Hipnosis 2024: Air, Slowdive y High On Fire consolidaron uno de los mejores festivales de México

Los aviones sobrevolaban sin cesar el soleado cielo del diamante de la Jardín Balbuena. Era día de muertos, festividad que muchos aprovechan para convivir en familia o acercarse a los pintorescos sitios tradicionales. Sin embargo, no fue así para los miles que nos dimos cita en el Estadio Fray Nano para la nueva edición del festival Hipnosis, la cumbre de música psicodélica por excelencia de México y que como cada año, lució una curaduría ecléctica pero a final de cuentas, sobre la misma línea para ponerse bien “acá”. Ustedes saben como.

Encabezado por la celebración de aniversario del emblema noventero Moon Safari de AIR, así como el regreso del interesante fenómeno entre los jovenzuelos, Slowdive, quedó grabada otra edición memorable donde como siempre, brilló la música y el buen ambiente donde varios aprovecharon la fecha para llegar disfrazados (inolvidable la chica alien o el hombre plátano) en una sede que funcionó y ojalá, al fin se pueda conservar como hogar oficial gracias a lo céntrico de su ubicación. Ya tampoco la cambien como si fuera maestro de defensa contra las artes oscuras, por favor.

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Entre promesas internacionales y excelentes actos nacionales: así fue gran arranque del Hipnosis

¿No es una maravilla cuando una organización es tan precisa con sus horarios? En punto de las 12:30 como fue prometido, arrancó el Hipnosis con un acto nacional del cual no tenía el gusto: Demencia Infantil. Con ciertos toques de jazz ácido, es un sonido arriesgado para lo que la escena acostumbra. Además en sus visuales hubo fragmentos del juego WarioWare, como no amarlos.

Le siguió la canadiense Laurence-Anne a quien primero vi hace algunos años en el Indie Rocks. Ella ha evolucionado su sonido de un dream pop hacia el rock donde predominan las guitarras. Aparte hizo gala de sus proezas con el español e interpretó un par de temas en nuestro idioma. Un encanto.

Desde Gotemburgo llegó Melody Fields, otra interesante propuesta que debutó en escenarios nacionales, totalmente inspirados por el sonido de los 60s, tanto que por ahí sonó un homenaje al “Today” de Jefferson Airplane.

ElShirota es un acto ya consentido del festival y eso se refleja por la creciente base de seguidores que gritaron todo su apoyo a la banda. Pero lo que cerró esta primera parte, tal vez sea uno de los mejores hallazgos que nos haya dado el Hipnosis: Boogarins de Brasil. Juego de psicodelia con ritmos del Amazona y un marcado carisma de su líder en voz y guitarra, fue irresistible no agitarse entre sus versos. Ellos vinieron a celebrar diez años de su debut As Plantas que Curam que debes escuchar ahora mismo.

El sol no tardó en ocultarse, los aviones siguieron su incesante marcha pero con ello, era la llegada de los actos más esperados y ahora les contaré sobre los cinco actos más sobresalientes de la jornada. Con mención especial para los africano de Mdou Moctar que de no ser porque el audio falló estrepitosamente en las primeras canciones, estarían aquí. Oh sí.

Frankie and the Witch Fingers, una de las mejores bandas de rock del momento, volvió a México

Caía la tarde y previo al concierto de la banda estadounidense, ocurrió uno de los momentos más surrealistas que haya visto en un concierto. De la nada, aparecieron en el escenario dos botargas, una de pollo y una de pingüino, ambas personajes de Miniso para aventar peluches a la audiencia. Fue… Jodidamente increíble, nadie lo esperaba y eso nos puso de buen humor a todos.

“¡Francisco, Francisco!”, aclamaba el público y no era para menos. Esta es una agrupación que ha crecido mucho en los últimos años y con tan solo verlos en vivo, uno entiende porque. Frankie es un dedo medio en la cara para todos los Gene Simmons del mundo que proclaman que el rock está muerto. Son la pura fiesta, distorsión, solos de fantasía y movimientos cuasi epilépticos muy contagiosos.

Fue una hora de puro rock que pasó como el agua donde sonaron “Get Down”, “Electricide” y “Dracula Drug” mientras los ganadores de los peluches Miniso los ondeaban al aire en pleno slam. Sí, así de aleatorio y divertido estuvo.

