Pólvora Live
5 Seconds Of Summer: Las flipantes aventuras de un 30ñero en un concierto para pubertos
5 Seconds Of Summer estuvo en la CDMX y como buenos treintaeñeros salimos a chavoruquear
Mi madre me dio la vida, pero la wasa y las risas por las situaciones fuera de mi media de edad, me dieron las ganas de vivirla. Y es que como no hacer esa anotación después de haber vivido una noche llena de contrastes, risas, mucho calor y gritos a cargo de la fanaticada de 5 Seconds of Summer o 5SOS pa’ los chavos.
La nostalgia se apodera
Para todos aquellos camaradas que no conozcan la Ciudad de México, en específico el Palacio de los Deportes, deben de saber que la salida más próxima del metro hacia el recinto está acondicionada para llegar justo a las entradas del lugar. El porqué de tanta explicación, es para que se sitúen (los que ya conocen) el glorioso camino de ese puente hacia el ‘Domo de Cobre’, ese camino en donde empiezas a tener ese frenesí de emoción al ver a la banda que te gusta, la cual conlleva ir con los colegas a echarse un buen rato musical mientras se olvidan los prejuicios, se adopta el bailongo y se acaricia el cielo acompañado de las letras de tu canción favorita. Esa emoción de verdadera felicidad que por allá del 2006 sentí al encaminarme a mi primer concierto (Placebo).
Toda esa nostalgia se trasladó a mi ser al ver en las facciones de adolescentes (chicas en su mayoría) con las caras llenas de emoción, con la playera puesta, con las caras pintadas y claro, no podía faltar las coronitas de flores. Estaba ante una generación nueva en dónde estoy seguro que muchas de ellas estarían en las mismas condiciones que yo hace muchos años, ir al pinche primer concierto de sus vidas.
El camino hacia la entrada del recinto ya mostraba sus característicos puestecitos con la taza la playera, la sudadera y la pulsera que serían el testigo de que la muchachada asistió al llamado de la Boy Band originaria de las tierras australianas. La calle y las ropas coloridas lo confirmaban, nos esperaba una noche de mucha emoción.
El previo y los regaños de Miss Mary
Llegué temprano para ver la movida, ingenuamente y quiero que tengan esto mucho en mente para todo lo que resta de la nota, ingenuamente creí que el evento no tendría mucha asistencia, claro, mi prejuicio me nublaba y mi desconocimiento sobre el impacto de la banda también.
Por ahí de las tantas cuando el güero se andaba escondiendo apenas, el Palacio de los Deportes comenzaba a recibir cantidades importantes de taxis de ampliación, camionetones de papás y una que otra parejita de jóvenes adolescentes llegando a pie. Los autobuses de provincia se alcanzaban a ver en el estacionamiento, “la cosa se va a poner seria”, pensé, puesto que la fila para el acceso a las puertas principales ya se encontraba dando la vuelta sobre la calle de Añíl. Dijeron algunas personas, esto sin constarme claro, que hubo gente que llegó desde un día anterior para apartar su sitio cerca del escenario, no podemos juzgar a nadie, ¿cuántos de ustedes no lo hicieron?
Ocho de la noche y el acceso estaba abierto, la muchachada comenzaba a llenar el recinto, y justo recién entré fui recibido por un tremendo hornazo, fue como entrar a una sauna donde miles de personas ya se encontraban apretujadas, agitando su boleto o lo que tuvieran en mano para hacerse “airecito” para contrarrestar el bochorno y ansiosas por la salida del cuarteto de muchachos.
Previo a que saliera el telonero, un anuncio en los altavoces abogaba por la seguridad del evento, recomendando mantener distancia y señalando las salidas de emergencia. Pero para este momento te estarás preguntando, ¿quién diablos es Miss Mary?
Desconozco si su nombre era Mary, pero la escena fue un poco incómoda y de risa, pues bien, una señorita parte del staff del recinto, salió al escenario a pedir la colaboración del público que se encontraba en General A, pidió a la gente que se hicieran un poco para atrás para permitir el espacio, ya que entre apretones y el calorón que hacía, ya eran varias las personas que habían tenido que sacar del tumulto.
Hasta aquí todo bien, entendemos que se deben de acatar las medidas de seguridad por el bien de todos, sin embargo hay una regla muy poderosa que Miss Mary no supo: Jamás, jamás, le digas a un adolescente lo que tiene que hacer.
Posterior al “les pedimos su colaboración para hacerse un paso hacía atrás, si no lo hacen la banda no va a salir”, no pasó ni medio segundo cuando la gente aglomerada le hacía señas con el dedo de que no lo harían y todas las gradas comenzaron a reír después de lo que dijo. Ahí me pregunté ‘¿es neta lo que acaba de decir esta morra?’.¿Ustedes creen, amable público, que eso sucedería? ¿Qué se cancelaría la tocada y que tu boleto de más de mil varos no valdría para un carajo? Como amablemente diríamos los de nuestra generación, se la mamó.
La situación no perdonó y las risas y los reclamos no se hicieron esperar, entiendo que las medidas de seguridad neta que sí son muy muy importantes sobre todo con el tema del calor (si es un dato a destacar), pero que salgas a decirlo como prefecta del cole, ña, error.
La tocadera
Cerca de las 8:30 pm la telonera abrió el escenario cerrando cerca de las 9:05pm, para dar paso a uno de los descansos más prolongados que he vivido en esta vida, cerca de 40 minutos en los cuales la banda por ahí cerca de la media hora empezó a desesperarse, y lo único que les dieron fueron un par de sketches con la banda que se transmitieron por las pantallas laterales del escenario. Como respuesta al aburrimiento, las morritas se organizaron chido y comenzaron a hacer la emblemática ola del estadio, gesto mundialmente reconocido que además de verse bonito, estrecha nuevas amistades.
Ya a media ola surfeada, las luces se apagaron y salió la banda quien fue recibida por uno de los gritos en multitud más grandes que he escuchado en mi vida, y vaya que las morritas y morritos tienen pulmones, ya que era como ver a Bob Esponja ser vitoreado cada vez que respiraban estos sujetos de 5 Seconds Of Summer.
“No Shame”, “Teeth”, “Talk Fast”, “Ghost of You” y “Youngblood” fueron parte del repertorio de la noche, un repertorio cumplidor que abarcó buena parte de sus exitazos a lo largo de los ya 11 años de trayectoria de los chavitos que no son tan chavitos y que sin duda alguna tienen a un fandom bien afianzado, ya las veo en 15 años más como las actuales chavorrucas adorando a los Backstreet Boys. Y no es queja eh, realmente da gusto que a lo largo de los años estas bandas logren identificarse con su público y tratarlo de una buena manera.
La conclusión de 5 Seconds Of Summer
Pues bien queridos lectores, la conclusión es sencilla 5 Seconds Of Summer es una banda que es excelente en la ejecución, cumplidora en la interacción y que sabe darse a querer dentro de su público, todo eso es muy bonito si le quitan toda la amargura de años y de edad adulta con crisis que tiene este humilde redactor, puesto que a oídos de nosotros los que pedimos a Caifanes y fumamos Camel (los 30 ñeros) este tipo de bandas nos puede parecer plana y tediosa, sin embargo, hubo dos rolitas que hicieron que considerara darles un lugar en mis listas de Spotify.
Ahora, no es algo que pueda yo recomendar puesto que estamos en el limbo del gusto por 5 Seconds Of Summer ya que, o eres muy joven para que te guste, o eres la mamá o el papá de ese nuevo adolescente que logró convencerte para que lo acompañaras al concierto.