Cine
Héroe por Encargo, muchos balazos, chistes malos y John Cena
Hay una camada de luchadores de la WWE que han probado suerte en el mundo del cine. Desde “Rowdy” Roddy Piper y André el Gigante hasta los tiempos de Dave Bautista y Dwayne “The Rock” Johnson. En Héroe por Encargo, John Cena busca repetir lo hecho en otras cintas entretenidas donde las risas no faltan y en las que ha mostrado una faceta cómica interesante. Pero no siempre los plomazos y las carcajadas logran una buena combinación.
De qué trata Héroe por Encargo
Un exmilitar (Cena) que tiene problemas para aceptar su vida cotidiana al lado de su esposa (Alice Eve) y su hija, acepta un trabajo ofrecido por un ex compañero suyo (Christian Slater) para brindar seguridad a una periodista caída en desgracia (Alison Brie) mientras ésta busca realizar una entrevista imposible a un dictador (Juan Pablo Raba) que podrá cambiar el curso de su carrera. Pero las cosas no serán tan sencillas para este grupo desigual y el exmilitar tendrá que hacer de todo para salir airoso de su misión.
Dirigida por el veterano Pierre Morel, destacado realizador de filmes de acción espectaculares como Distrito 13 (2004) o la primera entrega de Búsqueda Implacable (2008), y bajo el debut en la pantalla grande del guionista y actor Jacob Lentz como el creador de este relato, Héroe por Encargo se siente como algo tan genérico que parece juntar un cúmulo de skecthes de acción con una que otra broma que jamás aterriza del todo bien.
Lentz es incapaz de crear un personaje interesante, pues pareciera que todo sucede por la magia del guion. Si bien la motivación central del agente Pettits (Cena) parece partir de una sensación de culpa o insatisfacción por no poder completar la misión encomendada al inicio del filme, misma que lo relaciona con el malvado dictador Venegas (Raba), tampoco explora le dilema que ese problema crea con su esposa e hija, dándole una solución facilona a ello.
Asimismo, la figura de Venegas es algo problemática, sobre todo por los giros que da y que maneja un discurso de redención que justifica ciertas posturas bastante cuestionables sobre el manejo de un gobierno con tal de hacer gracioso al personaje. Y ese el el gran problema, pues la historia no deja de sobre explotar los clichés de este tipo de filmes para llevarlos al conflicto que existe en Pandonia y la misión del súper soldado que es creado al más puro estilo de El Marine (Bonito, 2006)
A pesar de ser un cliché andante, uno de los que se salve en Héroe por Encargo es le colombiano Juan Pablo Raba, quien parece ser el único que no se toma tan en serio la absurdez del filme. Con todo y el problemático guion, el actor logra que Venegas sea un chiste andando que logra conectar algunos de los chistes que se salvan dentro de este filme, a pesar de que luzca más como narcotraficante que como presidente de una nación, a menos que ese fuese Peña Nieto.
Por otra parte tenemos a Cena y Brie, cuya química en pantalla lamentablemente no se da. El agua y el aceite se juntan más que estos dos actores, culpa en parte de la fallida intención del tono del filme y de la absoluta mala escritura de sus roles. Esto hace que la cinta se vuelva tediosa pues son ellos dos y su relación la guía para el desastre y cuestiones que detonan en este país latinoamericano ficticio. A pesar de que lo intentan demasiado, simplemente ninguno de los dos se ve cómodo.
Es curioso, pues dado el pasado de ambos y su experiencia en la comedia, asombra que no logren un buen momento en pantalla. John Cena ha demostrado, incluso en cintas o series de acción cómicas, que puede hacer comedia. Basta con recordarlo en uno de los mejores proyectos de DC, Peacemaker con James Gunn o incluso en algunos destellos con Jackie Chan en la cinta de Netflix, Proyecto Extracción (2023). Pero en Héroe por Encargo, se siente justo así, como un papel de encargo en el que no se siente libre de explotar esa caacidad que tiene.
Ni qué decir de Alison Brie, que incluso ha trabajado en tragicomedias interesantes como la tristemente cancelada Glow de Netflix o su icónico papel en Community como la aparente santurrona Annie Edison y su complejo rol de voz en Bojack Horseman como Diane Nguyen. Aquí, nuevamente la historia le juega sucio pues los momentos donde debería ser graciosa al lado de Cena no lo son, sintiéndose que están meramente repitiendo un diálogo por compromiso más que sentirlo y poderlo dotar de gracia.
Las secuencias de acción tampoco son brillantes y carecen de una buena edición que es raro en Morel, dada su experiencia en el género. Incluso los enfrentamientos mano a mano no lucen del todo bien, algo llamativo ya que tienes a un ex luchador que sabe muy bien como hacer una coreografía de pelea si está bien dirigido. Ni qué decir del desperdicio de actores como Martin Csokas o Christian Slater, quienes aparecen para alargar el sufrimiento del espectador ante una cinta que peca de no ser graciosa y jamás entender lo que quiere generar en el público.
Así, este Héroe por Encargo lleva en su nombre la penitencia, pues a todas luces se siente como un filme de esos que se hacen sin amor, solamente por el dinero. Es triste, dado que Morel y compañía bien pudieron crear algo muy al estilo ochentero de cintas absurdas de héroes de acción como Cobra (Cosmatos, 1986) con Stallone o la clásica de culto de Schwarzenegger, Comando (Lester, 1985), incluso haber ahondado en la seriedad del tema con los dilemas morales y cuestiones que presenta por encimita el relato. Pero no, esta es una de las veces que los balazos y las risas matan a una película.