VNV Nation: “todo en México encaja en el concepto de ser legendario”

Muchas son las bandas de culto para la escena oscura nacional; a final de cuentas, el espíritu de los entes nocturnos fluye dentro de nosotros. VNV Nation es uno de los actos más queridos entre los fans de la electrónica y después de ser uno de los eventos previos al encierro pandémico, vuelven por estos lares a una nueva casa para albergar sus beats tras casi 10 años de adoptar El Plaza como su hogar.

Previo al show de esta noche, hablé en entrevista con Ronan Harris, líder de la banda nacida en Londres. Tal vez no charlamos del nuevo material de la banda pero las anécdotas aquí narradas, son invaluables.

El amor de Ronan Harris, líder de VNV Nation, hacia México

La última vez que el cantante y compositor visitó la CDMX, incluyó dos paradas: una noche de éxitos en el extinto Plaza Condesa y una previa, especial para los fans, en donde interpretó en su totalidad las placas Automatic y Empires.

“Quería hacer una gira así desde hace mucho y la iniciamos en Alemania. La gente amó estos shows porque ambos álbumes son muy importantes por distintas razones. Esto ayudó a unir dos grupos de personas, aquellos a los que les gusta lo viejo y quienes nos conocieron con lo más nuevo. También lo pensé porque ambos discos cubren canciones que los fans quieren escuchar aunque no sean conciertos dedicados solo a ellos.

Lo verdaderamente maravilloso fue cuando pudimos tocarlos en México, con toda la pasión y energía de la gente cantando todos los temas. ¡Eso no pasa muy seguido! No es común que canten las canciones viejas con tanto entusiasmo. Amé ese momento y después, cuando tocamos el siguiente show en El Plaza, fue llevarlo a otro nivel. Siempre me preguntan en Estados Unidos cual es mi ciudad favorita para tocar y sin ofender a nadie pero siempre será la Ciudad de México. Si quieres ir a un concierto de VNV Nation, no debes olvidar ir allá porque no es una cuestión de iluminación o sonido, sino del público. El público es el que hace el concierto. Me encanta.

No tocamos nuestras canciones hacia nosotros mismos para que ustedes nos vean. Queremos crear una unión, esa es mi filosofía desde el inicio y eso se logra muy fácil en México. También fue una sorpresa que la última vez que fuimos, tocamos en Guadalajara y son muy entusiastas por igual. Era un lugar más chico pero aún así, es como una especie de espíritu nacional que me fascina. ¡A veces siento que quiero dar más pero no sé que!

En esta ocasión estaré por allá en Halloween así que espero la gente vaya disfrazada. Todos en el mundo admiran lo festivo que son los mexicanos en estas fechas, es algo maravilloso. Si ustedes quieren celebrar algo no lo hacen al 10%, es el 100 o nada. Tal vez yo salga maquillado de la Catrina, ¿quién sabe? Es broma, no podría usar maquillaje con todo lo que sudo en el escenario”, carcajeó tras semejantes flores hacia nosotros.

Como si estuviésemos compartiendo una taza de café, esta pregunta inicial conllevó a que Ronan abriera su baúl de los recuerdos, uno que llevaría a su mente a compartirnos viajes por México, Alemania, Inglaterra y Japón.

“Varios integrantes del crew nunca han ido a México y me preguntan “¿qué se hace allá?”. Lo primero que respondo es que deben ser relajados porque la gente aquí, es bastante amistosa, tienen un humor de lo más divertido, sarcástico, seco como me gusta. Todo en México encaja en el concepto de ser legendario.

He recorrido cada rincón del país desde que tuve mi primera oportunidad. En 1990, viví en Canadá y fue cuando me invitaron a viajar por acá. Tomé una pequeña mochila y vine pero no en plan de una vacación común; odio hacer cosas de turista, quiero ver gente común y como es la vida real. Así que tomé los peores autobuses y tuve la experiencia de un recorrido genuino de México. Amé la historia, conocer los lugares prehispánicos y aquellos que tuvieron que ver con la revolución“, prosiguió.

Algo que ha caracterizado al proyecto desde hace más de una década, han sido sus shows con orquesta. Iniciativa que enorgullece y ha abierto un mundo de posibilidades en la carrera de VNV Nation.

“Algo que siempre he dicho es que si las canciones de VNV Nation pueden tocarse en una guitarra acústica, entonces son buenas composiciones. Trasladarlas al formato de orquesta fue sencillo pues tiene todas las herramientas para expresar la emoción de una canción.

Había querido hacer esto durante años, créeme, pero es muy complicado sin el contacto de una orquesta. He visto algunos espectáculos en festivales donde algunas bandas tocan con un ensamble pero me entristecía ver que no existía un balance; ellos tocaban normal y la orquesta solo estaba al fondo.

