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Pólvora Live

Hell and Heaven 2023: Un manual sobre como regresar a los viejos y malos hábitos

Después de una buena edición en 2022, Hell and Heaven volvió a manchar su propio nombre en 2023 ahora con un festival lleno de errores

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Letrero bienvenida Hell and Heaven

Antes de iniciar debemos hacer una aclaración, esta nota habla sobre aspectos técnicos del festival, si por el contrario quieres ver la cobertura sobre las bandas por día puedes encontrarla en:

Día 1: lo mejor del HC punk, nu metal, death metal y hartos vikingos

Día 2: una fina selección de goth, thrash, metalcore y Muse

En nuestra memoria está fresca la edición de 2022 del Hell and Heaven, un festival que presentó un cartel ambicioso durante tres días con el cual se veía que la producción del mismo buscaba ese renacimiento de la marca en donde al parecer el Foro Pegaso lo convertirían en ese foro obligado para asistir al menos una vez por año.

Desafortunadamente, menos de un año nos duró ese gusto, la edición de este año regresó a varios malos y viejos hábitos en donde los principales afectados resultaron ser el público y las bandas.

Es bastante difícil entender que la marca como tal del Hell and Heaven haya iniciado en 2010, 13 años donde cualquiera podría jurar que quienes lo producen saben lo que hacen, y que a lo largo de más de una década han aprendido de lo bueno y malo de cada edición, pero esto no es así.

Lo malo del Hell and Heaven 2023

Esta sección la iniciamos hablando por supuesto de esa táctica que les celebramos en este espacio el año pasado, el anunciar grupos justo al finalizar la presentación de Kiss, un movimiento ambicioso pero que actualmente lo vemos como algo completamente inútil, ya que a esa técnica no se le dio un buen seguimiento y terminamos con un anuncio del cartel tardío y a cuentagotas, además de que varias de esas bandas anunciadas en 2022 ya no figuraron en el evento como Emperor, GBH y Angra.

Retraso en la apertura de puertas y en estacionamiento

Pasemos al día del evento, la primera falla garrafal que encontramos fue encontrar el recinto cerrado el viernes , el equipo de Pólvora llegó al Foro Pegaso a las 13:30 hrs., para darse cuenta de que ni el estacionamiento estaba abierto. Mucha gente haciendo fila en la calle y bajo un intenso calor, sin duda no es un trato que merece el público.

Una masa de gente reinada por el caos

Una vez que las puertas fueron abiertas fue un completo caos, miles de personas intentando ingresar a un evento que flamantemente los organizadores anunciaron en varias entrevistas y conferencias de prensa que estaría abierto desde las 11:00 am, esto también ocasionó que el personal de seguridad se viera rebasado y no revisarán bien a esa gran masa de gente que lo único que quería era ingresar al festival.

Gente esperando entrar al Hell and Heaven
Las filas no se respetaron y en bola la gente decidió entrar por el acceso principal del Hell and Heaven

Acá viene otro gran error restringir el acceso del público a todo el festival. A alguien se le ocurrió la gran idea de pasar al público al primer cuadrante del festival, donde se encontraba el New Blood Stage y mantenerlos ahí, obviamente todo lo anterior combinado con el hartazgo derivó en un portazo al interior del festival, no es justificable pero totalmente entendible.

Este error en el acceso fue arreglado en los dos días posteriores, aunque si bien, había gente, la fila avanzaba ya de manera mucho más fluida.

Montaje sin terminar

Una vez dentro del festival nos dimos cuenta de que el retraso se debió que el montaje de escenarios, como en el caso del Trve Stage que solo dio tiempo de poner techo en una parte. De nueva cuenta el primer día no hubo señalizaciones para las zonas VIP y preferente, ni hablar de los escenarios los cuales también les faltaba alguna manta o algo que no indicará cuál era el Hell, el Heaven, el Trve o el Negra Modelo, de nuevo fallando ahí Hell and Heaven.

¿Y los baños del Hell and Heaven?

Cualquier evento por pequeño o grande que sea debe contar obligatoriamente con sanitarios en relación a la cantidad de gente que se va a recibir.

En Hell and Heaven un problema de logística limitó el número de estos tan necesarios espacios. Para muestra lo que se vivió en la zona VIP, la cual el primer día del evento solo contaba con la cantidad de 4 baños, dos colocados cerca del escenario Negra Modelo y otros dos colocados al final de la plataforma elevada de la zona VIP.

Lo anterior derivó en qué los sanitarios habilitados en la zona general se vieran rebasados provocando grandes filas; creo que nadie quiere perderse a una banda por estar esperando para poder ir al baño.

Debido a la falta de sanitarios hubo mucha gente que decidió agarrar bardas o ir a sitios escondidos entre los árboles como en el caso del New Blood Stage para agarrarlo de baño.

Eso si para el segundo y tercer día el tema de los sanitarios fue reforzado siendo que todo debió quedar listo para el día viernes.

