Pólvora Live
Rod Stewart en el Palacio de los Deportes: demostrando porque es una leyenda
Rod Stewart regresó al Palacio de los Deportes y sin importar la edad, se entregó como siempre ante todos sus fans.
“Tienes que ver a Rod Stewart alguna vez, es de los últimos rockeros que existen“, me dijo un señor hace 16 años mientras esperaba a Deep Purple en la Plaza de Toros. Desde entonces y dado el fanatismo forjado desde que escuchaba “Jóvenes Turcos” en el GTA, siempre quedó la espina.
Más vale tarde que nunca, la cita al fin llegó la noche del 28 de abril en el Palacio de los Deportes. Ahora con 78 años pero con la misma energía de un joven de 20, sir Rod levantó pasiones a cada instante, con todas las canciones del repertorio americano y de su propia cosecha que le han ganado el cariño del público por casi 60 años. Él es una leyenda viviente.
“¿Les he dicho ultimamente que los amo?”
Es curioso el contraste que puede haber entre unos cuantos asientos. A mi lado, un amargado colega que ni se quedó a todo el evento. Frente a mi, dos señoras muy alegres que meneaban la cabeza y aplaudían los versos. La sede a reventar y por fortuna, eran más los rostros de alegría por ver al hombre que en 1989, dio apertura a los shows masivos en nuestro país.
Bendita puntualidad inglesa que a las 9 pm y tras las fanfarrias de gaitas, Rod Stewart subió al escenario acompañado de una hilera de bellas acompañantes (nada perdido) y con un simple ondeo de mano, sacudió a más de 20 mil personas. Jamás había relacionado el “Addicted to Love” de Robert Palmer con él pero como introducción, quedó perfecta.
“Hoy es viernes por la noche, ¡nos esperan dos horas de fiesta“, dijo el rubio más sexy del mundo. Ver a Rod Stewart en vivo es inspirador; como él y los colegas de su generación, jamás volveremos a ver showmen de este calibre.
Rod cantó, retumbó el domo de cobre con un solo ‘Baby’ que exhalaba. Bailó por cada rincón, cambió de vestuario varias veces y como el caballero que es, le dio el reflector a sus acompañantes para lucir sus distintos talentos. Ellas también cantaron entre los cambios de atuendo, tocaban el violín, la mandolina, la guitarra y percusiones. ¡Todo un espectáculo digno de Las Vegas!
Del “Ooh La La” de sus años junto a Faces, el “It Takes Two” que interpretaba con Tina Turner al “Have You Ever Seen the Rain?” (mucho mejor que cierta banda de covers se la semana pasada), Rod Stewart supo manejar a la perfección el setlist, con sus momentos rockeros, un set acústico para dedicarle todo su amor al Celtic con “You’re in my Heart” y hasta el bloque de la discoteca de la gente joven para cerrar la velada bailando “Baby Jane” y “Do Ya Think I’m Sexy?”, cada coro quedó grabado en el alma de los asistentes. ¡Oh, ese dolor tan sabroso al escuchar a miles con “I Don’t Want to Talk About It”!
Aunque dos horas no son suficientes para englobar tantos éxitos y el cierre se sintió abrupto, el recital fue brillante. Es una lástima que en varias ocasiones, los pérfidos vendedores de cerveza no tengan consideración con el público. ¡A veces sus gritos se escuchaban más que Rod Stewart! Váyanse al carajo, la verdad.
Si este fue el último concierto del Sir en México, nos dejó un legado incomparable, lágrimas endulzadas por sus palabras y el recordatorio de que esta vida, hay que gozarla.
Setlist de Rod Stewart en el Palacio de los Deportes
- “Addicted to Love”
- “You Wear It Well”
- “Ooh La La”
- “Some Guys Have All the Luck”
- “It Takes Two”
- “Twistin’ the Night Away”
- “Have You Ever Seen the Rain?”
- “Forever Young”
- “The First Cut is the Deepest”
- “Maggie May”
- “I’d Rather Go Blind”
- “Young Turks”
- “Downtown Train”
- “I’m So Excited”
- “Rhythm of my Heart”
- “I Don’t Want to Talk About It”
- “You’re in My Heart”
- “Tonight’s the Night”
- “Have I Told You Lately”
- “Lady Marmalade”
- “Da Ya Think I’m Sexy?”
- “Baby Jane”
- “Sailing”