Depeche Mode se reinvindica y honra su pasado en Memento Mori

Memento Mori es la expresión en latín que significa “recuerda que morirás” y que designa una representación artística que sirve para recordar la inexorabilidad de la muerte, también es la frase que se les decía a los militares romanos cuando desfilaban victoriosos por las calles de Roma para recordarle las limitaciones de la naturaleza humana, con el fin de impedir que se volvieran soberbios.

La incertidumbre se acabó y Depeche Mode por fin libero su décimo quinto álbum, titulado Memento Mori uno de los más esperados del año no solo porque con la muerte de Andrew Fletcher en 2022 volvió el fantasma de disolución, sino porque desde hace casi dos décadas no han producido un trabajo relevante fuera de su círculo de fanáticos. Para nadie es un secreto que desde la salida de Alan Wilder ninguno de los álbumes posteriores ha logrado la calidad y la trascendía de sus trabajos previos, pues más allá de los conflictos internos, Wilder era el único miembro con formación profesional como músico.

Y es que después de escuchar sus últimos 3 álbumes, uno podría pensar que era mejor que se disolvieran con dignidad, sin embargo, hoy escuchamos con agrado que, aunque sus mejores épocas ya pasaron, por fin lograron evolucionar y nos traen un álbum maduro lleno de gratas sorpresas sonoras, así que sin más preámbulo pónganse cómodos en su sillón favorito, súbanle el volumen o pónganse sus mejores audífonos y denle al botón de Play.

Track por track de Memento Mori

Abre con “My Cosmos Is Mine“, experimental y atmosférica con guiños a Pimf, por momentos monótona, con un manifiesto contra la perdida de la privacidad en la era de la inmediatez, donde busca desesperadamente defender a toda costa ese pequeño cosmos personal contra cualquier invasor, algo así como como una estrella que se apaga y harta de los reflectores no desea seguir compartiendo ese cosmos de la vida privada, al que gustosos renunciamos en aras de la vanidad.  

De la introspección pasamos a “Wagging Tongue“, interesante reflexión acerca de la manipulación a través de las palabras y como una vez que se ha descubierto la naturaleza tramposa del la o el manipulador, es más fácil ver morir a otro ángel que dejarnos lastimar otra vez.

En “Ghosts Again“, hermoso tema sobre sobre lo efímero de la vida y porque debemos vivirla al máximo, nos recuerda que sin importar lo que hagamos, todos volveremos ser fantasmas otra vez.

Poco a poco va mejorando y llegamos con “Don’t Say You Love Me”, ahora si este es el regreso de Depeche Mode, vuelven los sonidos atmosféricos, los juegos de palabras sensuales y las metáforas al estilo Music For The Masses, exquisita balada sobre el amor y sus demonios, nos susurra al oído “Tu eres el cantante, yo soy la canción, la melodía que perdurará, el sabor amargo que queda en tu lengua. Serás la asesina, seré el cadáver, serás la risa, y yo seré el remate”, cierra lapidaria.

“My Favourite Stranger”, ¿quién ese extraño que a hurtadillas se cuela en nuestras vidas? Nos roba la sombra, pone palabras en la boca, y acecha nuestro sueño.  Con “Soul With Me“, vemos otra vez a Martin Gore, en el papel de solista, pero ahora con un estilo más cercano al de un retirado pianista de bar, bien puede escucharse tomando un whisky en las rocas, mientras reflexionamos sobre el momento en que morimos, con estas excelsas líneas “Estoy listo para las páginas finales. Un beso, un adiós a todas mis jaulas terrenales, estoy subiendo las escaleras doradas”.      

“Caroline’s Monkey” la sombra de I Feel loved pero mejorada y de qué forma, arreglos como no se le escuchaban a los Mode desde Exciter, precisos y contundentes, metáfora del ego y la naturaleza humana, “desvanecerse es mejor que fallar, caer es mejor que sentir, doblar es mejor que perder, arreglar es mejor que curar, a veces”.

En “Before We Drown” las relaciones de pareja y sus altibajos sobre todo cuando a pesar de estar acompañados nos sentimos solos “Tengo la sensación de que no estás de mi lado, Hay una distancia, entre tú y yo, tú y yo” y perecemos ahogados en las profundidades de la soledad.

“People Are Good” con reminiscencias del Some Great Reward e incluso un guiño a “I Feel You”, no solo en el nombre sino en el sonido que aunque menos industrial no pierde fuerza en un tema que busca mantener la fe en la humanidad cuando basta ver las noticias para saber que a veces es imposible tenerla, nos dice: “Sigue recordándome a mí mismo, que la gente es buena, y cuando hacen cosas malas, solo están sufriendo por dentro, seguir engañándome, que a todos les importa, y todos están llenos de amor”.                    

 Con “Always You“, oda al amor como fuerza suprema de la vida, donde no importa, lo mal que se vea el panorama o que el mundo se vaya por el caño, si se tiene alguien te ame, estás salvado,: “Y luego estás tú siempre estás tú, la luz que me saca de la oscuridad, y luego estás tú, siempre estás tú, tu gracia y santidad son infinitas”.  

El final se acerca y “Never Let Me Go” nos prepara para eso, la voz de Gahan vuelve a sonar como en sus mejores épocas, las relaciones de pareja y el amor, uno al que a pesar de todo no se renuncie ni se deje ir, “seremos faros, brillando tan brillante, como estrellas en la oscuridad, para los amantes de la noche, nunca me dejes ir”.

Cierra magistralmente con “Speak To Me” al estilo M83, homónimo del que abre el legendario Dark Side Of The Moon, monologo, sobre la necesidad de ser escuchado, en la era de la paradoja: Opulencia mediática-Pobreza comunicativa. “Dime, que estás escuchando, dame algún tipo de plan, dame algo, serías mi droga preferida, tú me llevas, yo sigo, tu voz”, canta desde las profundidades de la soledad y la desesperación, en un tema que bien pudo aparecer en Blade Runner o incluso en la serie The Last Of Us.

Es así como Depeche Mode logra hacerle honor al nombre de Memento Mori y recuerda que a pesar de haber creado algunos de los mejores álbumes no solo de su discografía a sino de la historia de la música, acepta sus limitaciones humanas, honra su pasado y se muestra humilde con su mortalidad musical.

Por cierto, Memento Mori será el primer álbum en reaparecer en formato de casete de cinta magnética de audio en color translucido rojo, formato prácticamente abandonado desde el inicio del siglo XXI, por lo que será una edición de colección, debido a que en la actualidad es difícil encontrar reproductores para ese formato.