Entrevista a Wiplash: ya no son niños jugando a ser rockeros

Los chico malos están de vuelta. Si bien se dieron a conocer con un ritmo fresco, unas letras juguetonas pero sencillas y una actitud que enfureció a los más ‘trues’ del rock por su intención de experimentar con todo sonido posible, Wiplash continúa con su buena racha después de su primer álbum para volver con Narvarte y su más reciente sencillo, Prometimos. Ser rockeros ya no es un juego para ellos.

El Efecto Wiplash evoluciona

Después de su nominación al Latin Grammy, la explosión del denominado por sus fans ‘Efecto Wiplash‘ da un nuevo paso con su segundo disco de estudio. “Gracias a Dios nos ha estado yendo bien. Ahora, llegamos con una producción a cargo de Pepe Madero, es la primera vez que él hace esto. Nos sentimos emocionados y felices de poder interpretar algunas canciones que nos heredó que forman parte de este nuevo repertorio. También vienen varias rolas que son compuestas por nosotros, lo que marca esa evolución que hemos tenido como grupo”, menciona Daniel, bajista del grupo.

Comenzaron como chicos que se conocieron en TikTok pero ahora, la agrupación ha madurado en todo sentido. “Estábamos muy contentos porque estábamos madurando y se notaba mucho desde el sonido hasta la forma en que nos divertimos y actuamos. Hasta en la edad, yo tenía 16 y ahora ya tengo 19. Ha sido un cambio que hemos estado trabajando como personas. Cada día nos llevamos mejor y nos entendemos más. Está muy bonito y muy cool el poder crear esto juntos”, complementó Roberto aka ‘Smoke’, baterista de Wiplash.

Y es que la perfecta definición de esta agrupación de jóvenes es la que ofreció Daniel. “Éramos unos niños jugando a ser rockeros que llegaron demasiado lejos. Pero ya tenemos bastante experiencia, sonamos mucho mejor que antes. En nuestros primeros temas y presentaciones en vivo no sabíamos prácticamente nada de esto, lo cual no es un secreto. Pero la comparación actual es aplastante. Y claro que nos da gusto que figuras de la escena regiomontana del rock nos respalden a nosotros y a más compañeros. Es admirable que existan más bandas jóvenes aparte de Wiplash”.

La nostalgia de Wiplash en Narvarte

Para este segundo álbum de estudio, Wiplash viajó hacia el pasado a una colonia que los vió crecer como la banda que es ahora. “Nosotros nos conocimos por internet y cuando tomamos la decisión de venirnos a la Ciudad de México para cumplir nuestro sueño, el equipo detrás de nosotros nos abrió las puertas de sus oficinas que están en la Colonia Narvarte. Ahí es donde tuvimos nuestro desarrollo como artistas, músicos y banda. Entonces sí, este proyecto es un repaso nostálgico para nosotros”, declaró el bajista. 

“Ahora tenemos un sonido de este rock más nostálgico, como de los 2000. Se nota la esencia de Pepe y de Flip Tamez, grandes leyendas de rock mexa en ello. Decidimos traer esa nostalgia, pero con la esencia de Wiplash. Aunque las letras de las canciones son un poquito más simples o menos elaboradas en Narvarte, ahora tenemos muchísimos más arreglos. Este sistema es un poquito más complicado, pero eso demuestra que como músicos seguimos avanzando en nuestro camino”, añadió el baterista.

Asimismo, la propuesta de estos chavos se distingue por tener una congruencia que complementan también en sus videos. “Tenemos un equipo con el que siempre nos organizamos para llegar a un punto medio y así lograr los clips. Con ellos vemos toda la estética, pues sabemos que es muy importante ya que hoy en día no se trata solamente de lo auditivo, sino de un contenido audiovisual lo que jala. Entonces, escarbando en diferentes ideas llegamos a conclusiones. Lo que sí es que nos gustaría utilizar inteligencia artificial para un próximo vídeo”, reflexionó un emocionado ‘Smoke’.

De haters, tocar en vivo y redes sociales

No es un secreto que, desde sus principios, Wiplash se ha enfrentado al odio y desprecio de algunos puristas. Por ello, compartieron con nosotros su guía para combatir a los haters. “Creo que nadie se salva de eso. Te das cuenta que a Slipknot lo llaman reggaeton con guitarras o pop satánico o los que dicen que Metallica hace pop desde los 90. No puedes tener contento a nadie, sobre todo cuando se trata de los puristas. Con el paso del tiempo, ya menos gente se los ha tomado en serio y se han vuelto casi espanta chicas”, afirmó Diego, guitarrista de la banda. 

“Pero la única forma de afrontar eso es realmente tomárselo con humor porque a lo mejor al principio lo tomábamos muy personal. Luego te das cuenta de que lo mejor es no hacerlo  porque llegas a un punto en el que realmente te da risa ver el tipo de comentarios que ponen tipo esto no es rock, pero dejas que se te resbale y ya”, complementó.

Por otra parte, con una nueva gira en puerta, los chicos agradecen la oportunidad de poder tocar en vivo para sus fans. “Decía un músico que no hay peor error que tocar una nota sin pasión. Entonces nos sentimos muy felices, muy afortunados de poder estar en vivo frente a mucha gente, y aunque suene a que soy un mamador, los conceptos base de todo músico son los cambios de energía entre público y los artistas“, refrendó Daniel.

“Sean gritos, lloriqueos, sonrisas, esas energías que nos gusta intercambiar porque es por lo que vivimos y lo que hacemos. Un artista no saca canciones para que se escuchen en plataformas. El punto final de toda la trayectoria siempre es nuestro querido fandom. Y ese es el punto de realidad, donde se vuelve como un estilo de vida. Al final se trata de vivir para la música, no de la música”, añadió el glamoroso vocalista de Wiplash.

Finalmente, la agrupación hablo también de cómo las redes sociales ya son un aspecto fundamental para la sociedad actual. “Son una herramienta de trabajo para absolutamente cualquier persona, ya seas dentista, ingeniero, diseñador o músico. Si no las ocupas actualmente, estás completamente perdido. Lo mejor de esta herramienta es que es completamente gratis. Entonces cada persona la puede experimentar y explotar al máximo y también nos ayuda muchísimo a conectar con la gente, el fandom, a tener un acercamiento, porque al final somos humanos, nos gusta tener esa conexión entre nosotros mismos”, concluyó el baterista.