para todos.
Además de ellos, algunos otros sospechosos comunes de la filmografía de Portes aparecen con pequeños papeles que añaden al humorismo blanco de la cinta, siendo el más destacado Eduardo España como un vendedor ciego de lotería que funge como un oráculo de la fortuna que parece saber el destino de esta familia, marcándolo como aquel factor que, en los cuentos clásicos, funge como el autor de una moraleja interesante llena de risas y momentos emotivos.
Describiéndola como una ‘comedia ñoña’, Emilio Portes habló también del tono que buscaba transmitir con El Precio de Educarlos. “Es una historia que fue concebida como algo del estilo de Fernando de Fuentes o Roberto Gavaldón pues es totalmente costumbrista y versa sobre los enredos familiares como aquellas cintas de la Época de Oro“., explicó. Asimismo, habló de ese cast que alimenta bien el espíritu del filme. “Todos funcionan como un engranaje perfecto porque, al final, representan una familia y es muy disfrutable los agarrones que se dan entre ellos por este malentendido que se da entre ellos“.
Cabe destacar que el director y guionista no es ajeno a la comedia, pues tiene cintas que abarcan ese género de una forma mucho más retorcida como lo fueron sus primeras cintas. Aquí, el manejo del humor se siente correcto, sin abusar del pastelazo o del cliché mismo. “Aunque pudiera parecer que es la típica película sacada del imaginario del metaverso de los productores de luchas de clases, en realidad aquí no hay una lucha de pobres contra ricos. Todo sucede en un universo de clase media donde la bomba del dinero de repente saca lo mejor y lo peor de los personajes“, ratificó el director.
Esa es una de las virtudes de El Precio de Educarlos, que funciona como un bonito cuento donde se refuerza la importancia no sólo de los lazos fraternales, sino que se sacude los fantasmas de las producciones que llegan a streaming que parecen tener la calidad de una telenovela o que siempre caen en el tremendo melodrama o la salida fácil de la comedia romántica, creando inclusive un villano desesperante pero risible en la figura de Luis Arrieta, demostrando tener la calidad narrativa para conectar con el público.
“Existe en El Precio de Educarlos una propuesta cinematográfica a la que la gente respondió mucho y que les deja la sensación de haber visto una cinta en lugar del programa televisivo de la semana“, manifestó Portes. Así, esta comedia puede ser el producto más ñoño del director y guionista, pero donde nuevamente demuestra el gran tacto que tiene en su manejo de actores, sacándole jugo a un sentido del humor blanco que todos pueden mirar y en la que los espectadores verán reflejados esos dilemas que suceden, como bien decía ese programa sensacionalista de televisión, hasta en las mejores familias.