Un VIP grande, incompleto y con problemas

La gente que pagó los boletos más caros de este evento por lógica debería tener una zona lista y con algunas comodidades adicionales pero de nuevo Hell and Heaven falló, la zona era muy grande, eso sí, hay que reconocer que la oferta de comida se amplió pero muchas no pudieron comprar durante las primeras horas del evento ya que no había luz, la zona del banco de cashless fue una de las afectadas por falta de energía eléctrica provocando que mucha gente que ya estaba en el VIP tuviera que moverse momentáneamente a otras estaciones para hacer la recarga.

Aquí también vimos un spot para fotos que terminó de montarse durante el día viernes.

Hell and Heaven se caracteriza por ser un festival que implementa la opción de upgrade; para los nuevos, está modalidad es poder cambiar tu pulsera de acceso por una que tenga acceso a otra zona del evento pagando la diferencia ya sea que quieras subir de general o preferente a VIP. Dicha opción llegó hasta el segundo día del festival y con algunos problemas para realizar los cobros.

Las cancelaciones y cambios de bandas por día

Esta edición del Hell and Heaven brilló por el número elevado de cancelaciones rondando por ahí de las tres decenas, si bien entendemos que ya ningún festival se salva de esto, es alarmante la cantidad de estas situaciones que se presentaron, muchas bandas argumentaron que fue debido a faltas de contrato y otras simplemente callaron.

El silencio sepulcral del Hell and Heaven sobre las cancelaciones es otra de las cosas malas, no es posible que el propio público mejor haya tenido que recurrir a las redes sociales para preguntar a los artistas sobre si su participación estaba confirmada o no.

La cereza del pastel es que tampoco la producción se tomó el tiempo de informar sobre los nuevos horarios, en el caso del primer día, el escenario Negra Modelo se retrasó todo hasta por una hora, el sábado transcurrió sin problemas, mientras que el domingo de nuevo hubo cambios de horarios en el Negra Modelo, poniendo a los grupos a tocar en horarios bastante adelantados a los que se había anunciad, y ese mismo día en los escenarios Hell y Heaven también se tuvo un adelanto de hasta 15 minutos en algunos grupos.

Altos costos en alimentos y estacionamiento

Al parecer la queja del año pasado sobre los sobreprecios que encontramos en el festival fue escuchada a medias y es que otra vez los precios de la comida y bebidas estaban un poco más elevados que en otros festivales, pero no tanto como en el Hell and Heaven 2022, muestra de ello es la cerveza la cual acá se vendía en $160, mientras que en otros conciertos/festivales se puede encontrar en $120.

Precios del estacionamiento para el Hell and Heaven 2023
Precios del estacionamiento para el Hell and Heaven 2023

Ligado a esto viene el aumento en el precio del estacionamiento del Foro Pegaso, sabemos que con la inflación todo sube de precio, pero es una tontería ver un aumento del 50% sobre el precio de este servicio, el año pasado el costo por un vehículo normal era de $200, ahora la tarifa fue de $300.

Nula capacitación para los elementos de seguridad

Los elementos de seguridad privada muchas veces pasan como gente casi invisible en estos grandes eventos, desafortunadamente en este Hell and Heaven notamos que aquellos que fueron a trabajar no tenían conocimiento sobre sus labores a desempeñar.

Muchos de ellos brillaron por no revisar a los asistentes e incluso hay fotos en redes en donde mucha gente presume de manera “gloriosa” el haber introducido objetos prohibidos al Foro Pegaso.

En los accesos no hay protocolos o monitoreos para evitar portazos, dentro del festival vimos por ahí un par de ocasiones en que varias personas decidieron hacer portazo hacia el área preferente al ver la endeble barricada de popotillo que dividía ambas zonas, y ni hablar del portazo del último día en el acceso principal del Foro Pegaso.

Vimos también un pobre manejo de barricada, en un evento de metal hay que tener claro que en algún momento comenzará el crowd surfing, acá parecían desconocerlo completamente por lo que no sabían cómo recibir a las personas y optaban por mejor dejarlas caer al piso para después sacarlos de nuevo al público, una situación que pudo provocar alguna lesión más fuerte, esto se vio bastante marcado en la presentación de Exodus.

Cero tacto para tratar al talento del evento; así es como vimos a unos elementos de seguridad de los escenarios principales en donde casi pegándoles trataban de retirar al grupo The 69 Eyes de la barricada, ellos querían ver la presentación de Billy Idol el día domingo, pero uno de estos elementos de “inseguridad” en lugar de entablar un diálogo llegó de manera intimidante y agresiva.

Inexistente respeto para el público

Con 13 años de existencia no puedes burlarte de tu público, no puedes anunciar boletos que cuestan por arriba de los tres mil pesos o zonas que incluso están muy por encima del precio de boletos como eventos del Wacken Open Air y días antes simplemente regalar miles de ellos u ofrecer promociones del 2×1, por supuesto que hay quienes celebran estas promociones y dirán, “yo me la pase con mi boleto de $500”.

