Crítica a Detonantes, una película entretenida pero olvidable

Tuve la oportunidad de ver Detonantes (Trigger Warning), la nueva película protagonizada por Jessica Alba y producida por Netflix en donde nos cuentan la historia de Parker, una chica de las fuerzas armadas especiales estadounidenses que regresa a su pueblo para descubrir los secretos que hay detrás de la repentina muerte de su padre.

Cabe señalar y quiero hacer la acotación, de que no se me conoce como el mayor fan de la señorita Alba, ya que fuera de Sin City, sus papeles me han parecido muy tibios, sin embargo, y con todo sus clichés posibles, Detonantes funciona como una buena película dominguera con una que otra escena de acción interesante.

De esto va Detonantes

Parker (Alba) se encuentra repartiendo chingadazos en medio oriente cuando de repente recibe una llamada del Sheriff de su pueblo natal y antiguo interés romántico Jesse (Mark Webber), el cual le dice que su papá ha sufrido un accidente dentro de su mina la cual se ha desplomado.

De inmediato Parker al llegar al pueblo, sabe que el accidente se monta como un supuesto suicidio y que ha sido orquestado por otra gente ya que por ahí andan rondando los nombres de Elvis (Jake Weary) y el senador Ezekiel (Anthony Michael Hall) quien son hermano y padre de Jesse respectivamente como presuntos perpetuadores.

Su investigación la lleva rápidamente a descubrir que hay una red de tráfico de armas militares que utiliza las viejas minas de su padre ‘Pops’, por lo que debe de encontrar a los responsables y repartirles sus correspondientes chingadazos para recuperar al menos un poco de la verdad en nombre del honor del jefazo.

Lo bueno de la película

Tiene algunos momentos muy interesantes en donde se destacan las escenas de acción, puesto que una de las habilidades a destacar de la protagonista de Detonantes es el hecho de que es una experta en el manejo del cuchillo, por lo que podremos verla repartiendo bueno buenos filerazos con el fierro.

En eso sí se rifa Jessica hasta eso, al igual que la congruencia de las cosas de la historia, como el hecho de que tanto ella como su papá sean unos mequetrefes idealizando contraseñas.

Lo malo de Detonantes

Desafortunadamente, es una película que va de nuevo pal montón, es una de esas películas que ves una sola vez y te olvidas de ella por el resto de tus días. Si bien desde los primeros minutos ya descubres toda la verdad por tu propia cuenta, es interesante ver como avanzan sobre el camino los personajes, sin embargo, no se salvan de caer en el cliché de cuellos rojos con armas.

Definitivamente, tienes que tener paciencia, ya que la primera parte de la película va lentísima, pero en serio lenta, ya que por más que quieren meterle prisa, simplemente hay personajes que poco ayudan, pero que tienen que justificar su aparición en la pantalla.

Otra de las cosas que no logran explicar del todo son los intereses del padre, si bien lo devuelven en flashbacks muy inmersivos con música mexicana de fondo (‘La Llorona’) no deja de sentirse como relleno para justificar el rato.

De ahí en fuera la estructura es la misma, los personajes, los mismos, las típicas frases chistosas de peli de acción de los 80´s, realmente no aporta nada nuevo al género.

Conclusión

Sigo sin entender por qué en ocasiones la industria no llega arriesgarse a contar historias un poco diferentes; sin embargo, volteo a mi alrededor y me doy cuenta de que justamente esta es una de esas películas desenfadadas que puedes ver mientras te comes tu pollito frito o tu torta de milanesa con queso en una tardecita tranquila, o bien que cierta población gabacha va a disfrutar mucho.

Ya saben, granadas, cuchillos, explosiones y una morra dando de chingadazos nunca va a estar de más cuando cine palomero se trata.

Afortunadamente, si tienes una suscripción de Netflix la puedes ver y solo invertirle unos 15 varitos en unas papitas para acompañar la tarde de domingo mientras vez Detonantes, porque ya te digo, es divertida, pero nunca en tu vida la vas a volver a querer ver.