He sido fan de la música clásica desde los cinco años. Un amigo de la familia me explicó como funcionaba la música de aquellos años pues obviamente, es una estructura totalmente distinta a lo que hacemos años. Tiempo después, cuando me preguntaron si quería hacer esto para un festival en Alemania, ni siquiera dejé que terminaran la pregunta pues sabía hacia donde se dirigía.

Es el tipo de concierto más difícil de tocar para mí porque la emoción es apabullante y difícil de expresar. Si has visto el video de M’era Luna, notarás que estoy en otro mundo, casi como si estuviese del lado de la audiencia. Yo no soy el actor en el escenario, los actores están detrás de mi.

Lo increíble es que he podido realizar este show con una orquesta completa o junto a un ensamble de 20 cuerdas y un pianista. El formato está pensado para que incluso funcione con un grupo pequeño cuando no es posible pagar por algo más grande, como si fuera un concierto para una tarde en un festival.

Esto ocurrió en una ocasión. Eran las cuatro de la tarde y pensé que a lo mucho, llegarían unas cuatro mil personas que escucharían dos canciones y se iban o quienes intentaran gritar cosas graciosas. No creí que fuera el tipo de música que la gran mayoría quisiera escuchar algo así entre tantos actos alternativos. Pero tuve confianza en que todo saldría bien, aún cuando el organizador también tuvo sus dudas. Para mi sorpresa, llegaron 35 mil personas. ¡Honestamente nunca lo hubiera esperado, tan solo de acordarme me pone muy emotivo!

Se podía escuchar si un alfiler se caía, se escuchaba la respiración de la gente; el silencio era perfecto. Entre canciones aplaudían pero no sabían que hacer. Estaban algo nerviosos. Pero fue algo poderoso. Nosotros somos hombres, ¿no? Se nos enseña que no debemos mostrar nuestras emociones ni hablar al respecto. Nuestro trabajo es mantenerlas dentro y proteger a los demás. Sin embargo, creo que eso es un viejo mito, tal vez funcionó en el pasado.

Aquella vez, fue increíble ver cuantos hombres se acercaron conmigo tras la presentación y aún con las oraciones más breves o en pocas palabras, agradecieron la experiencia. Siempre se nos enseña un poco de machismo por aquí y allá. “Se fuerte”. Ese tipo de basura. Pero las emociones importan mucho.

Lo que igual me emocionó fue como en el backstage, todas las bandas de metal se acercaban con los músicos de la orquesta porque sintieron una conexión. Les preguntaban como tocar tal cosa, hablaban de como habían aprendido guitarra clásica de chicos e intercambiaban técnicas. Por supuesto, ellos no esperaban esto. Fue fantástico.

Estoy orgulloso de ello, sabía que sería bueno aunque jamás seré arrogante sobre algo. Solo haré siempre lo mejor que pueda. Siempre miro al público, me gusta ver sus reacciones y saber si hay una conexión. No importa si es para 200 o 20 mil. No hay diferencia, estás ahí para conectar con ellos y entretenerlos.

Así que el próximo año esperen verme de nuevo junto a una orquesta pues tocaremos ocho conciertos en algunas de las mejores salas de Alemania. Claro, esto será para lanzar otro álbum orquestal”, sentenció el artista.

Al comentarle que ojalá existiera la posibilidad de ver a VNV Nation en este formato mencionó que “llevar este espectáculo a México sería un maldito sueño“. Quien tenga el contacto de una orquesta, ya saben a quien dirigirse.

Ronan habló sobre la música como una banda sonora de lo cotidiano

Para Harris, la música clásica es importante para su formación y como base para todo lo que consumimos hoy en día.

“La mayoría de la gente cree que la música clásica es aburrida o anticuada. No lo creo. ¿Cuál es la diferencia entre ver una banda de metal y una orquesta? Ahí está Apocalyptica, por ejemplo. Obvio no habría mosh pits en un concierto así, la gente debe estaren silencio durante las piezas.

He escuchado tanto mis canciones cuando las escucho en formato electrónico pero cuando las canté por primera vez con orquesta, fue como recorrer mi vida. Esos temas son, de cierta forma, como un diario. Tal vez no hablen de mi vida pero me recuerdan donde y quien era cuando las hice. Soy una persona muy emotiva, ¿sabes? Escucha mi música y bueno, soy irlandés, somos gente extremadamente emocional“, reconoció entre risas.

La mente de VNV Nation, siguió adelante con la reflexión de estas estructuras y la siguiente postal de su baúl al corazón de la nebulosa Londres.

