Obituary en el Circo Volador: headbanging y moshpit por 90 minutos

Todo parece que vuelve a tomar su curso, ya no solo los festivales grandotes se llenan, ya es más común ver los shows en solitario con grandes entradas y en este caso de Obituary, un sold out en el Circo Volador.

No importa el género, la gente está regresando a ver a sus bandas favoritas sin necesidad de un megacartel, es así como se activa realmente la escena (rock, indie, ska, punk, lo que sea) y por alguna razón, estos últimos meses el heavy metal ha estado muy activo.

Ni la lluvia, ni el metro atolondrado por la cantidad de gente y el clima detuvieron a los metalheads para llegar al Circo Volador. Desde afuera la clásica vendimia con playeras casi todas iguales, sin embargo, dentro del lugar estaban las oficiales vía Unreal de mejor calidad, aunque obviamente a otro precio (claro, no tan altos como los de Rammstein o Iron Maiden).

Unos días antes se había anunciado el lleno y que no habría más boletos, así que se esperaba que desde la banda invitada Xyat, eso estuviera atascado y así fue. Para cuando ellos terminaron su set, el cual armó buen ambiente y calentó motores, uno ya no podía moverse libremente. El calor ya era evidente de tanta gente.

Claro, se habla mucho de porqué fue en el lobby y no mejor pasar el show al escenario grande cuando se anunció el sold out, pero la razón principal es costos. En este caso, el lobby y el otro escenario tienen rentas muy distintas y solo porque algunos que se esperaron al último día para comprar su boleto (el cual se anunció hace mucho tiempo) nadie iba arriesgar el evento a que se viera vacío o en lo económico. Si se hubiera hecho sold out una semana antes, otro gallo cantaría.

Eso sí, hubo varios que intentaron comprar algún boleto en la taquilla y al no lograrlo se quedaron a escucharlo fuera, otros si de plano ni el intento, pero cambiaron su dinero por six de Carta Blanca o Kosakos azules.

LA VIEJA ESCUELA DE OBITUARY EN EL CIRCO VOLADOR

Música de fondo a la espera, la cual no fue mucha y alrededor de las nueve de la noche salió Obituary, “Redneck Stomp” prendió la mecha mientras ya todos gritaban, levantaban puños y cuernos al aire y se preparaban para el moshpit, que nació en el momento que Terry Butler les hizo la seña desde el escenario mientras el vocalista John Tardy salía a escena para “Sentence Day”.

Para este momento ya no había más cervezas voladoras por el hecho de que ya habían aventado todas las posibles, un frenesí por hora y media. Uno donde con los primeros riffs toda la legión presente sabía que tema era y si bien prepara su celular para algún recuerdo, otros lo usaban para saber si entrar o no al mosh.

El show recae en John, no hay duda que recorre todo el escenario una y otra vez, sin embargo, lo que hace Trevor Peres y Kenny Andrews en la guitarra, Terry Butler en el bajo y Donald Trady es brutal, son unas máquinas de riffs y golpeteos, no tienen descanso y aunque no hablen o se muevan mucho de su spot (tampoco son unos muebles como otros) llama mucho la atención su velocidad y sonrisa durante todo el show, realmente disfrutan tocar y eso se contagia abajo del entarimado.

Fue un show de death metal de la vieja escuela para fans con actitud de vieja escuela, incluso las luces como dictan estos shows basadas en rojos y azules. Las escaleras del lobby del lugar atascadas también, así que parecía estábamos 10 años atrás cuando la gente iba a los conciertos a pasársela bien sin ponerse muy quisquillosos. También los de Florida recetaron con brutalidad y sin descanso su set, el cual duró aproximadamente 1 hora con 30 minutos y salieron deshechos físicamente de tanto headbanging.

SETLIST DE OBITUARY

1. Redneck Stomp
2. Sentence Day
3. A Lesson in Vengeance
4. Visions in My Head
5. A Dying World
6. Find the Arise
7. Dying
8. Don’t Care
9. Threatening Skies
10. By the Light
11. Chopped in Half
12. Turned Inside Out
13. Deadly Intentions
14. I’m in Pain
15. Slowly We Rot