Setlist de Frankie and the Witch Fingers en Hipnosis

1. Empire
2. Futurephobic
3. TV Baby
4. Get Down
5. Electricide
6. Realization
7. Pleasure
8. Dracula Drug
9. Cops and Robbers
10. Tea
11. Bonehead

Gang of Four revivió el sentimiento original del punk

Al caer la noche, el escenario Ojo encendió su pantalla central donde se mostraban varias banderas donde el centro, figuró una con el lema de Black Lives Matters. La conciencia siempre ha sido parte en la historia de Gang of Four y a través de sus canciones y visuales, dejaron en claro que el espíritu punk de la vieja escuela, siempre estará latente.

Con el grito de “Viva México”, Jon King entró en escena, su regreso a escenarios mexicanos tras seis años y en plan de gira de despedida. Si esto es cierto, ¡menos mal que pudimos verlo una última vez!

Los primeros en subir de manera festiva acorde del día de muertos, la bajista Gail Greenwood lució un bello maquillaje de catrina, lo mismo que el baterista, el leal compañero de King desde los 70s, Hugo Burnham. Fue un detalle lindo.

Lo que es seguro es que quienes esperaban un concierto inmaculado y perfecto, seguro quedaron decepcionados pero quienes queríamos reventarnos cual hoyo funky, estuvo genial. Escuchar “I Love a Man in a Uniform”, “To Hell With Poverty” y “Damaged Goods”, ver a Jon golpear un microondas con un bat y jugando con el micrófono sin importar azotarlo en el suelo, mientras la frase de su EP This Heaven Gives Me Migraine decoraba el fondo, fue excelente. Un adiós muy digno.

Setlist de Gang of Four en el festival Hipnosis

1. Return the Gift
2. Not Great Men
3. We Live as We Dream, Alone
4. Paralysed
5. Anthrax
6. He’d Send in the Army
7. I Parade Myself
8. What We All Want
9. I Love a Man in a Uniform
10. At Home He’s a Tourist
11. Natural’s Not in It
12. To Hell With Poverty
13. Damaged Goods

High on Fire: una pausa al baile para una brutal hora de headbanging

El Hipnosis no es ajeno al metal. Por ahí en 2019 ya tuvimos a Fu Manchu que a su vez, fue reemplazo de última hora de Electric Wizard (sigue pendiente esa, por cierto), Monolord participó en 2021 y hace dos años, Primus fue uno de los headliners. En esta ocasión, fue el turno de una de las agrupaciones más importantes de los últimos años en su primera visita a suelo nacional. Un logro que sí, puede laurearse la organización porque ningún evento metalero se había atrevido a traer a High On Fire.

Tremendo cambio de frecuencia fue pasar del ritmo casi somnoliento de Suuns (ustedes disculparán) a los agresivos riffs distorsionados de los californianos. Imponente, con su barba de candado y sin camisa, Matt Pike tomó el escenario para aplastarlo en un giro total a la noche con el mejor stoner que pueda existir y por el cual, un buen puñado de fans se hicieron presentes.

Sin mucha comunicación con la gente más allá de vocear las canciones, la ejecución de High On Fire fue perfecta y junto a los Frankie, fue de las que mejor audio gozaron. Así escuchamos “Burning Down”, “Fertile Green” y “Cometh the Storm”, mientras yacían perdidos entre la estética de fondo de sus visuales.

Lo interesante fue que a pesar de ser el acto más pesado, la gente les respondió muy bien, sin la usual indiferencia hacia el metal que da cierto sector del público. Varios lucían divertirse, fascinados por la energía y por ahí con “Rumors of War”, se armó un pequeño moshpit en la parte media de la pista (¡ahí estuvo gente, hasta lo pasaron en las pantallas, maldita sea!).

Aunque el final fue un poco anticlimático por la frialdad de su despedida con “Darker Fleece”, este ha sido uno de los mejores espectáculos del año. Una belleza que espero no se nos vuelva a privar por varios años más.

Setlist de High On Fire en el festival Hipnosis

1. Burning Down
2. Fertile Green
3. Hung, Drawn and Quartered
4. Cometh the Storm
5. Rumors of War
6. Sol’s Golden Curse
7. Snakes for the Divine
8. Darker Fleece

Slowdive, los favoritos del festival Hipnosis

Admito mi incredulidad cuando fue el anuncio de Slowdive como carta fuerte del Hipnosis. Ahí, la verdad, di a relucir mi ignorancia con el shoegaze más allá de My Bloody Valentine. Por fortuna, todo cambió para bien este sábado.

Es un fenómeno fascinante ver como una banda de culto surgida a finales de los 80s, tenga un enorme séquito de seguidores jóvenes. El origen me es desconocido pero al escucharlos, se entiende la conexión que provoca: su tremenda sensibilidad y sencillez es admirable.