“Mi primer amor fue Beethoven cuando era niño y desde entonces, he comenzado a amar piezas más oscuras hasta llegar a los vanguardistas. Soy un enorme fan de las óperas de Wagner, al igual que artistas franceses como Satie, quien fue un rebelde que compuso fuera de las reglas musicales. Igualmente amo a Mahler, él tuvo una vida horrible aunque sus creaciones fueron perfectas.

Disfruto compositores menos conocidos como Schoenberg, Rajmáninov​ o piezas poco apreciadas de Tchaikovsky. De él hay varios números populares pero también hizo hermosas piezas corales que al escucharlas, es como estar en el Cielo.

La idea de un tema de apertura y como se utiliza la música a través de una película es totalmente Wagner. Es un hombre que contó historias de esta forma. Pero creo que todo se define en gustos. Quienes escuchan música dance no quieren escuchar metal y los que escuchan metal, no quieren saber de electrónica. Hay personas que no escuchan incluso rock de los 50 o 60 o hasta de los 90 por considerarlo anticuado y ese es un gran problema.

A mi también me pasaba, yo tenía un problema con el jazz, no lo entendía ni me gustaba. Los acordes usados, todo… No, no, no, no era para mí. Pero cuando escuché a los artistas correctos, se quebró mi inhabilidad para entenderlo y de repente, me abrí a un nuevo mundo de música. No me restrinjo a nada, amo la música porque es una expresión humana.

No me gusta lo comercial porque está concebido solo para hacer dinero, sin importarme si es una gran canción o no. Solo quieren tener éxito, no porque vayan a arriesgarse o experimentar, están vendiendo un producto a las masas. Lo que escucho es para sentir emociones, inspirarme a crear algo sin importar su género. Puede ser un soundtrack, un momento de mi vida…

Hace unos 30 años, estaba en Londres. La ventana de mi departamento estaba abierta, vivía en un octavo piso así que se podía ver bien la ciudad. Era de noche y la lluvia azotaba. Accidentalmente, sonaba Satie de fondo y Dios… ¡Me sentí en una película francesa! Esperaba escuchar una profunda voz en francés describiendo la escena. Reí mucho porque pensé que era todo un cliché. Amo la música, es el soundtrack para cada momento en mi vida.

Como recomendación, una gran introducción para quienes quieran adentrarse mentalmente a esta música, es que chequen el canal de YouTube de Two Set Violin. Ese par han atraído a muchos jóvenes al mundo musical gracias a su dedicación”, añadió.

“Tu descripción me hizo recordar tu atuendo en el video de ‘When Is The Future?‘”, comenté a Ronan. Entusiasmado por la referencia, ahondó en la última postal de su memoria: un viaje al país del sol naciente.

“¡Oh, de ese video debes saber algo! Surgió que de último minuto, fuimos a Japón. Fui feliz de explorar cada rincón de Tokio, vimos lugares a los que extranjeros no deberían ir. ¡Simplemente no queríamos detenernos! Caminamos durante tres días, conocimos los templos del viejo Tokio y estos edificios modernos cyberpunk tipo Blade Runner. No bromeo: Tokio en la lluvia es vivir Blade Runner. Lo único que le faltan son los autos voladores porque los anuncios en video ya están ahí.

Recuerdo que acabamos en una calle que nos llamó mucho la atención. Había estas hermosas linternas japonesas colgando. Había estos símbolos tradicionales por doquier y nos dimos cuenta que tal vez, no debíamos estar ahí. Sin percatarnos, estábamos en medio de territorio Yakuza. Por fortuna, un amigo me enseñó algo de japonés durante los 90 así que solo nos disculpamos, hicimos una reverencia y nos fuimos sin mirada a nadie. Fue mera cuestión de respeto.

Es importante conocer la cultura del lugar al que vas. Fuimos a templos donde vi personas bañarse en humo proveniente del incienso de unos gigantescos tazones. Pregunté para que servía y me dijeron que para alejar toda la energía negativa y todos los malos espíritus. El tipo tenía unos 95 años pero parecía de unos 60. Hay algo ahí, llevan una buena vida”, concluyó con alegre curiosidad. Muy contagiosa, por cierto.

VNV Nation regresa a México al Pabellón Oeste del Palacio de los Deportes: este es el precio de los boletos

VNV Nation se presentará hoy, 31 de octubre, en el Pabellón Oeste del Palacio de los Deportes. Aún encuentran entradas, ya sea a través de Ticketmaster o en taquillas del Domo de Cobre, sin cargos por 800 del águila. Corre por ellos o no sabrás si Ronan si irá de catrina a la cita.