Tampoco puedes cambiar de buenas a primeras el día en que toque algún grupo, mucha gente compra boletos por ver a una sola banda y no un abono de 2 o 3 días, entonces al hacer esto dejas sin muchas opciones a las personas, muchas de ellas tal vez puedan comprar un boleto para el otro día, pero muchas otras no, está situación ocurrió con bandas como Biohazard y Candlemass.

El limitado respeto para las bandas

Es claro que el festival se preocupa por tener a sus headliners más que asegurados, pero ¿Qué hay del resto de los grupos?, ya vimos que fuera de las dos estelares de cada día esto puede ser un volado, al no cumplir con contratos o cosas que se discutan en las negociaciones como temas de hospedaje, transportación, etc., incluso bandas como London After Midnight destacaron la poca comunicación del festival hacia ellosdias previos al evento.

Lo rescatable del Hell and Heaven 2023

Aquí muchos podrán decir que no hay cosas por rescatar, pero si las hay, aunque por supuesto en número no se comparan a las cosas malas. Pero por segundo año consecutivo damos la palomita al transporte oficial, esa alianza que Hell and Heaven ha hecho con Flecha Roja, sin duda es una opción segura y confiable para quienes no tienen automóvil o simplemente no quieren manejar acabando el festival.

Otro de los puntos buenos viene un poco derivado de una característica que ha hecho distinguir al Hell and Heaven, este festival es gratis para los niños que entren acompañados de un adulto, pero el punto bueno no es este, se agradece que el festival ahora haya creado un espacio donde se pudo presentar Jack Distortion, una marioneta proveniente de Chile que se ha hecho famosa gracias a vario videos virales, en donde se ve a los pequeños disfrutar canciones características del rock y metal gracias a este personaje. Pensamos que está es una área de oportunidad que se le podría dar seguimiento, y por qué no, hacer un escenario para los más pequeños en donde tengan oportunidad de ver a grupos como los Heavysaurios.

La curadoría que destacamos el año pasado sigue por buen camino, este año destacó bastante la inclusión de su concepto Temple of Gods, algo enfocado para quienes gustan de las bandas con temática gótica, acá vimos atascando el escenario a grupos como Ville Valo, Lacrimosa, The 69 Eyes y London After Midnight, pero también hay algo malo, el concepto no estuvo completo debido a ese tema de cancelaciones, bandas como Hocico y Front Line Assembly se bajaron del barco, así que si esto se vuelve a repetir, ya sea con bandas goth o de otros géneros el festival debería asegurar la participación todas.

Debemos reconocer que al menos los seis actos headliners que fueron anunciados (Slipknot, Helloween, Muse, A Day to Remeber, Guns N’ Roses y Billy Idol) si llegaron y tuvieron una presentación sin contratiempos haciendo olvidar por un rato el trago amargo a gran parte de los asistentes. También es de reconocer que si se pagó un show completo de Guns N’ Roses, ya sabemos que no fueron las 4 horas que se prometieron, pero si una presentación de alrededor de 180 minutos, superando en tiempo a otras recientes visitas del grupo a México.

El polémico tema de las bandas mexicanas

Gran parte de las cancelaciones de este festival fueron las bandas nacionales, muchos de ellos de plano no les informaron nada y otros al ver que el festival quería moverlos o recortarles el set por cuestión de tiempo decidieron no presentarse, un acto que aplaudimos ya que ese mismo respeto que se le da a los grupos internacionales debería ser para los mexicanos.

De nuevo vimos esa pésima práctica que la producción ha hecho en festivales como Force Fest y Hell and Heaven con bandas tocando sin gente ya que las puertas del recinto todavía no se abrían.

Pero también hacemos un llamado de atención para que estos grupos dignifiquen su trabajo, cobren su presentación, estos empresarios no sacan $5 de ganancias, venden boletos en miles de pesos e incluso obtienen cantidades millonarias. Si hay para pagarle a grupos como Guns N’ Roses también lo hay para hacerlo con los nacionales, los cuales muy seguramente no cobrarán ni el 0.01% que la carta más fuerte del evento.

Si tienes un grupo nacional y aceptas tocar con este festival sabes muy bien a lo que te atienes, incluso en la edición de este año vimos regresar a varias bandas mexicanas que en años pasados ya habían expresado su inconformidad y no se mantuvieron valientes en su postura, así que no todos son víctimas en esta historia.

Reprobamos la burla del Hell and Heaven (porque no puede llamarse de otra forma) con su confirmación de la participación de Cemican, claramente se lee un “Hell and Heaven está comprometido con el talento nacional”, por supuesto que no, las mismas bandas nacionales dejaron en claro que no hay respeto ni compromiso con los grupos mexicanos, además de que este acto emergente fue en reemplazo de Gwar, del cual no se anunció nada sobre su cancelación.

Metalhead, reportero de Pólvora desde el 2014 y redactor para noticieros de televisión. Apasionado de escuchar discos de principio a fin, las películas de más de dos horas, además de un gran entusiasta y escucha de la escena de metal de México.

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