Una vez más, el espíritu del día de muertos se apoderó de otro invitado y la genial Rachel Goswell, apareció en escena con su corona de flores y un vestido rojo bien tradicional. Después de ser aclamada por todos, caminó hacia su teclado decorado con papel picado blanco. Hermoso.

No hubo una banda que sonara mejor que ellos en todo el Hipnosis, ni hubo otra que fuera tan coreada. Desde las primeras palabras de “shanty” hasta el “Sugar for the Pill” y “Alison”, fluyó una armonía que llevó a varios a las lágrimas, a suspiros de satisfacción que pocos logran. Podrá ser música melancólica pero provocó gran felicidad a todos. Conmigo se ganaron un nuevo fan ansioso de verlos de nuevo.

Setlist de Slowdive en el festival Hipnosis

1. shanty
2. Star Roving
3. Catch the Breeze
4. Crazy for You
5. Souvlaki Space Station
6. chained to a cloud
7. Sugar for the Pill
8. Slomo
9. kisses
10. Alison
11. 40 Days
12. When the Sun Hits

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Air, la leyenda francesa que nos llevó al espacio

Cuando aparecieron junto a Phoenix en la clausura de los Juegos Olímpicos por unos instantes, fue imposible no fantasear en que llegara la fecha para recibir a Air en el Hipnosis.

Aunque pasaba de la medianoche y la energía de muchos ya había caído a niveles “hora de ocupar las gradas para sentarse”, presenciar y sobre todo, sentir las canciones de Moon Safari recorrer cada centímetro de nosotros fue algo extraordinario.

Encapsulados en un escenario blanco, estéril, con pinta de nave espacial, los franceses recorrieron desde “La Femme d’argent”, pasando por el himno “Sexy Boy” donde apareció el famoso changuito en pantalla, hasta “Kelly Watch the Stars” con sus estrellas viajando por el escenario, fue una interpretación perfecta donde además, no dejaron de compartir su amor hacia la Ciudad de México en todo momento.

Cuando todo parecía terminar con el álbum lanzado en 1998, ¡pues no! Encore con algunos éxitos, del “Cherry Blossom Girl” al “Don’t Be Light” para seguir con el baile. Eran casi las 2 am pero la felicidad no terminaba. Quienes no creyeron en el peso de Air como headliners, estuvieron equivocados hasta el final.

Setlist de Air en el Festival Hipnosis (omitiendo los temas de Moon Safari, obviamente)

1. Venus
2. Cherry Blossom Girl
3. Run
4. Highschool Lover
5. Don’t Be Light

Lo malo del Hipnosis

Francamente, este es un festival irreprochable en casi todo sentido. Si lo anterior del texto no demostró la calidad que mantuvieron todo el tiempo en cuanto a producción, montaje o puntualidad, más que a eso le añado la buena variedad de comida a precios no tan extremos como, digamos, en el Corona Capital, entonces no sé como echarle más flores. Solo hubo una mancha que los alejó de la perfección: lo horrible de su sistema cashless.

En el CC es malo, en el Hell and Heaven fue insufrible pero este, sin duda, ha sido el peor que haya visto en la vida. Durante las primeras horas, las filas para cargar eran eternas debido a la incompetencia de su personal que al principio, no sabían como funcionaba. Luego, se les fue el internet un rato y al final, ya ni tarjeta aceptaban, solo efectivo. ¿Cómo?

Aunque el año pasado funcionó bien y fue creativa la introducción de tarjetas en lugar de pulseras (aunque haya sido ignorada mi sugerencia de utilizarla en eventos Hipnosis), aquí simplemente quedó a deber. Es más, la gran mayoría de vendedores ni te mostraban tu saldo restante, le tenías que ir calculando. Desconozco si al final cumplieron su palabra de reembolsar al final pero eso habría sido una buena redención. Ese es el único aspecto a mejorar, la verdad.

Lo último va totalmente ajeno a la organización del evento, es más el anecdotario de supervivencia a la que es sometida el melómano. ¡Qué maldito horror el tema del estacionamiento! Aunque uno se puede quedar sin problema sobre Fernando Iglesias Calderón, los viene viene más chacas de la galaxia se dieron cita para adueñarse del espacio y cobrar desde los 100 hasta los 250 pesos por darte el privilegio de estar ahí (porque obvio, a la salida ni sus luces de que hayan estado cuidando). ¡Qué se jodan!

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